Enamorado de mi ex esposa
Capítulo 1599

Capítulo 1599:

Amber respondió: “Si, Jeremy Ledesma fue incapaz de enfrentar las consecuencias de lo que me hizo; temía que yo lo resintiera y me rehusara a perdonarlo. Esa es la razón por la que forzó a su personalidad alterna a aparecer. Quería escapar de la situación y que él la enfrentara”.

“No es imposible”.

Jared asintió.

“Jeremy nunca fue seguro de sí mismo y siempre fue un poco cobarde. No me sorprende que decidiera escapar”.

Su garganta estaba seca.

“Incluso me dijo que Jeremy todavía se sentía culpable por mi después de desaparecer. Hace dos meses, Jeremy no pudo soportarlo más y se comunicó con su otra personalidad, pero hicieron un trato”.

Jared adivinó de que se trataba con rapidez.

“¿Jeremy le pidió que se hiciera cargo del cuerpo?”.

“Si”.

Sonrió con amargura.

“Jeremy no podía enfrentarme; esa es la razón por la que decidió escapar y cedió su lugar. No habrá más Jeremy, solo queda ese otro Jeremy Ledesma”.

Jared la abrazó con suavidad. Se sintió triste al verla en ese estado.

Si era honesto, estaba contento de que su rival hubiera desaparecido, ya que, en ese momento, había un hombre menos del que preocuparse. Sin embargo, sabía que la desaparición de Jeremy la lastimaría y era incapaz de sentirse feliz por la situación al ver lo miserable que era Amber.

“Jeremy siempre careció de confianza y me atrevo a decir, aunque suene exagerado, que apuesto a que ya había pensado en desaparecer del mundo hace tiempo. ¿Por qué crearía una personalidad alterna sino? Imagino que tú fuiste la razón por la que tenía otra personalidad, pero no le permitía aparecer. Te conoció y reprimió a su otra personalidad. Frente a ti, se mostraba como un hermano obediente hasta que hizo algo malo. Ahí fue cuando se asustó de que lo odiaras, y como era incapaz de aceptar que había actuado mal, decidió desaparecer. Para ser honesto, su destino estaba escrito desde un principio”.

Jared habló con calma mientras la acariciaba.

Debido a la personalidad de Jeremy; se destruiría a sí mismo en algún momento; por ende, su desaparición no fue una sorpresa.

“Pero ¿Por qué no me pregunto? ¡Ese tonto! Nunca me pidió que lo perdonara ni confirmó si lo odiaba. Si hubiera venido a mí, le habría dicho que lo perdoné. No lo culpo por lo que sucedió. Quizá no habría…”.

“Pero te enteraste por Jeremy Ledesma. Te dijo que su otra personalidad era tímida y no sabía cómo hacerte frente. ¿Cómo se iba a acercar a ti y te iba a preguntar?”.

Amber no sabía qué decir y la tristeza se apoderó de ella.

Jared le acarició el cabello suavemente.

“No te pongas triste. Tal vez es un buen final para él. Quería terminar con su vida porque sufrió mucho en el pasado y era solo tu presencia lo que lo mantenía con vida. Te envenenó porque su amor no era correspondido. Tú lo considerabas como familia y sin importar lo que pasara, nunca aceptarías su amor. Dada su personalidad melancólica, solo pasaría su vida deprimido e incluso tomaría medidas extremas. Es por eso que es bueno que haya desaparecido y se haya librado de ese amor no correspondido”.

Amber cerró los ojos.

“Jeremy…”.

“¿Te fue a ver solo para decirte eso?”, preguntó.

La mujer abrió los ojos y sacudió la cabeza.

“No solo eso, me dijo que su personalidad alterna le había pedido que aceptara hacer algo a cambio de la adquisición del cuerpo. Vino a verme solo por eso”.

“¿El trato tenía relación contigo?”.

Jared había acertado.

“Si, sabía que yo había estado buscando a Tania y le pidió a Jeremy Ledesma que averigüe por mí. Como también tiene habilidades para hackear al igual que Jeremy, se contactó con algunos hackers famosos alrededor del mundo para buscar a Tania y tuvieron éxito”, dijo y, luego, sacó una memoria USB del bolso.

“Está aquí”.

“¿Lo has visto?”.

Él echó un vistazo al dispositivo y Amber sacudió la cabeza.

“No, no lo he hecho. Estaba muy triste después de enterarme de lo de Jeremy y no estaba de humor como para revisar el contenido. De otro modo, hubiera parecido como si él no me importara”.

“Bueno, revisémoslo juntos”.

Le apretó la mano.

“Buscaré el portátil”.

Fue al estudio y, cuando salió con el portátil, él dio palmadas a su lado, indicándole que se sentara ahí. Ella lo hizo, se quitó los zapatos y se subió a la cama.

Luego, se apoyó sobre él y puso el portátil entre ellos.

Después de conectar la memoria USB, Jared tipeó y apareció una carpeta en la pantalla. La abrió y vio una gran cantidad de fotos e información. Tras observar de cerca, se dio cuenta de que los archivos estaban organizados de forma cronológica, así que continuó y abrió el primer archivo.

Había una foto de un pasaje de avión de Ciudad del Mar a Camelia y el pasajero estaba identificado como Tania García.

Además, el pasaje estaba fechado tres días después de fingir su muerte.

“Entonces, Tania sí fue a Camelia. Gigi y Chloe no mentían”, remarcó Amber y frunció los labios.

En silencio, Jared abrió el segundo archivo que contenía detalles de una clínica de cirugía plástica. Amber se sorprendió al ver eso.

“¿Qué es esto? ¿Una clínica de cirugía plástica? ¿Se hizo cirugía plástica?”.

El hombre entrecerró los ojos.

“Sabía que no me llevaría mucho tiempo encontrarla dada mi habilidad, así que esa fue su mejor opción para esconderse, una cirugía plástica es plausible. Nos engañó desde el principio porque nunca consideramos esa posibilidad y por eso nos resultó difícil encontrarla”.

“Ah, ¿Sí?”.

Ella frunció los labios.

“Qué inteligente”.

Se desplazó hacia abajo y encontró un consentimiento firmado para una cirugía plástica. La foto mostraba la firma de Tania en el formulario de consentimiento, donde también se detallaba el tipo de cirugías.

Después de que Amber revisó la lista, suspiró, sorprendida.

“¡Dios mío! ¿Cuántas cirugías hay? Se operó todo el rostro”.

“Lo más seguro era tener una apariencia totalmente diferente a la de antes”.

Jared no estaba sorprendido y abrió el tercer archivo en el que aparecía en recibo de pago de las cirugías. Tania aparecía como la paciente, pero Connor Salavera había sido quien había pagado por ellas.

Quedaron estupefactos, ya que como él había sido quien había pagado por las cirugías de rostro de Tania, eso quería decir que era la misma persona que estaba con él, Ana.

Intercambiaron miradas y vieron la sospecha reflejada en sus ojos. Aun así, en silencio, revisaron el resto de los archivos en un acuerdo tácito.

El cuarto archivo era un poco diferente, ya que era una foto de un recibo de pago de un hospital ortopédico famoso de Camelia. El contenido era evidente: un consentimiento para una cirugía para alargar la altura.

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