La enfermera del CEO
Capítulo 131

Capítulo 131:

“Saldré a buscarlo en los alrededores, tal vez ha ido a ver a su amiguito del colegio», dice mi padre.

No se espera a que le digamos algo, sale disparado por la puerta sujetando su sombrero.

Un par de lágrimas escapan de mis ojos, Liam me abraza con fuerza y hace que lo mire a los ojos.

“Escúchame bien, lo vamos a encontrar, no te preocupes. Lo primero que hay que hacer es llamar a la policía».

“Está bien», digo con voz temblorosa.

En medio de ese caos, mi celular comienza a sonar. Lo tomo con brusquedad y respondo sin siquiera ver el número, podría ser algo sobre Caleb.

“Madison, soy yo Patrick.

Ah, Patrick, ahora no es un buen…

“Espera, no me cuelgues. Imagino que debes estar muy angustiada, te llamo para tranquilizarte. Tu hijo está bien, se encuentra aquí en la casa de Alec».

“¿Qué? ¡¿Qué está haciendo allá?! ¿Él lo buscó?», pregunto con agitación.

De todos los lugares a donde pudo haber ido, en ningún momento se me habría ocurrido que iría a ver a Alec.

No se me ocurre qué podría ir a buscar allá.

“¿Dónde está?», me pregunta Liam, pero yo le hago un amago con la mano para que espere.

“No, tu hijo se apareció solito frente a la puerta. Desconozco cómo hizo para llegar. Alec me pidió avisarte, para que estés más tranquila».

“Que no se mueva de ahí, ya mismo iré a buscarlo».

“No te preocupes, estará bien cuidado aquí. Ahora están conversando en el jardín y Alec le mandó a traer algunos bocadillos».

“¿Él está bien? ¿No está herido o asustado?»

“Para nada».

Le agradezco a Patrick y cuelgo enseguida. Alisto mis cosas mientras Liam me mira con los brazos cruzados, esperando que le explique qué pasa.

“¡Madison!», grita.

“Lo siento, lo siento. No tengo la cabeza bien centrada ahora. Ya sé dónde está Caleb, iré a buscarlo ahora».

“¿Dónde?»

Me detengo en seco cuando sé que tengo que contestar esa pregunta. No me había dado cuenta de que volvería a la casa de Alec.

“Ha ido a ver al hombre que cuidaba».

“¿El CEO? ¿Ese que todo el mundo dice que ha sido infiel contigo?»

Cuestiona, aún cruzado de brazos.

“Sí, sí».

Liam no sabe de todas las cosas que Alec ha hecho por mí y por mi hijo.

No creí apropiado decírselo.

“No entiendo, ¿Qué está haciendo allá?»

“Yo tampoco lo sé, pero iré a buscarlo y lo averiguaré. Voy contigo, no pienso dejarte sola en esa casa».

No puedo ponérselo a discusión, si me niego se verá mucho peor.

Antes de salir llamo a mi padre para tranquilizarlo y explicarle la situación. Insiste en acompañarnos, sin embargo, ya Liam y yo hemos partido.

Mi susto ha pasado a ser preocupación, angustia, por cómo se desarrollará ese encuentro entre los tres. Solo temo que Liam se dé cuenta de la verdad que he tratado de enterrar en lo profundo de mi corazón, y no dejo de preguntarme por qué Caleb ha decidido ir a buscarlo así, sin más.

Ya me ha preguntado una vez si lo quiero, nunca le contesté aquello, pero ahora temo que Caleb haya malinterpretado todo, o quizá, entiende mucho más de lo que sospeché.

POV Alec

Caleb tiene mucho que contar.

Después de mandar a la cocinera a hacer algunas galletas para él, se sienta a la mesa en el jardín.

Yo me quedo frente a él, mientras se llena la boca con la golosina.

Se ve particularmente adorable, su inocencia me hace creer que todavía queda algo de bondad en este mundo podrido.

“Entonces, ¿Por qué crees que tu madre me extraña?»

“Ella no se ha dado cuenta, pero en las noches, se sale a la sala y se queda en el sillón hasta que se queda dormida. En sueños dice su nombre.»

“¿Mi nombre?»

“Ajam»

Afirma con la cabeza, al tiempo que menea los pies de un lado a otro.

“Pero eso no significa que ella me quiera. Quizá son pesadillas.»

“No, yo la conozco. Ella cree que no me doy cuenta de las cosas, pero sí lo noto.»

Abro los ojos con sorpresa, la verdad es que no me esperaba que un niño de siete años tuviera tal capacidad de percibir las emociones de su madre, aunque, pensándolo bien, tiene bastante lógica.

“Si sabes todo esto, ¿Por qué no hablaste con ella en lugar de venir aquí?»

“Porque mamá no hubiera aceptado que se vieran otra vez, en cambio si yo venía, podría pedírselo a usted.»

“¿Y qué hay de Liam? Sé que él ha vuelto, ¿acaso no es tu padre?»

“Mmm»

Se encoge de hombros y le da un mordisco a otra galleta.

“Bueno, no puedo pedirle tanto tampoco. Él no tiene la respuesta, ni siquiera Madison o yo la tenemos.»

Creí que cada quien había tomado su decisión, sin embargo, el hecho de que este niño esté aquí diciéndome todo esto me da la esperanza de creer que Madison no ha sido del todo sincera.

Tal vez cuando venga a buscarlo pueda hablar con ella al respecto.

“Espérame aquí, iré a hablar con mi enfermero un momento.»

Caleb asiente y sigue en lo suyo comiéndose las galletas. Patrick viene como si lo hubiese llamado con la mente.

“Ya le he avisado a Madison de que el niño está aquí. Ya está en camino a buscarlo.»

“¿A la casa?»

“Pues sí.»

“¡No! ¿Estás loco? Los periodistas están acechando mi casa como buitres, aunque mi abuelo los haya echado, estoy seguro de que están por ahí tratando de captar cualquier cosa que pase. Será un milagro si no han visto a Caleb, pero no creo que si ella se aparece por aquí, no la noten.»

“De eso no me dijo nada.»

Resoplo y me froto las sienes con los dedos.

Es verdad, aun así, este tema me pone muy nervioso.

“Llámala de nuevo y dile que nos veremos en el parque de diversiones ‘Austin’s’, ahí pasaremos más desapercibidos.»

“Muy bien, le avisaré.»

Mientras él hace eso, yo vuelvo con el pequeño Caleb.

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