Una noche de resaca
Capítulo 14

Capítulo 14:

Maldita sea, ¿Por qué la había besado? Si iba a besarla, debería haberse detenido después de probarla, ¿Por qué el beso se hizo tan largo y er%tico? ¿Por qué era tan bueno? Incluso utilizó sus mejores habilidades para besarla. Era débil ante ella.

Pero… en serio… los labios de esta chica… saben tan bien… al ser besados, le costaba un poco controlarse, es como si una llama surgiera de su bajo vientre, provocándole una extraña sed.

Después de que Emmett soltara a Elaine, los estrechos y largos ojos hermosos destilaron el fulgor de un rey demonio. Una mirada codiciosa pasó por su lado, el rostro escarlata hizo que se quedara boquiabierta, junto a una ráfaga de calor podía sentir en su rostro.

Con un pequeño chillido, Elaine no pudo decir nada coherente estado apoyada en el pecho de Emmett. Jadeando mientras se hinchaba sus labios rojos.

Resoplando y jadeando…

No podía pensar en otra cosa, ¡Pero casi se muere! ¡Casi fue asfixiada por el beso de aquel hombre! Daba pena.

Emmett entrecerró los ojos y se quedó mirando a la criaturita que tenía entre sus brazos, con el cerebro acelerado, estaba pensando en que debía hacer. ¿Qué debía hacer ahora con ella?

¿Qué hacer?

¿Actuar según el plan?

El plan…

Finalmente, Elaine volvió a animarse, levantó la cabeza y gritó: «¡Qué hace! ¿Por qué me ha besado? ¡No estaba de acuerdo! ¡No acepté que me besara!».

Emmett, ligeramente sorprendido, levantó las cejas y le respondió: «¿Por qué? El joven presidente de una compañía te besa, pero ¿Tu sigues reacia?».

Lo que quería decir era… una mujer como tú, ¿Aún no es digna?

Por supuesto, Elaine lo comprendió, contuvo las lágrimas y cerró las manos en puños: «¡Ladrón! ¡Mi primer beso estaba destinado a mi senior! ¡No para ti! ¡Eres de lo peor! ¡Eres un auténtico desvergonzado! ¡El primer beso es un regalo precioso! ¡Y tú me lo has quitado todo! ¡Eres tan exasperante!».

Efectivamente… jajaja… Emmett pensó en secreto, ésta es la verdadera naturaleza de esta cosita, cuando está ansiosa es igual que un gatito erizado.

Emmett era muy sensible a la palabra ‘primer beso’. De repente, sus ojos se volvieron muy agudos. Con una mirada astuta, se burló de ella: «Ah, tu senior es tan lamentable, me diste tu primera vez, pero ¿Aún quieres darle tu primer beso? ¿Quieres decir que sólo él es digno del calor de tus labios?».

*Bum…*

¡Elaine se puso rígida de inmediato y le temblaron los labios! ¡Esta basura! ¡La clase de persona te hunde por diversión!

«¿Primera… primera vez?»

Emmett bajó la cabeza: «¿Por qué? ¿No lo fue? ¿No fue aquella noche entre tú y yo, tu primera vez?».

Mirando astutamente a Elaine, él vio el pánico y la impotencia que mostraba su rostro. Como esperaba, esta chica estaba más limpia que un trozo de papel blanco, Jajaja que divertido.

Entonces, Emmett prosiguió: «¿Quieres decir que no viste la sábana antes de irte? Tsktsktsk, un gran cuadro escarlata, la primera sangre de alguien siempre es impactante».

Su voz se hizo más suave, pero cada palabra entró definitivamente en ella: «Chica, tu primera vez ya me pertenece. Es decir, te entregaste a mí, de dentro a fuera, te he comido completa, ¿Por qué te sigue importando tu primer beso?».

Las pequeñas garras de Elaine taparon de repente la boca de Emmett, cubriendo sus sensuales y finos labios.

Emmett se quedó boquiabierto.

¿Esta mujer seguía siendo una mujer? ¿Cómo podía taparle tan bruscamente sus encantadores labios?

.

.

.