Presa entre tus brazos
Capítulo 146

Capítulo 146:

No sabía porque le dolía la muerte de Deborah.

Ella nunca demostró tener por él ni una pizca de cariño cuando menos, siempre fue cruel, no tenía un solo recuerdo donde le mostrará algo de cariño.

A pesar de ser muy pequeño cuando lo abandono, su desprecio se había grabado muy bien en la mente de Bruno.

“Llamaré para que tengan listo el jet, me iré en cuanto me avisen que puedo abordar”, le dijo con infinita tristeza.

Le dolía dejar a Nicole, quería estar a su lado y protegerla.

“Me iré contigo, no pienso quedarme aquí en esta incertidumbre, y no estoy preguntando si puedo hacerlo, estoy diciendo que iré”

Nicole lo dijo a punto de llorar.

Sabía que ella quizá ya no regresaría de ese viaje.

“De ninguna manera, no te arriesgare”

Bruno temía que pudiera perder al bebé.

“Si no voy contigo, lo haré en un vuelo comercial, tú decides”.

“Definitivamente no Nicole, es muy peligroso, no lo permitiré”.

“¿Y qué harás para impedirlo? ¿Quizás encerrarme? Tal como lo hacías antes”.

A Bruno le dolieron sus palabras.

Bajó la cabeza y se quedó callado.

Se sintió avergonzado al recordar el pasado.

“Subiré a arreglar el equipaje”

Nicole se dio la vuelta para subir a su habitación.

Sara, Rina y Emma la siguieron para ayudarla.

Su v!entre ya era realmente grande.

“lrémos con ustedes”

René no permitiría que fueran solos.

“Yo igual”, dijo Dante.

“No, te lo agradezco hermano, pero debes quedarte al lado de tu esposa y tu hija, no podemos arriesgarnos todos a caer en manos de ese desalmado, así tu podrás estar pendiente y buscarnos ante cualquier cosa”.

Dante se entristeció, pero su hermano tenía razón, Sophie internamente se alegraba de que él no corriera ese riesgo.

“Nosotros también iremos, no dejaremos sola a nuestra hija, así Emma podrá quedarse con Nicole en lo que nosotros buscamos a Santi”.

“También iremos, nuestro lugar es junto a ustedes, apoyándolos”, le dijo Gío.

Bruno agradeció tener aquella familia.

Sabía que tanto René como Noah y Gío, habían estado buscando a Santi, tenían contratados a varios investigadores aunque sin ningún resultado.

“En verdad les agradezco su apoyo, sin su apoyo ya me habría vuelto loco”.

“Iremos por nuestro equipaje hijo, te veremos en el hangar en hora y media”

Los demás dijeron lo mismo, cuando Emma y Rina bajaron salieron de prisa para estar en el tiempo acordado.

“Mi niña, me gustaría ir contigo”.

“No nana, te lo agradezco, me gustaría que apoyaras a Sophie se sentirá nerviosa si se queda sola, Dante tendrá que estar en el Corporativo”.

“Está bien lo haré, pero prométeme que te cuidaras”.

“Lo prometo”

Abrazó a Sara.

Ella también era como su madre, siempre estaba cuando la necesitaba.

Sabía que sí los acompañaba, no podría hacer lo que le indicara Sergio, pues Sara no la dejaría sola ni un solo instante.

“Vamos, nuestros padres nos alcanzarán en el hangar”.

Nicole se dio cuenta por su tono de voz de que estaba molesto.

Tenía razón en estarlo.

Ella debería guardar reposo debido a su avanzado embarazo.

Dante y Sophie se acercaron a ellos.

“Peque, cuídate mucho, sabes que te amo como a la hermana que nunca tuve, por favor mantente en contacto”.

“Lo haré, no te preocupes y ante cualquier cosa que pase te pido que cuides a mi hijo, que trates de que crezca siempre en contacto con Danna”.

“Hey Cuñada, no digas eso, hasta parece que te estas despidiendo definitivamente, seamos positivos, esperemos que pronto atrapen a Sergio”.

“Eso espero, que ese hombre pronto esté tras las rejas”.

“Sería mejor que pronto estuviera muerto”

Le dijo Bruno apretando los puños.

Lo había puesto inquieto la manera en que Nicole se despidió de Sophie.

¿Es que acaso presentía que le pasaría algo?

Sintió que un terrible escalofrío recorría su cuerpo al pensar en eso.

“Hermano cuídense mucho, mantenme informado en todo momento porque si no lo haces cuando llegues me encontrarás sin uñas y sin un solo cabello”.

No pudieron evitar reír ante la ocurrencia de Dante,

poco después la pareja salía en dirección del aeropuerto, no hablaron en el camino, Nicole prefirió callar porque sabía que él continuaba molesto.

Al llegar al hangar ya los demás se encontraban ahí, subieron al avión, por un rato todos se quedaron en silencio, cada uno sumido en sus pensamientos.

No sabían si encontrarían a Santi, ya era demasiado tiempo en manos de sus captores.

El niño a estas alturas debía de tener un grave daño psicológico.

Nicole se levantó y se sentó junto a Bruno, que se mantenía alejado de ella.

“Sé que estas molesto, en verdad discúlpame, pero no podía quedarte y saberte lejos, estoy embarazada, pero eso no significa que sea inútil”.

“Entiendo tu punto de vista Nicole, pero también compréndeme, ya perdimos a un hijo, otro está secuestrado, es lógico que quiero proteger al que llevas en tu v!entre, si tan solo me hubieras hecho caso y no hubieras insistido en acudir a la oficina, nuestra hija estuviera con nosotros”.

Nicole se quedó helada al escucharlo.

Lo que le dijo indicaba que él la había estado culpando todo este tiempo y lo peor era que ella aún no podía recordar nada sobre eso.

Sophie le había contado lo que había sucedido y lo que Alizza había hecho.

¿Entonces porqué Bruno insistía en culparla?

Se quedó callada, levantó y se sentó lejos de él.

Él reflexionó sobre lo que había echo.

Ahora él se levantó y se sentí a su lado.

“Perdón, sé que no debí decir lo que he dicho, pero si te pasara algo o a nuestro bebé, no podría soportarlo”.

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