Embarazada de una noche con el Alfa -
Capítulo 225
Capítulo 225:
Tropezó y Marco tuvo que sostenerlo mientras su cuerpo se debilitaba.
«Por favor, manténgase firme, Sr. Barlow», le instó Caspian.
El anciano asintió con la cabeza, sus ojos cerrados. Trataba de mantenerse consciente a pesar de que su cuerpo sucumbía lentamente a la infección.
Pero antes de que el veneno lo debilitara demasiado, me indicó exactamente a qué tipo de magia negra se había recurrido para envenenar el agua.
Punto de vista de Tanya
Aunque los hombres lobo ahora sabían con certeza qué tipo de magia negra había causado el envenenamiento de la fuente de agua de la manada, aún quedaba un escollo por superar.
Con ansiedad, hojeé el libro y lo dejé abierto en una página que contenía una tabla, de modo que los demás pudieran verla. Tras mirar la página y la lista de ingredientes, resoplé al advertir algo que podría entorpecer el plan.
«No tenemos esto», señalé al tiempo que apuntaba hacia un ingrediente denominado «Orquídea fantasma».
“Se trata de una flor bastante rara que solo crece en la capital. Solo la familia real, que la cultiva en un ambiente cuidadosamente controlado, tiene acceso a ella», observé.
Inadvertidamente, volví los ojos hacia Marco, quien en ese momento estaba leyendo el nombre de la flor.
“Nuestra misión parece estar condenada al fracaso», se lamentó Dylan mientras se tiraba del cabello. “La capital está muy lejos de aquí, así que me temo que no lograremos conseguir ese ingrediente a tiempo», argumentó.
Marco sacudió vigorosamente la cabeza en señal de negación. “Pues para mí no está demasiado lejos. Estoy convencido de que podré conseguirlo y volver aquí a tiempo», lo contradijo.
Tanya lo miró fijamente; su semblante traslucía una intensa preocupación. “Tu cuerpo no resistiría un viaje tan largo», repuso.
Marco le sonrió amablemente. “No por nada me conocen como el licántropo más fuerte de todo el reino. Confía en mí, estaré bien. Tú solo ocúpate de la elaboración de ese perfume; yo me encargaré de conseguir el ingrediente que necesitas», señaló mientras le acariciaba la mejilla con suavidad para calmar la incertidumbre que se reflejaba en su rostro.
Luego, se alejó y salió de la biblioteca mientras llamaba a su amigo Oliver para informarle que iba en camino.
Cuando Marco emprendió su misión aquella noche fría, su cuerpo se transformó: sus extremidades se alargaron, esbeltos y musculosos, y su estatura aumentó considerablemente. Las yemas de sus dedos se convirtieron en afiladas garras y su piel adquirió un pelaje negro.
Pese a que gruñó mientras la transformación tenía lugar, el proceso fue completamente indoloro.
Por último, en su rostro surgió un hocico prominente y unos caninos amenazantes. A continuación, el licántropo se posó sobre sus cuatro patas. Si bien sus dos piernas le bastaban para correr, ahora con cuatro extremidades podría desplazarse a una velocidad vertiginosa.
Tras su transformación, se dirigió al bosque a toda velocidad, decidido a hallar el ingrediente necesario para la elaboración del perfume. Mientras galopaba furiosamente hacia la capital, Tanya se afanaba en su tarea en uno de los laboratorios del hospital.
Sin embargo, tropezó con dificultades al tratar de comprender el libro de Margaret. Dado que se trataba del diario personal de esta, era previsible que su lenguaje fuera vago y acorde a su proceso de pensamiento, así que Tanya tuvo que esforzarse para comprender los pasajes oscuros del mismo. La ansiedad se apoderaba de ella paulatinamente a medida que el tiempo transcurría.
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