Entre dos CEO’s
Capítulo 54

Capítulo 54:

“¡John por favor!”

Responde ella ya sonrojada.

“¿Me dirás que no me extraña como yo te extraño a ti? ¿Dirás que he cruzado este infierno sólo, extrañando tu piel y la manera en que me tocas?”.

“No puedes ni siquiera comparar mi sufrimiento con el tuyo, Señor Ferrari. Yo te he extrañado. Tú lo has hecho por satisfacción propia”.

“Pues sí que me he golpeada fuerte, ¡Como nunca antes lo hice! Ahora deseo besar tus labios y tocar tu piel. Pero me voy a resistir, yo soy un hombre que respeta la decisión de una mujer, te dejaré algo bastante claro. Te tocaré solo si desea”.

“Imagino que ya lo has hecho en otra piel y con otra persona”.

“Eres única Amanda. Por favor trae tú a nuestros niños para seguir está conversación”.

“Lo pensaré”

Ella cierra la llamada con una gran sonrisa, luego se tira en la cama abrazando aquel celular y extrañando a su amor,

Llegó el viernes. Amanda tenía todo preparado para viajar, no le había confirmado a Jhon, que sería ella misma que llevaría a los niños, pero desde aquella llamada tenía una gran inquietud y quería encontrarse con él ya que también lo extrañaba.

“No sabía que estabas tan decido a regresar, como me habías dicho que debía ir yo ya me estaba preparando”

“Pues he decidido ir. Ya que empresa de textil a llevar unos dibujos que he hecho en mis tiempos libres. He diseñado una nueva línea, también tengo que recoger algunos cheques, quizás no regrese hasta la próxima semana”.

“Quizás te quedes con el papá de tus hijos y con tus hijos, pasando el fin de semana. No tienes por qué ocultarlo Amanda”.

“Sí no es de ti sola que me oculto madre, hasta de mí misma lo hago, no sé cómo voy a reaccionar cuando este frente a él. Aún no decido si acompañarlos todo el fin de semana, aunque estoy lista para hacer el viaje, yo misma no controlo lo que pueda pasar y lo que siento, estoy ansiosa”.

“La vida nos da oportunidades que debemos aprovechar y nunca he defendido a nadie, pero Jhon se merece una oportunidad y tú lo sabes muy bien. Por eso lo has considerado. Cualquier decisión que tomes, me llama, no detengas el caudal de sentimientos que llevas dentro. ¡Atrévete y se feliz!”

“Tampoco quiero irme y dejarte aquí sola madre”.

Se acerca Amanda y toma su mano.

“¿Quieres viajar conmigo?”

“No quedaré sola, por lo menos aquí ya tengo provisiones y estará Gabriel. Imagino que Carlos en el transcurso del fin de semana, trae Aarón. Yo estaré aquí para recibirlo, tú ve tranquila y disfruta ¡Haz lo que tu corazón te dicte! Hija y recuerda que la felicidad siempre es lo primero”.

“Llevaré tus palabras presente madre, si aquí estoy con mis maletas y lista para marcharme, es exactamente lo que estoy haciendo, dejándome llevar por mi instinto, no sé hasta dónde esto me llevará. Pero no puedo controlarlo ¡Me rindo!”

En ese momento se escucha las bocinas afuera.

“Bueno ahora sí me despido, al parecer ha llegado el taxi que pedí. Cualquier cosa me mareas y estamos en contacto”.

“Espero puedas tomar una decisión y nos devolvamos. Extraño algunas cosas de la ciudad que no tenemos aquí. Aunque ya casi tenemos un año de habernos establecido en este lugar, no me acostumbro por así decirlo”.

“¿Te hace falta Edgar mami? Dices que te oculto cosas, pero te he escuchado hablarle por teléfono, estoy convencida que quieres regresar por él. Por esa razón te invito a venir conmigo”.

“Ni siquiera por mi edad tengo derecho a tener privacidad”

Charo pone sus ojos en blanco, ante las palabras te Amanda.

