El bebe de mi jefe
Capitulo 75

Capitulo 75:

“¿Lista para ir con la doctora?”

Asiento y me pongo de pie junto con su ayuda.

Esta vez, me cambio mucho más rápido de lo que lo hice al comienzo, porque quiero saber lo que ella me dirá, además, Albert me ayuda en la mayor parte porque mis manos y piernas no dejan de temblar.

Ambos llegamos otra vez con la doctora, y ambos tomamos asiento frente a ella sin dejar de tomarnos las manos.

“Muy bien, Nadia. ¿Estás más tranquila?”

“Un poco…”, respondo con algo más de ánimos.

“Ya verás que cuando lo asumas, estarás mejor… ahora, las mujeres embarazadas con Lupus, pueden tener un embarazo seguro, y la mayoría, hasta normales y saludables. Sin embargo, las mujeres con esta enfermedad, que quedan en estado, se consideran un embarazo de alto riesgo”.

Siento cómo mi corazón martilla con fuerza mi pecho ante sus palabras.

“Lo normal, es esperar a que el Lupus esté mínimamente activo, y los síntomas estén bajo un buen control, para quedar en estado. Ya Albert me comentó que tuviste una crisis Lúpica reciente, ¿Correcto? “asiento de inmediato”.

Entonces, debemos de monitorear esto muy de cerca.

Fija sus ojos en él, al decir eso.

“¿Cuántas semanas tengo?”, le pregunto con interés.

“Lo importante es que ambos están bien, ¿verdad?”

Él también hace una pregunta.

“Hasta ahora, todo está bien, y esperemos que así continúe. No te mentiré, Nadia. Tu enfermedad puede empeorar durante el embarazo, puede padecer el riesgo de aumentar otros problemas también, especialmente si tomas corticosteroides… pero una buena alimentación puede ayudar a prevenir estos problemas, también las visitas más regulares con el especialista, para detectar algún problema con anticipación, de esta manera poder mantenerte a ti y a tu bebé, lo más sanos y cuidados posibles. Pero ten en cuenta algo, no será fácil, y debes de ser fuerte ¿Está bien?”

“Comprendo… ¿Es muy pequeño en cuanto a tiempo?”, insisto.

Ella le da una mirada a Albert, y luego fija sus ojos en mí con una sonrisa.

“Es bastante pequeño, y con algunas semanas… pero está sano y su corazón late. Eso es lo más importante en este momento, Nadia”

Sonrío al oír eso.

“Dentro de dos semanas volveré, y te pido que me hagas un informe con todo referente al embarazo en estos casos, Mackenzie, por favor”

“Con gusto”

Ambos se levantan, y yo los imito.

Estoy feliz, demasiado feliz, pero no sé por qué siento que tanto la doctora como Albert, saben más información de la que me ha dicho aquí.

Pero no pensaré en esto en este día. Voy a enfocarme en estar tranquila, y disfrutar este hermoso e inesperado momento para mí, para ambos.

¿Tienen el mismo sentir que Nadia?

POV Ruby…

Por más que lo intentaba, no podía dejar de pensar en Athom Patel y aquellos labios que me habían besado con tal intensidad, haciéndome sentir viva, deseada y sobre todo, respetada.

¡Diablos, me sentía como una maldita adolescente enamorada!

“¡Por qué siento que hay algo que no me estás contando, hija?», preguntó mi madre al verme con una ceja alzada.

“Porque hay algo que debo contarte, madre»

asentí con la cabeza en respuesta y ella me miró con curiosidad, intentando leer mi expresión.

“Pues, te escucho»

Sonrió de medio lado y le dio un sorbo a su taza de té, al igual que yo, pues estaba intentando encontrar las palabras exactas para narrarle lo ocurrido anoche en aquella maravillosa cita a la que había ido con Athom.

“Me gusta mi ex jefe», solté.

Ella arrugó las cejas con confusión, sin entender nada y negó con la cabeza, como si no encontrara sentido a lo que le decía, y fue entonces que recordé que no le había mencionado el hecho de que había dejado de trabajar en Intelligent.

“Bueno, quiero decir que me gusta Athom Patel»

“¡Por qué dices que es tu ex jefe?», preguntó de inmediato.

“¿Te despidió? No lo entiendo”.

“Dejemos esa historia para el final, ¿Te parece?»

Cuestioné de vuelta con una sonrisa nerviosa.

“Te escucho, cariño”

“El día de la premiación, Athom me besó, y ahí comenzó todo”, dije sonriendo de medio lado al recordar cómo yo había huido como una vil cobarde de la clínica.

Le expliqué a detalle todo lo ocurrido, desde que había leído su carta, la conversación con su madre en la empresa, y la salida que habíamos tenido junto a Asher y finalmente, la cita de anoche, la cual a mis ojos había sido perfecta.

“Es todo un caballero, respetuoso, detallista, amable, guapo…”

Enumeré cada una de las cualidades de aquel ojiazul mientras mamá no dejaba de sonreír con ilusión.

«Y anoche por fin le confesé que yo también tenía sentimientos hacia él, pues ya no podía seguir fingiendo que mi corazón no se emocionaba con solo ver un mensaje suyo en mi celular”.

“Ay, mi niña…”

Susurró mamá al tomar mi mano sobre la mesa.

“¿Estás segura de lo que sientes por ese hombre?”

“Sí, mamá»

Asentí con la cabeza.

“Debo reconocer que me costó un poco poder identificar lo que sentía, pero ahora todo es muy claro para mí. Si tan solo anoche lo hubieras visto… había cientos de velas encendidas a su alrededor, y el paisaje era hermoso… él sencillamente creó una velada romántica perfecta”.

«No mereces menos que eso, hija», dijo mamá con seguridad, recordando la relación pasada de Ruby.

«El idiota de Andi no supo valorarte, y gracias a Dios terminaste con él, pues cuando se cierra una puerta, se abren ventanas…”

«Tienes razón, madre»

Asentí con la cabeza.

«Ahora me explicas cómo es eso de que Athom es tu ex jefe…”

Mamá alzó una ceja y Ruby torció una sonrisa.

«Es solo que sería muy raro estar en algo romántico con mi jefe, por lo que le dije que si queríamos comenzar a salir, yo debía renunciar».

Se encogió de hombros y mamá la miró con curiosidad.

«Tranquila, tengo dinero suficiente para mantenerme por unos meses, además pienso buscar otro empleo».

«Si te sientes cómoda con eso…”.

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