Un año para divorciarme -
Capítulo 90
Capítulo 90:
Ella se quedó observando la puerta por donde habían pasado y otras 2 parejas salieron y entraron, no había nada de amor ni bondad en sus ojos, así que Nadia supuso que por ahí eran los divorcios, le indicó a su acompañante y a travesaron la puerta, había unas escaleras, las subieron y se encontraron con otra habitación organizada de la misma manera.
Personas esperando alrededor y en el centro, las mesas, solo que las últimas dos mesas no atendían a nadie, había 2 mujeres sentada en ellas y estaban leyendo, firmando y revisando papeles.
Nadia supo de inmediato que había encontrado su destino, ahora solo necesitaba una distracción y poder acercarse a las mesas, sus ojos cayeron en Alejandro y lo guapo que era, se acercó a él, le quitó la corbata, desabrocho los primeros botones de su camisa y pellizco un poco las mejillas para sonrojarlo, complacida con el resultado sonrió.
Miró a Alejandro a los ojos y se percató que la observaba como si se hubiera vuelto loca.
“No me mires así, todo lo que tienes q hacer es acercarte a las últimas mesas, usar tus encantos masculinos y llevarte de ahí a las 2 mujeres para que yo pueda buscar el documento”.
“Me quieres utilizar, planeas vender”.
Alejandro se cubrió el pecho como si fuera una v!rgen inocente y Nadia puso los ojos en blanco.
“Para obtener lo que deseas, y que te hace pensar que nadie te va a ver buscando en las mesas”.
“Todo el mundo está ocupado, nadie se va a percatar de mí, ahora galán ve a por tus presas”.
Alejandro al final obedeció y se acercó a las mujeres, tal y como lo pensaba Nadia al segundo ellas estaban completamente enloquecidas con él, ella se fue acercando con cautela y escucho cuando él las invito a tomar un café y así los tres se alejaron.
Nadia no perdió ni siquiera un segundo y de inmediato se acercó a las mesas rebusco por todas partes, pero no encontró el papel con el nombre de su jefa, maldijo mentalmente y se quejó por haber tantas personas que se querían divorciar, rápido fue hasta la próxima mesa busco por todas partes y nada, justo en ese momento se acercó un hombre y alma se le subió al cuerpo pensando que iba a ser descubierta.
“Buenas tardes dónde está Olga”.
“Salió a tomar un café”.
Respondió de forma natural y se sentó como si trabajará allí.
“Me pidió que vigilará un segundo, mucho gusto soy Anastasia su sobrina”.
El hombre pareció pensarlo un segundo.
“No sabía que Olga tuviera una hermana, o sobrina, pero mucho gusto, soy Francisco el mensajero, vine a entregarlo otros documentos, dile que estos tienen prioridad”.
Nadia sonrió con dulzura y acepto los documentos, cuando los reviso suspiro aliviada al encontrar por fin el acuerdo de divorcio de Sara, guardo el papel en el bolso y salió de inmediato de ahí. En el camino se encontró con Alejandro y las dos mujeres, sin pensarlo mucho se acercó y le dio una sonora cachetada.
“Así me pides perdón y quieres que me case contigo, no puedo dejarte solo un par de minutos que en seguida te vas con cuanta aparecida te encuentras”.
Alejandro se flotaba el rostro perplejo, pero de inmediato entendió lo que sucedía.
“Yo no me fui con nadie solo tomaba un café, cariño no te pongas así”. le respondió con voz dulce y dio un paso al frente alejándose de las mujeres.
“No me llames cariño, mujeriego y vete que no quiero tener nada que ver contigo”.
Nadia lo esquivo y salió caminando rápido, Alejandro a las mujeres les sonrió en disculpa y salió corriendo detrás de Nadia.
“Cariño perdóname”.
Cuando por fin estuvieron lejos Nadia se detuvo y se giró hacia Alejandro.
“Yo… lo siento mucho, no quería hacerte daño, pero fue lo primero que se me ocurrió”. Alejandro sonrió al verla nerviosa y sonrojada.
“No te preocupes, hace falta mucho más para hacerme daño de verdad. Pero dime por favor qué lo tienes y todo esto no fue en vano, no quiero tener que volver ahí y me des otra cachetada que me empareja el rostro”.
Nadia sonrió y unos pequeños hoyuelos se marcaron en ambas mejillas.
“Si, lo tengo”. dijo sacando el documento. Alejandro suspiro.
“Las cosas que tenemos que hacer por nuestros jefes.
La pareja se marchó conversando animadamente y Alejandro la invitó a tomar una copa esa noche, Nadia acepto encantada y cuando se separaron ella por fin entendió que acababa de aceptar salir a una cita con Alejandro, su corazón comenzó a bombear con fuerza y sintió algo en el estómago, no podía identificar que era, pero lo cierto era que le gustaba sentirse así.
.
.
.
Nota de Tac-K: Pasen una linda linda tarde lindas personitas, Dios les ama y Tac-K les quiere mucho. (─‿‿O)
.
Si encuentras algún error (contenido no estándar, redirecciones de anuncios, enlaces rotos, etc.), por favor avísanos para que podamos solucionarlo lo antes posible.
Reportar