¡Y no! He estado hablando con Abraham, Edgar es su chófer y quién conoce de nuestros escapes. Él ha venido a visitarme y pasar un fin de semana en este lugar. Me ha invitado a pasear, pero cómo vas a salir cenamos mañana juntos”.

“A mi regreso debes contarme los detalles. ¡No te lo puedo creer! Él es un hombre de confianza, ya que es familia de Carlos. Disfruta madre, mereces lo mejor. Ahora me marcho, si mi instinto no me deja acercarme a Jhon, pues me devuelvo. Mi prioridad es pasar por la empresa, ya que se me ocurrió una nueva marca, donde viene completa, zapato accesorio, y carteras. Lo he dibujado todo y deseo presentarlo”.

“Estoy segura que será todo un éxito”.

“Como tendrás visitas llamaré a Carlos para que se quede con Aarón hasta el lunes, así podrás disfrutar del fin de semana”.

“Ella escucha nuevamente las bocinas de aquel auto y se dirige a la puerta con el carrito de los niños y una maleta. Camino hacia el auto estando cargada, cosa que le dificulta ver la persona que vino a recogerla”

“Pensé que tenía una chica de servicio que te ayudaba, al ser madre de gemelos no nada fácil y mas cuando vas a salir del país, por ejemplo este momento”.

“¡Dijiste que no vendría! ¿Cambiaste de opinión? En este momento me dirigía a llevarte los niños”.

“No recibí ninguna respuesta de tu parte, por eso vine a buscarlos. Tengo todo planeado para este fin de semana y no quería pasarlo sin ellos”.

“¡Genial! en la maleta está todo listo”.

Ella se queda inmóvil, no sabía que reacción hacia ese hombre en ella, pero sí que la estremecía. Acomodaron todo en el auto.

“He comprado dos sillas de bebé para el auto. No sabía cómo hacerlo, pero en la tienda me sentí muy bien”.

“Cosas normales de nuevos padres ¡Qué bueno que lo disfrutes! ¿Podrás viajar solo con ellos?”

Pregunta ella, disimulando todo lo que siente en ese momento.

“Dijiste que viajaría de regreso para hacer algunas diligencias. También debo regresar a buscar algunas cosas, y luego viajamos a la finca. Tranquila Amanda, te dije que iba a respetarte pero si tampoco quiere estar en mi compañía lo entiendo”.

Él sigue acomodando las cosas y cuando todo está en el auto, procede cada uno a subir un bebé.

“¡Bien! Olvide algo dentro, voy por esto y nos vamos”.

Amanda entra por los documentos ya que aún sigue la duda de ir con ellos o quedarse con Sofía. Como pasarán por la empresa va aprovechar para tratar de decidirlo

“¿Los niños siempre duermen?”

Pregunta Jhon algo curioso al regreso de Amanda

“En los primeros meses, a pasan durmiendo, y en las noches algunas veces despiertan a comer”

“¿Y si no disfrutan del paseo? Aún están muy pequeños ¿Qué piensas?”

“Los niños nunca son pequeños para que su padre disfrute de ellos y lo conozca. Pensé que me habías dicho que era lo que deseabas hacer”.

“Solo expresé lo que pensaba Señorita Castro. Es lo que deseo y lo que haré. Solo que los estuvimos moviendo y aún siguen dormidos, me pareció curioso. Bueno, no te retrasaré más, ¡Vamos!”

Jhon paso todo el tiempo en el auto mirando al camino. En aquel vehículo había una tensión bastante fuerte, ya que ambas personas querían demostrarse todo el amor y el afecto que siente uno por el otro, pero Jhon tenía miedo a ser rechazado y Amanda quería ser fuerte. Ninguno emite palabras hasta llegar al aeropuerto donde John recibió una llamada.

*¡Ring, Ring, Ring!*

“¡Por favor, toma la llamada! debe ser la chica que me acompañará a cuidar de los niños. Le dije que le llamaría en la mañana y se me hizo casi imposible por venir hasta aquí”.

Amanda ve la foto de aquella chica. ´Una chica joven y muy atractiva` mira el teléfono y luego mira en dirección a Jhon con una ceja levantada

“¡Si hola!”

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