Enamorado de mi ex esposa
Capítulo 1697

Capítulo 1697:

En su estado actual, debía permanecer en el hospital al menos dos o tres meses, pero podía utilizar otro método y recuperarse en un mes después de que Timoteo la examinó.

Tenían que darle crédito al médico genio, después de todo.

Los demás médicos observaron a Timoteo, complacidos. Después de todo, nunca se les habia ocurrido el método que propuso y, en ese momento, se vieron beneficiados por su visita. Solo se arrepentían de que Timoteo no trabajara en el hospital, sino aprenderían mucho más de él.

‘¡Oh! Debe ser espléndido trabajar en el Hospital Primer Mundo’.

Julia estaba contenta también. Nadie quería permanecer en cama y ser cuidado por los demás, y ella no era excepción.

Además, se preocupaba por Amber y quería estar cerca de ella para cuidarla todo el tiempo, pero, debido a su estado, no tenía más opción que aceptar el hecho de que debía permanecer en cama por dos o tres meses.

Eso era sin duda, algo bueno, ya que podría regresar al lado de su hija en menos de un mes.

“En ese caso, Doctor Laguna, podría…”.

Miró a Timoteo con la intención de preguntarle si podía operarla.

Sin embargo, este la interrumpió antes de que pudiera terminar.

“Otros médicos pueden realizar la operación siempre y cuando sepan llevarla a cabo”.

En otras palabras, no estaba dispuesto a operarla él. Ya había sido difícil tener que examinarla.

Julia también sabía eso, así que no insistió.

En cualquier caso, estaba satisfecha de que alguien pudiera realizar la cirugía.

“Bueno, entonces. Gracias por examinarme, Doctor Laguna”.

Le agradeció.

“Bueno”, respondió antes de salir de la habitación.

Los demás médicos fueron detrás de él para consultarle cómo realizar la cirugía, dejando solo a Tadeo, Julia, Amber y María en la habitación.

Mirando a Amber, Tadeo preguntó de pronto: “Amb, ¿Puede ser que Timoteo esté enamorado de ti?”.

Amber estaba bebiendo agua y, cuando escuchó eso, de inmediato, se ahogó.

María se apresuró a darle palmadas en la espalda.

“Joven Ama Amber, ¿Está bien?”.

“Estoy bien”.

Amber sacudió la cabeza para indicar que estaba bien.

Al ver que estaba mejor, Tadeo y Julia suspiraron, aliviados.

“Lo siento, Amb. No fue mi intención”, dijo a modo de disculpa.

“Está bien, solo me sorprendí por lo que dijo”.

Amber sacudió la cabeza, Tadeo se sintió aliviado de que aceptara su disculpa y de que quisiera hablar con él.

María se rio.

“Así es, Presidente García. ¿Cómo puede decir que el Doctor Laguna está enamorado de la Señorita Amber? Incluso a mí me parece ridículo, mucho más a la Gran Ama Amber”.

Se sorprendió por la pregunta de Tadeo.

“Lo observé durante un rato recién”, explicó Tadeo.

“Se preocupa mucho por Amb; de hecho, si no hubiera sido por ella, no habría venido a vernos. Es por eso que pregunté si sentía algo por ella”.

Después de todo, Timoteo era muy amable con ella.

“No, no es que sienta algo por mí. Anhela mi cariño”.

Amber sacudió la cabeza.

“¿Qué quieres decir?”, preguntó Tadeo ya que no entendía lo que eso significaba.

“Le salvé la vida cuando era un niño, así que me considera su salvadora desde ese entonces. Bueno, se encontró con la persona equivocada antes, pero desde que confirmó que yo fui quien lo salvó, ha sido muy amable conmigo. Me cuida mucho, pero no es porque le guste. En cambio, nunca mostró que le importara nadie. Todos lo odian y resienten, pero él no se sintió mal por eso, aunque yo sé que si se lo tomó a pecho. Es por eso que me considera como su referente y siempre me ha cuidado”.

Eso se debía a que Amber fue a única persona que lo hizo sentir querido.

No era que, Timoteo no tenía sentimientos, sino que le costaba expresarlos.

“Ya veo”.

Tadeo asintió ya que entendió.

“Pensé que estaba enamorado de ti, así que iba a decirte que le prestaras más atención a eso”.

Pensándolo bien, sin embargo, si Timoteo estaba enamorado de verdad de Amber, no habría forma de que Jared no lo supiera. En realidad, Jared sabía que Timoteo no sentía amor por Amber, sino que era dependiente emocionalmente de ella, razón por la cual dejó que hiciera lo que quisiera.

Entonces, de pronto apareció uno de los guardaespaldas en la puerta.

“Se hace tarde, Señorita Amber”, le recordó.

“Debe realizarse la cirugía esta tarde”.

Tadeo y Julia se preocuparon y le preguntaron con prisa: “¿Cirugía? ¿Qué cirugía?”.

“No se preocupen”, respondió María, sonriendo.

“No es una cirugía importante. Es una operación de la vista. La Señorita Amber pidió una cita ayer para realizarse un trasplante de córnea hoy”.

“Ya veo”.

Tadeo y Julia se sintieron aliviados.

“Bueno, en ese caso deberían regresar”.

Se puso de pie para despedir Amber y María. En realidad, estaba reacio a que se fuera, pero su vista era más importante.

“Adiós”.

María ayudó a Amber a salir de la habitación. Después de asentirle a Tadeo, se dirigió con Amber al ascensor.

Tadeo se mantuvo de pie afuera de la habitación mientras las veía desaparecer.

Después de que entraron al ascensor, suspiró y se giró adentro. Ya estaba cerca de fallecer y veía a Amber cada vez menos en cada reunión. En ese momento, no sabía si la volvería a ver.

La cirugía de Amber salió bien. Después de salir, le cubrieron los ojos con una gasa, que no podría quitarse por un largo tiempo. Con los ojos cubiertos, no podía hacer nada, ya que estaba ciega. Sin embargo, no era que no hubiera experimentado eso antes.

Una vez padeció de ceguera debido a una herida y, durante ese tiempo, Jared ocultó su identidad y envió a Olivia a cuidarla. Si no, no hubiera sabido que hacer en ese tiempo.

Después de enterarse que Amber se había realizado la operación, Jared trabajó horas extra y se apresuró a terminar todo a mano en un día; después, regresó con prisa al país en un avión privado.

Desafortunadamente, Amber se había dormido cuando regresó a la habitación.

Le dolió verla acostada en la cama con el rostro pálido y los ojos cubiertos con una gasa.

“Joven Amo Jared”.

María le entregó un vaso de agua cuando notó que tenía los labios secos.

‘Vino con prisa hasta aquí con ansiedad, sin mencionar que está preocupado por la Señorita Amber. Es por eso que está deshidratado’.

Resultaba que Jared estaba sediento, así que tomó el vaso de agua y le agradeció a María. Después, inclinó la cabeza hacia atrás y bebió todo, por la que se sintió mucho mejor.

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