Loco por ella
Capítulo 341

Capítulo 341: Nada es obligatorio

«Tú sabes muy bien a quién desprecias. ¿Has olvidado cómo te tratamos en el pasado? Ahora vas a ser la hija de la Familia Nelson, y te impacientas cuando mamá y yo vinimos al hotel a visitarte. ¿Y qué querías decir hace un momento? ¿Crees que mamá sólo quiere dinero? No nos importa en absoluto, ¿Vale?». Christina estaba enfadada. Porque ella y Charlotte tenían un destino completamente diferente. Belinda había dedicado muchos esfuerzos a consolarla y ahora estaba perdiendo los nervios.

«Christina, no digas eso». Belinda se apresuró a agarrar el brazo de Christina y se dirigió a un lado: «Me lo prometiste antes».

«Pero es demasiado arrogante. Ahora nos trata así. ¿Qué nos hará cuando se convierta en una Nelson?»

Charlotte no tenía nada que decir, y acababa de despertarse con poca energía.

No quería perder los nervios con ellas, pero no le gustaba que Belinda sacara a relucir lo que había pasado en el pasado. Habían vivido juntas durante muchos años, y Charlotte sabía exactamente lo que quería.

Lo que quería era simplemente dinero.

Después de quitarle 300.000, seguía queriendo quitarle dinero a Charlotte, incluidas sus decenas de miles de dólares de ahorros.

«¿Es cierto que la Familia Nelson no me tratará mal?» Belinda sólo valoraba el dinero por muy duras que fueran las palabras de Charlotte. Como Belinda no recibió los cinco millones durante varios días, estaba muy ansiosa.

Ella quería cinco millones o incluso más, porque la Familia Nelson era rica.

«¡Mamá!» Dijo Christina con rabia: «No le pidas dinero. No necesitamos ese dinero».

«¡Cállate! Tú no sabes nada».

Belinda jaló a Christina hacia el otro lado, luego se acercó y dijo: «No soy vanidosa, es sólo que te he criado durante muchos años. El Señor Nelson dijo que me daría cinco millones, pero he creado todo tipo de oportunidades para que estudies además de criarte. Es más, si no fuera por Christina, no habrías podido convertirte en la Señorita Moore. Todo esto te ha sido de ayuda».

Charlotte sabía que Belinda no se conformaba con los cinco millones.

«¿Cuánto crees que te va a dar la Familia Nelson?»

Belinda respondió alegremente: «Cincuenta millones serán suficientes. Chris es tu hermana, espero que la Familia Nelson pueda cuidar de ella en el futuro».

Cincuenta millones…

Charlotte se burló y dijo: «Me sobrevaloras, ¿Por qué no me vendes a la Familia Nelson? Tú me vendiste a la Familia Moore y no valía tanto».

Belinda se quedó helada por un momento. Antes había recibido dinero por el matrimonio de Charlotte con la Familia Wilson. Efectivamente, no fueron 50 millones.

Belinda se apresuró a decir: «Es diferente, tú ibas a volver a casarte, y ahora eres la hija de la Familia Nelson. Debería recibir más».

Después de escuchar estas palabras, Christina preguntó: «¿Charlotte fue vendida a la Familia Moore? Si no fuera por ella, ¿Habría sido por mí?».

Belinda se apresuró a responder: «Chris, te equivocas. Eso se llama precio de novia, se cobra por casarse con alguien. La Familia Moore es rica, así que dieron mucho».

Charlotte había estado apoyada en la pared, sin decir nada.

«¿Precio de novia? Vender a tu hija va a suponer mucho dinero, ¿No? Por favor, no se preocupe, Señora Wilson, puede volver primero, le informaré de nuevo cuando esté hecho» dijo Charlotte con una sonrisa burlona.

De lo que se reía era de sí misma.

Pensó que tal vez fuera porque había sido una buena hija que Belinda sólo se preocupara por el dinero y no tuviera en cuenta sus pensamientos.

Después de que Belinda oyera que se le avisaría, el malestar en su corazón se disipó.

“Tú tienes que acordarte de avisarme, no te demores demasiado. Tú sabes que esos cobradores dan mucho miedo, o no volverás a verme». Charlotte no dijo nada, sólo la miró con indiferencia.

Después de un rato, Belinda dijo incómodamente: «Yo volveré primero, Chris se queda aquí contigo».

Charlotte quiso negarse en un principio, pero cuando dio un vistazo a Christina, aceptó.

Después de todo, Christina era inocente.

Christina nunca supo que Charlotte no era su hermana.

Realmente se consideraba su hermana.

Charlotte no dijo nada más. Cuando Belinda se fue, Christina se quedó en el mismo sitio y preguntó: «No te agrado, ¿Por qué quieres que te acompañe?».

Charlotte suspiró: «Chris, ¿Sabes que no soy hija de la Familia Wilson?».

Christina respondió sorprendida: «Me enteré hace unos días». Christina se quejó: «Tú eres hija de la Familia Nelson, y ellos han gastado mucho dinero para buscarte durante estos años. Y, ¿Por qué no fui yo?».

Estas últimas palabras fueron su murmullo, y Charlotte no las tomó en serio. Pero sabía que Christina estaba realmente enfadada, y se dirigió hacia ella.

«Sé que siempre me has tratado como a una hermana, pero éramos diferentes, así que siempre me dejaron hacer muchas cosas que ti no».

«Por supuesto que lo sé. Es necesario que una hermana mayor cuide de la menor.

Chris, nada es obligatorio en el mundo, incluidos los familiares. Me he portado bien contigo porque te considero una hermana, por eso te recibo y te tolero, no porque sienta que deba hacerlo, ¿Lo entiendes?»

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