El innombrable vive en New York
Capítulo 127

Capítulo 127:

Ni siquiera yo misma podía creer lo que estaba sucediendo, yo simplemente quería estabilidad económica y emocional y termine teniendo todo esto en mí camino.

“Ni siquiera sé que pensar o decir, ¿Es esto real?” repetí y ella empezó a reírse.

“¡Por supuesto que es real! ¡Toda la prensa está loca por ser los primeros en entrevistarte!”

“Tengo que contarle a Leonardo”, dije emocionada.

Estaba a punto de hablarle a él cuando escuchamos que tocaron la puerta fuertemente, ambas nos miramos confundidas y casi inmediatamente se abrió la puerta y entraron Gabriel, Abigail y Carolina con un montón de globos y un pastel,

“¡Felicidades!”, dijeron todos muy emocionados.

“No tenían que molestarse en hacer todo esto”, dije muy conmovida.

“¿Cómo no lo haríamos? ¡Has hecho historia Olivia!”, dijo Gabriel sonriéndome.

“Ven aquí pequeña” se acercó a mí y me abrazó.

“Todos aquí estamos muy orgullosos de ti” me dio un beso en la frente.

“Gracias chicos, ni yo misma puedo creer lo que está ocurriendo” algunas lágrimas empezaron a salir de mis ojos.

Todos se acercaron a mí al ver que estaba llorando de la felicidad, todos me dedicaron muchas palabras lindas felicitándome.

“Todo nos tomó por sorpresa y no tuvimos tiempo de personalizar un pastel para ti, lo único que pudimos hacer fue pedirles que pusieran un dedicatoria para ti”, dijo Carolina.

“Para mí es más que suficiente” les sonreí a todos, me acerqué al pastel y empecé a leer la dedicatoria que estaba escrita con jalea de fresa

[Para la mujer más exitosa y buenota de Nueva York],

Reí al final de leer la dedicatoria

“Gracias a todos”.

“¡Parte el pastel, tengo un hambre tan horrible, Gabriel ni siquiera me dejo comerme un pan porque dijo que te debíamos esperar a ti para comer todos juntos!” Abigail hizo un puchero.

“Está bien”, dije riendo.

Empecé a partir el pastel para que todos comiéramos. Estábamos bromeando mientras comíamos nuestros trozos de pastel cuando volvieran a tocar la puerta de mi oficina.

“¿Ordenaron algo más?”, pregunté.

“No que yo recuerde”, dijo Abigaíl viendo a los demás confundida,

Estaba a punto de levantarme para ir a abrir la puerta cuando la abrieron antes y allí estaban Iván y Leonardo parados con un montón de cosas en sus brazos.

“No puede ser”, dijo Gabriel sorprendido al verlos.

“Necesito alguien que quiera tanto como ellos dos quieren a Olivia” dio un gran suspiro Abigail.

“Felicidades hermanita” se acercó Iván a mí para abrazarme.

“Gracias” respondí.

Cuando nos separamos miré a Leonardo quien estaba parado detrás de nosotros con un gran arreglo de girasoles, me miró con una gran sonrisa.

“Felicidades cariño” me acerqué a él para depositar un beso en sus labios.

“Gracias, son muy hermosas”, dije una vez me aleje de él y tome las flores.

“Parece que ya habían iniciado con la celebración y ni siquiera nos habían invitado”, dijo Iván alzando una ceja.

“Pensé que ambos estarían muy ocupados” hice una mueca.

“¿Qué les parece si ordenamos pizza?”, preguntó Iván y casi todos inmediatamente respondimos con un ´Si`

“¿Sabes? Ahora me siento intimidado”, dijo Leonardo a mis espaldas, lo mire confundida.

“¿Por qué?”, pregunté,

“Me siento tan intimidado al estar frente a una hermosa e inteligente mujer” me tomo de la cintura

“Mi propia esposa está acabando con los enemigos que querían derribarme”, dijo sonriendo de lado.

“Deberían detenernos, ni siquiera hemos unido ambas empresas y ya se les vino el karma encima”, dije y él se acercó para besarme.

