El destino de Tiana
Capítulo 35

Capítulo 35:

POV: Tiana

No pensaba que fuera capaz de sentir ningún tipo de simpatía o que esto le afectaría tanto como ahora. Podía sentir su estado de ánimo cambiar a medida que avanzaba la historia, pero no me interrumpió en ningún momento.

Le conté que mi papá se había ido después del incidente y que ese fue el comienzo de una nueva vida para mí. Por algún motivo, compartirlo con él lo hizo más fácil y me sentía incluso mejor que cuando se lo había contado a Elsie.

Siempre había sido difícil hablar con Ryder, pero en este momento, era demasiado fácil.

No mencioné la parte en que Jordan me había rechazado porque sabía que mi compañero ya lo odiaba, pero una parte de mí todavía quería creer que no había sido del todo su culpa. Jordan también había estado con nosotros esa noche.

Él sabía que ya era hora de volver a casa, pero yo quería quedarme y Jayce también se dejó llevar.

Si me hubiera ido cuando nos dijo. Jayce podría seguir con vida en este momento, pero prefirió quedarse conmigo en lugar de irse con su hermano gemelo.

Comencé a sentir oleadas de ira emanando de Ryder incluso antes de que terminara mi historia.

“¿Por eso ese perro te rechazó?”. Apretó la mandíbula y asentí.

“Me culpa por la muerte de su hermano”. Sacudí la cabeza.

“Él estaba con nosotros esa noche y nos pidió que nos fuéramos. Tal vez, si lo hubiera escuchado..”..

“¡Tonterías!”, gritó y se puso de pie de un salto, derribando algunos cubiertos en su camino.

“No fue tu culpa. ¡Tenías cinco años!”. Estaba furioso.

“¿Cómo pudieron haberte acusado de algo así a esa edad? Es inaudito”.

Me estremecí por el tono de su voz, no esperaba que reaccionara así y temía que exagerara al respecto.

“Ryder..”.

“Todos los miembros de la Manada Eclipse pagarán por lo que hicieron. El ataque de esos Renegados podría haber sido planeado, al igual que todos los otros asesinatos dentro del territorio de los lobos occidentales. Sin embargo, en lugar de hacer una investigación adecuada, ¿Te hicieron sufrir por eso durante casi trece años?”.

Explotó, caminando de un lado a otro y maldiciendo.

“Por favor”. También me puse de pie.

Pero Ryder comenzó a llamar a alguien.

¿Qué es lo que iba a hacer?

POV: Ryder

La ira y la rabia me invadieron. ¿Qué clase de persona aislaba a una niña de cinco años por un asesinato que no había cometido y ni siquiera intentaba investigar al respecto? No podía creer que había enviado a algunos de mis guerreros a las regiones occidentales para ayudarlos mientras que ellos le hacían algo así a una pobre niña.

No merecían ninguna ayuda o protección de la realeza. Si pudieron hacerle eso a mi compañera, entonces no iba a hacer la vista gorda. Los haría pagar, comenzando por ese Alfa cornudo que se hacía llamar Simeon.

Saqué mi móvil y llamé a Adrian, ignorando la mirada de súplica de Tiana. ¿Por qué todavía sentía que mi compañera tal vez sentía algo por el desgraciado de Jordan?

Ella no quería echarle toda la culpa y no me sentía cómodo al respecto.

Había traído a Tiana aquí con el propósito de conocerla, quería escuchar todo sobre su pasado de su propia boca en lugar de enviar a alguien su manada.

Sentía que, si continuábamos discutiendo, nunca sabría nada de ella.

No estaba listo para una segunda compañera, mucho menos después de Adeline. Sin embargo, cada vez que trataba de ignorar a Tiana, sentía que ocupaba más espacio en mi cabeza. No podía controlar lo que sentía por ella y el hecho de que hubiera aparecido en mis sueños todas las noches desde que llegó no me ayudaba.

Estaba intrigado por ella, pero todavía era muy cauteloso con el tema del vínculo de compañeros. No iba a dejar que nublara mi juicio y primero quería conocerla mejor.

