Vendida como novia de un magnate -
Capítulo 24
Capítulo 24:
POV Sofía.
Mis ojos se abrieron un poco impresionados, y luego ella caminó para tomar mi brazo.
“Vamos a dar un paseo… ¿Te parece?”.
Era obvio que tenía que asentir a su indicación, era la más interesada en saber un poco, aunque tenía un miedo muy grande en el alma, por lo que sea que iba a saber, que no fuera a aniquilarme.
Caminar por los jardines de la mansión junto a Helena me proporcionó una sensación extraña, el sol ya había caído, las luces del jardín se estaban encendiendo. Por un lado, estaba ansiosa por conocer la verdad detrás de Camila y su relación con Gael, pero, por otro lado, temía que lo que descubriera sacudiera aún más los cimientos de mi vida.
“Sentémonos aquí”, ambas nos sentamos y la miré fijamente pasando un trago.
“Estaba allí… porque… yo”.
“Sé por qué… te importa Gael y no te explicas cómo ella está aquí. Y te diré algo primero Sofí, me alegra que quieras a mi nieto de alguna forma”.
Quité mi mirada, observando mis manos juntas.
“Él… ama a su exesposa”, lo dije como si fuese necesario, e incluso el silencio que se instaló en el momento fue mucho para mí.
“Déjame decirte lo que pude percibir desde mi distancia, pero será Gael en algún momento que te aclaré todo el panorama”.
Asentí varias veces, ella tomó mi mano y me sonrió.
“Estoy segura de que, a mi hija, Marie, le hubiese gustado conocer una chica como tú”.
“¿Así se llamaba…?”, Helena asintió.
“Y era la persona favorita de Gael… tenían una conexión única… así que su muerte solo ha sido su peor pesadilla y la mía. También está el tema de Camila”.
“Puedo entenderlo”.
“Gael me dijo que tu papá murió en una operación, ¿No es así?”.
Asentí entendiendo que Gael no se guardaba nada para con ella.
“A veces Sofí, cuando algún pariente está enfermo, nos vamos asimilando. Y no digo que lo de tu padre ha sido duro, solo que…Gael siente que le arrancaron un pedazo de su vida sin anestesia. Se siente herido, traicionado, como si le hubiese clavado los puñales por la espalda”.
Mi mandíbula se tensó un poco.
“Mira… Gael conoció a Camila por un accidente”.
Mi ceño se frunció.
“¿Un accidente?”, ella asintió mirando hacia lo lejos.
“Casi la atropella… incluso la derribó al suelo. Gael apenas llegaba a México después de una larga estadía en E$tados Unidos. Recuerdo ese día como si fuera ayer. Estaba con Marie de compras en el momento que recibimos la llamada. Él dijo: ´no me esperen, estoy en el hospital…´ la chica solo tuvo algunas raspaduras, y un moretón en su pie. Mi nieto se hizo cargo de todo, e incluso la visitó. Camila, ella era una mujer muy dulce… pero tiene una familia un poco difícil”.
“Entonces… ¿Se enamoraron y?”, Helena me miró fijamente.
“Pude notar que Camila buscó a Gael muchas veces y él creó una situación hacia ella… como si quisiera protegerla después de ese incidente”.
Mordí mi boca un poco y pregunté.
“¿usted cree que nos parecemos un poco? Yo la vi…y”.
“Tienen algunas cosas… por ejemplo, la misma forma de los ojos, el mismo color de cabello… ambas tienen el mismo color de piel… pero tu mirada es diferente”.
Parpadeé varias veces.
“También Camila tiene 35 años, es mucho mayor que tú”.
Pasé un trago y volví a asentir.
“Entonces… ¿Se casaron al poco tiempo?”.
Helena asintió.
“Sí… ese fue el primer error de Gael”, mis ojos se abrieron ante la impresión de sus palabras.
“¿Qué?”, mi pregunta salió como un susurro.
“No tuvo malicia hacia ella… solo creyó en lo que vio, aunque no juzgo a Camila… nadie puede hacer un cimiento fuerte cuando esconde algo de su vida”.
“Estoy al borde con todo este misterio”, mi voz salió algo temblorosa.
“¿Camila y su familia son personas que no contaban con mucho dinero y a Gael le pareció fabuloso ser el hombre que supliera todo en su vida. Él estaba acostumbrado a otro tipo de relación, mujeres más exuberantes, más superficiales y Camila fue su primera diferencia.
“Lo entiendo”.
“Pero todo eso se cayó cuando él informó que se iba a casar y su padre no estuvo de acuerdo”.
Casi me reí de la pura ironía.
“Es algo irónico”.
“Lo es… y las diferencias entre padre e hijo crecieron mucho más con esa relación”.
“¿Cuál era la causa?”, Helena respiró hondo y luego miró sus propias manos.
“Gael solo lo supo un día cuando discutió con Camila, justo antes del accidente”.
“¿Después de tanto tiempo?”.
“Sí… él nunca quiso escuchara su padre… ¿Y quién lo escucharía? Rafael Bailléres fue un maldito con mi hija toda la vida y Gael solo creó resentimientos contra él. Nada de lo que él dijera, sopesaba para mi nieto”.
“¿Cuál fue la causa de la discusión?”.
Helena me miró después de mucho, y su mirada incluso minimizó mi entorno.
“Creo que Camila era una bailarina… el padre de Gael había visitado algunas veces el lugar donde ella trabajaba y ella siempre se lo ocultó a Gael… incluso le mintió sobre su pasado… y… Don Rafael dijo que ella hizo bailes privados para él muchas veces”.
“Cielos”.
“Así que aun cuando antes de casarse, Gael le contó su molestia con su padre, ella se lo escondió y le mintió. Después de tanto tiempo de casados, Gael lo supo porque se encontraron con una amiga de ella y al día siguiente, mi hija y ella tuvieron el accidente”.
Sentí un nudo muy grande en la garganta, mientras mi corazón latía con mucha fuerza.
“Sofía… cuando llamaron a Gael del hospital, nuestro mundo se desmoronó. Él incluso estaba enojado con Camila, y estaba llorando la pérdida de su madre, cuando le dijeron que Su esposa estaba en coma, y había perdido el bebé, que ni siquiera él sabía, llevaba en su v!entre”.
Mis manos se fueron a mi boca, y mis ojos se nublaron.
“Ambos decidieron no tener hijos… ni Camila, ni Gael los querían… por eso hice una broma contigo en la mesa. ¿Lo recuerdas?”, asentí rápidamente y limpié una lágrima de mi ojo.
“Yo… lo siento mucho”.
“Gael tiene una especie de cuenta pendiente con Camila… es como si quisiera liberarse de un peso, una cuenta no saldada, porque ambos estaban enojados con el otro cuando ella tuvo ese accidente. Ella está aquí porque… él… él a veces”.
“Piensa que puede despertar en algún momento..”., completé por ella, mientras Helena asintió un poco.
“Además, la familia de Camila le pidió un tipo de herencia por los daños causados y él eligió divorciarse y darles la parte que les correspondía. Sin embargo, Gael siente un tipo de resentimiento por ellas, ya que también fueron parte de una parte de Camila que no era en realidad.
Mi ceño se frunció mucho, miré hacia el sendero y luego solté el aire.
“Hay algo que no entiendo”.
“¿Qué cosa?”.
“Si los médicos han dicho sobre la muerte cerebral … entonces”.
Helena se agitó un poco y miró hacia atrás, parecía algo nerviosa y me di cuenta de que Gael ahora mismo venía a nosotras.
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