…

1 mes después.

Miré por la ventanilla y me sorprendí al ver a tantas personas afuera, habían cerrado muchas calles para este evento.

Después de haber sido nombrada como una de las mujeres empresarias más exitosas de este año hay unos premios que se celebran aquí en Nueva York siempre del ámbito empresarial, este año fui invitada para recibir dos premios entre ellos ´La empresaria del año` y ´Empresa más exitosa del año`

Hace una semana recibí la noticia de que me darían ambos premios y tuve que empezar a buscar un vestido para esa noche y otra de las cosas que me sorprendió fue saber que había muchos diseñadores famosos interesados en vestirme para esa noche, al final ni siquiera me basé en elegir a la marca más popular sino el vestido que más me gustó.

Cuando la camioneta se detuvo frente a la entrada del lugar Leonardo se bajó de su lado y rodeo la camioneta para llegar hasta mi puerta y abrirla.

“Bienvenida a su gran noche Señorita Spinter”, me dijo Leonardo con una gran sonrisa.

Él me dio su mano para ayudarme a bajar de la camioneta y yo la tomé, casi inmediatamente que nos bajamos todos los periodistas y paparazis empezaron a tomarnos fotos.

Antes de entrar al lugar en donde se llevaría a cabo la ceremonia debíamos pasar por una alfombra roja, una de las personas encargadas de organizar el evento nos guio hacia donde debíamos ir, Leonardo y yo empezamos a caminar detrás de ella.

“Me siento tan intimidada con tantas cámaras”, dije en voz baja.

“Ignóralas y solo mírame a mí”, dijo apretando un poco mi mano.

Ni sí quiera sé porque, pero con ese pequeño apretón de manos sentí como Leonardo me transmitió tanta confianza, le sonreí y ambos seguimos caminando hasta llegar a la alfombra roja.

Leonardo me tomó de la cintura y ambos empezamos a ver a todas las cámaras para que nos tomaran las fotos que fueran necesarias, después de unas fotos Leonardo y yo simplemente nos miramos y nos sonreímos, después nos indicaron que ya podíamos entrar a la ceremonia.

Al entrar nos indicaron cual sería nuestra mesa y nos sentamos, debido al tráfico habíamos llegado justo a tiempo porque apenas acababa de iniciar el evento,

“¿Desean beber algo?”, nos preguntó un mesero que sostenía una bandeja con algunas copas de vino.

“Dos copas por favor” respondió Leonardo.

El mesero puso las dos copas sobre nuestra mesa y se alejó de nosotros,

“No beberé, capaz y me emborracho y me caigo subiendo las gradas al escenario”, dije y Leonardo empezó a reírse.

“¿Así como le sucedió a Jenifer Lawrence?”, preguntó y ambos nos empezamos a reír

“¡Exactamente! No quiero que me suceda eso”

Empezaron a entregar los premios correspondientes de la noche, Leonardo y yo nos parábamos y aplaudíamos cuando le entregaban un premio a alguien más,

Conocía a algunos empresarios y empresarias que estaban en la ceremonia aunque había muchas personas que yo no conocía, por otro lado Leonardo si conocía a la mayoría de las personas presentes y él me ayudaba a decirme quien era cada persona.

De hecho cuando algunos empresarios importantes pasaban por nuestra mesa nos saludaban a los dos y lo mejor de todo es que no simplemente me conocían por ser la esposa de el gran Leonardo Spinter sino que me conocían por mi trabajo en Strike Enterprises.

“Ahora anunciaremos uno de los premios más importantes y esperados de la noche, ella es una de las mujer que más ha destacado por su arduo trabajo en Strike Enterprises, fue nombrada CEO de la empresa hace apenas unos meses y logrando así ser una de las mujeres más exitosas y millonarias, y no solamente eso, también logró hacer historia convirtiendo su empresa en la más exitosa de todo Nueva York en menos de año. Los siguientes premios son ´Empresaria del año` y ´Empresa más exitosa del año`. Damas y caballeros por favor recibamos a Olivia Spinter”

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