Enamorado de mi ex esposa -
Capítulo 1489
Capítulo 1489:
“Si”. Jared bebió vino. “Habría sido lo mejor si hubiera podida arrastrar a los Kampwerth consigo. Incluso si no mataba a todos, su muerte y el crimen atroz de los Kampwerth habría circulado en internet. Las personas alrededor del mundo habrían empatizado con el hombre, en especial cuando fue forzado a ese final. Una vez que supieran la historia de él, todo internet se encolerizaría y se esparciría la noticia”.
“Lo sé. Lo he visto antes”. Amber sintió que comenzaba a dolerle la cabeza.
Jared la sujetó de la mano y la apretó.
“Para ese entonces, el gobierno investigaría a los Kampwerth para calmar a la gente. Entonces, una investigación dejaría expuesto todos sus crímenes y castigarían a la familia. Incluso si no hicieron nada ilegal, serían condenados por el desastre marítimo”.
“Sí, según la ley son culpables porque hicieron caso omiso al peligro del tifón y obligaron a los pescadores a salir al mar, que fue la causa directa de su muerte”.
Empeoraron la situación no indemnizándolos como correspondía. El gobierno no los dejaría ir con tanta facilidad.
Al final entendió la situación.
“Ya veo. Así que eso es lo que quiere decir que el hombre tuvo éxito”.
“Sí. El colapso de los Kampwerth lo llevará a su tumba y quizá otras personas también paguen las consecuencias. Para ellos, eso será peor que la muerte. Podría considerarse una venganza exitosa, ¿No lo crees?” Jared sonrió con maldad; sus ojos reflejaron desdén por la familia”.
En ese momento, Ben preguntó: “Señor Farrell, ¿Quiere que investigue quien es la mente maestra que ayudó al conductor?”
“No”. Jared sacudió la cabeza.
“No es nuestro problema. Es asunto de los Kampwerth, así que no hay necesidad de investigar.
Además, esa persona me ayudó de manera indirecta a deshacerme de ellos. Pero, es su problema si la policía se entera de quien fue”.
Tenía razón. Así que Ben asintió y no hizo más preguntas. Poco después, su teléfono sonó. Miró a Jared y después de que este le asintiera, atendió la llamada. Dos minutos después, Ben cortó y guardo el celular. Miró a Jared y Amber con extrañeza.
Jared hizo una mueca y le urgió: “¿Qué sucede? Dime”.
“Es el hombre que enviamos a vigilar a los Kampwerth. Tiene novedades. El conductor falleció. El Señor Kampwerth sobrevivió pero tiene muerte cerebral y está en estado vegetativo.
La Señorita Kampwerth no tuvo mucha suerte y le amputaron la pierna. La Señora Kampwerth fue quien tuvo más suerte; solo sufrió heridas superficiales y nada preocupante. Sin embargo, no están seguros si sobrevivirá la experiencia.
En resumen, el destino que les esperaba seria trágico. El único inocente en esa situación era el conductor, que no había hecho nada malo, pero falleció por ser su chofer. Tuvo una vida y muerte trágicas”.
“Muy bien, el asunto de los Kampwerth termina aquí. No hay necesidad de malgastar más recursos en ellos”. Jared se masajeó las sienes y se puso de pie. Amber, que le sujetaba la mano, se paró también. La miró y le preguntó: “Iré a hablar con el Viejo Señor Jones y Norah. ¿Vienes?”
“No”. Amber sacudió la cabeza. “No deseo verlos y pienso que ellos tampoco desean verme a mí”.
“Muy bien. Espérame en el auto. Iré en un rato”. La despeinó con suavidad y le acomodó el pelo detrás de la oreja.
Para ser honesto, no quería que lo acompañara, ya que sabía que los Jones tenían mal temperamento, así que esperaba que no estuvieran arrepentidos. Aunque no se atreverían a atacar a Amber si él estaba allí, la mirarían en silencio con maldad o algo similar. Por supuesto que no quería que experimentara eso.
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