Derribando las barreras de mi CEO -
Capítulo 31
Capítulo 31:
“Gracias por hacerme la mujer más feliz del mundo, estoy sorprendida, conmocionada, no pensé que fueras tan romántico, eres el amor de mi vida, ¡feliz aniversario mi amor!”, dijo Lindsey.
“Cómo tú lo tienes todo, mi sorpresa era prepárate una cena romántica con mis propias manos mañana en la mansión”
“Me alegro de que te haya gustado, quiero hacerte feliz el resto de mis días”, dijo Kyle, dándole un beso tierno continuó.
“Lo de la cena lo podemos solucionar, mañana le decimos a uno de mis hombres que busque las provisiones que necesitas, quiero que me prepares la cena más rica que haya hecho tus manos hermosas”
“Me derrites, eres perfecto amor, gracias por llegar a mi vida”
Él se apoderó de su boca y la invadió con deseo, se levantó con ella en brazos, la coloco de pie y ayudándola a desvestirse le susurró.
“Eres hermosa, hoy déjame tomar el control, por favor”
“Sí”
Ella sintió como sus manos calientes recorrían su piel, dejándola erizada por donde pasaba.
“Ayúdame a quitarme la ropa”
Ella sonríe y empezó a desabrocharle los botones de la camisa, con la mirada fija a él soltó un g$mido al ver sus zafiros cargados de ansias descaradas; los ojos de ellas se miraban del mismo modo.
Cuando por fin llegó al último botón, echó los hombros hacia atrás y se terminó de quitar la camisa. Ella bajó la mirada para humedecerse los labios, admiro su cuerpo masculino que la embriaga de deseo, estaba deslumbrada cuando escucho.
“No me puedes tocar todavía”
Ella se sobresaltó y se encaminó a quitarle el pantalón, él le apartó sus manos y terminó de quitárselo con sus calzoncillos, los zapatos y los calcetines.
“Ahora acuéstate sobre los pétalos de rosas y empieza a tocarte, quiero verte como lo haces”
Él, desnudo, se sentó en una silla frente de la cama.
“¿Qué?”, exclamó nerviosa.
“Lo que escuchaste, anda muñequita, te va a gustar”, le contestó con picardía.
Ella se acostó sobre los pétalos de rosas quedando frente a él, luego empezó a tocarse un pezón con los dedos de la mano derecha, mientras masajeaba con la mano izquierda el otro seno con suavidad.
Al escucharlo hablar emitió unos g$midos cortos y agudos.
“¿Son mías?”, preguntó el lleno de lujuria.
La observó con las cejas arqueadas, esa era la imagen más sensual que había visto en mucho tiempo.
Con un hilito de voz ella susurró, le cuesta controlar la respiración.
“Sí”
Luego bajó una mano a su vientre hasta llegar a su zona íntima y empiezo hacer círculos en su parte sensible.
“Métete dos dedos. ¿Me deseas Lin?”
“Te deseo”
Se metió los dos dedos y empezó a moverlos rápidamente.
Ella soltó un jadeo de placer y él al oírla dio un gruñido de satisfacción.
Lindsey llevó la cabeza hacia atrás y empezó a removerse entre los pétalos de rosas, él se levantó y de dos zancadas largas se montó sobre ella, la embistió sin aviso haciendo que soltara un g$mido glorioso.
“Me vuelves loco mi amor”
Sus cuerpos sudorosos chocan con violencia y los gruñidos rudos de él la hipnotizan.
Kyle continuó acelerando el ritmo con sus movimientos, cuando la ve arquear la espalda le susurró:
“¡Ahora termina conmigo amor!”
Terminaron casi al mismo tiempo, él se dejó caer sobre ella, se quedó atónito de placer.
Al día siguiente Lindsey se despertó y vio a su esposo mirándola.
“Buenos días, dormilona”
Pasó unos dedos por sus mejillas acariciando con delicadeza.
“Buenos días, amor”
Bostezó con pereza, no quería moverse de la cama.
“¿Cuánto tiempo llevas despierto?”
“Un poquito”
“¿Qué haces mirándome dormida?”
“Parecías un ángel durmiendo, que me quede admirando tu hermoso rostro”
“Qué bobo eres, hoy es nuestro primer año de casados”
Kyle le agarró el mentón y le dio un beso suave.
“Ahora sí puedo decirte que te quiero, eres una mujer maravillosa que lentamente entró en mi corazón y dio a luz a mi vida”
“Me has gustado desde el primer día que te vi en esa cama sin camisa”
Se puso las manos en la cara, para no darse cuenta de sus mejillas sonrojadas, a causa de la pena que causó su confesión.
“Entonces eres una p$rvertida que me comió aquel día con sus ojos”
“Si te veías tan guapo ese día, pero cambiando de tema, ¡Amor! ¿Te gustan los mariscos? O ¿Eres alérgico alguno?”
“No sufro de alergias y lo que me prepares para mí será exquisito como tú”
Le dio otro beso tierno.
“Qué bello eres, quien iba a decir que el ogro se convertirá en un tierno príncipe”
Él empezó hacerle cosquillas por sus costillas y ella se retorcía de risa.
“No para por favor, amor no”
No podía contener la risa. Kyle la atrajo a él y la sentó en su regazo, se elevó con ella en sus brazos
“Vamos, démonos un baño, el desayuno está listo, luego podemos caminar un rato en la playa”
La señora a cargo de la casa ofreció comprar las cosas para la cena, Lindsey le dio una lista de las cosas que podría necesitar. También se ofreció a quedarse después de la salida para ayudarla con la cena y Lindsey se negó, le agradeció, pero quería encargarse ella misma.
Después del desayuno, fueron a dar un paseo por la playa, el día estaba soleado, caminaron tomados de la mano, después de un rato se sentaron en la arena. Ella se levantó contenta y lo jalo de las manos.
“Amor, ¿Vamos a bañarnos? El agua nos está llamando”
“Muñequita anda tú y yo te espero aquí”
Coqueta, le dio la espalda y lentamente se metió en el agua y comenzó a nadar, no había muchas personas en la playa. Es una zona privada. Kyle estaba embelesado mirando a su esposa cuando dos mujeres se acercaron.
“¡Hola guapo! ¿Te podemos acompañar?”
“No gracias, tengo acompáñate”
“Estás solo ahora mismo, yo siendo tu acompañante no me muevo de tu lado”
Kyle no miró a las mujeres que estaban a su costado, respondía sin apartar la vista del agua, dibujó una media sonrisa cuando vio cómo su traviesa arqueaba sus cejas y salía del agua.
.
.
.
Si encuentras algún error (contenido no estándar, redirecciones de anuncios, enlaces rotos, etc.), por favor avísanos para que podamos solucionarlo lo antes posible.
Reportar