Le había permitido a Adeline tener toda la libertad que quería, pero ¿Cómo había resultado eso para mí? Tiana parecía muy terca, pero podía llegar a ser sumisa y me aseguraría de ello.

Me había asegurado de mantener a Louis alejado de ella. No podía confiar en nadie cerca de mi compañera, no después de lo que había pasado con la primera.

En cuanto a Jordan, se arrepentiría de haberla rechazado por un crimen que ella no había cometido. Aunque fue algo bueno; de lo contrario, no estaría conmigo. No obstante, la había hecho sufrir y la había maltratado, así que haría que se arrepintiera.

¿Cómo alguien podría hacerle algo hiriente a una persona tan dulce? El hecho de que no culpara a Jordan hacia que lo odiara aún más.

“¡Hola, amigo!”. Adrian sonaba animado como siempre.

“Quiero a mis hombres fuera del territorio de los lobos occidentales”, ordené.

“Vale, puedo hacerlo”, respondió con duda.

“¿Puedo preguntar qué pasó?”.

“Ese es mi problema, Adrian”, respondí sin darle importancia.

“Los lobos occidentales no merecen mi protección”.

“Pero..”.

“Sin peros, Adrian”, dije con autoridad.

Él había sido mi amigo más cercano durante mucho tiempo y sabía que no debía cuestionar mis órdenes.

“Además, avísale a Terrance. Hay otro caso que quiero que agreguemos a nuestra investigación que puede estar conectado con todo esto”.

“Vale, vale”. Adrian cedió.

“No sé qué paso, pero cualquier decisión que tomes debe ser la correcta. Me encargaré de eso ahora mismo”.

“Bien. También infórmale a Louis que ya no tiene que ir ahí mañana. Te lo explicaré después”, dije y colgué.

Había estado trabajando en el caso de los asesinatos de los lobos occidentales durante un tiempo. Se suponía que Louis iría con ellos mañana para las investigaciones y para hablar con el jefe de los lobos occidentales, pero ya no sería necesario.

La historia que Tiana me acababa de contar no parecía una simple casualidad. No era ninguna coincidencia que esos negados hubieran aparecido ahí, hubieran asesinado al futuro Alfa, pero le hubieran perdonado la vida a ella.

Además, en lugar de que ese estúpido Alfa hiciera las investigaciones correspondientes, había hecho que una niña pagara por ello durante doce años seguidos. ¿Ese hombre resultó ser padre?

Pensar que incluso su padre la había abandonado por eso hizo que me sintiera enfadado con él, También debía encontrar a ese hombre. ¿Qué clase de padre abandonaba a su propia hija en un momento como ese? ¡No la merecía! ¡Ninguno de ellos la merecía!

Podía imaginar la vida que había tenido que pasar de niña, asumiendo la responsabilidad de algo así a esa edad. Madre mía, no podía creer que esas personas fueran así.

Se suponía que ella era una Gamma, pero la habían tratado peor que a una Omega y la habían enviado lejos en la primera oportunidad que tuvieron. Menos mal que había llegado a mí, pero la Manada Eclipse iba a pagar.

Todavía estaba hirviendo de rabia cuando sentí sus suaves manos en mi espalda. Me voltee para mirarla y noté que parecía asustada. Entonces me di cuenta de que estaba dejando escapar mi aura de Alfa, junto a mucha ira por lo que acababa de escuchar.

Sin embargo, ella no debía tenerme miedo porque nunca la lastimaría, a menos que tal vez estuviera asustada por su antigua manada.

“Cálmate”, susurró, pero era como pedir algo imposible. No podía tranquilizarme después de lo que me acababa de enterar.

Tiana era una mujer fuerte. Era asombroso cómo se las había arreglado para pasar por todo eso siendo solo una niña, pero seguía manteniendo su fuerza al final del día.

Sentía la necesidad de protegerla más que nunca y mataría a cualquiera que se acercara a ella o intentara tocar un solo cabello de su cabeza. Ya se había defendido sola durante demasiado tiempo.

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