Buscando recuperarla -
Capítulo 40
Capítulo 40:
“Bueno, creo que esto cuenta como situación de estrés, con las amenazas y la vida loca que lleva Malcolm”.
El motor del avión rugía de forma constante.
Celia pensó en todos esos pacientes a los que trataba en África y se sintió más pequeña que nunca.
“Tratas a gente con muchos problemas. Seguramente te parece que me quejo mucho, ¿No? Pobre niña rica que no es capaz de manejar sus propias emociones”.
“Espera un momento”
Rowan levantó una mano.
“Esto no es una competición. Estoy seguro de que tu médico te ha dicho que la depresión y los desórdenes de ansiedad son un problema de salud. Ya sea la serotonina o la insulina, son sustancias que tu cuerpo necesita. Y haces bien en cuidar de tu salud”.
“Pero tus pacientes…”
Celia se detuvo al ver que Malcolm se levantaba del escritorio.
Agarró su libro electrónico.
“Gracias, Rowan, por atenderme. Te agradezco la ayuda”.
Encendió el libro y fingió leer.
Ojalá hubiera podido gestionar de la misma forma el resto de sus problemas…
Pero cuando se trataba de Malcolm, le resultaba imposible esconder los sentimientos, sentimientos que se intensificaban por momentos.
Temía lo que podía pasar, pero no era capaz de decir adiós de una vez.
…
La suite del centro de Berlín era prácticamente igual que la del hotel de París, pero un poco más moderna.
Las giras siempre eran una vorágine de habitaciones de hotel y salas de concierto.
Su intento de llevarla a pasear por París no había salido bien, así que no le quedaba más remedio que pensar en otra estrategia para ganársela.
Afortunadamente sus amigos regresaban a casa una vez abandonaran Alemania.
Estando con ellos no había podido pasar ni un minuto a solas con Celia.
El concierto de Berlín había salido bien.
Sobre todo porque había decidido no cantar Playing for Keeps.
Miró hacia el salón.
Todos estaban allí en ese momento.
Se fijó en Celia.
Estaba acurrucada en una butaca con la cabeza apoyada en el brazo, escuchando a Troy mientras relataba una vieja anécdota del colegio en la que Elliot Starc era el protagonista.
El piloto ya se había marchado un rato antes.
No le faltaba mucho para tenerla toda para él.
Por fin se quedarían solos.
De repente sintió una punzada de culpa por desear que todos se fueran en ese momento…
A lo mejor estaba tan impaciente por lo bien que empezaban a llevarse Rowan y Celia.
A lo largo del día se habían sentado a hablar en un rincón varias veces, como si tuvieran algún secreto.
El buen doctor incluso le había llevado un paquete de pastas para asegurarse de que comiera algo.
Estaba celoso.
No podía negarlo.
Todos los planes le habían salido mal: lo de besarse delante de la prensa, la canción…
Resignado, Malcolm hizo lo que mejor se le daba y se abandonó a la música.
Apoyó la guitarra en la rodilla y empezó a tocar unos arpegios mientras Troy contaba su historia.
“En el último año…”
Troy hacía girar su sombrero de fieltro con un dedo mientras hablaba.
“Elliot era nuevo en el colegio y quería impresionarnos, así que le hizo un puente a uno de los camiones de la colada y nos sacó a dar un paseo por la noche. Nos colamos en un club de striptease”.
Hillary le quitó la gorra de las manos.
“¿En serio?”
Jayne se rio suavemente y se acurrucó contra el brazo de su marido.
“Me parece que alguien va a dormir solo esta noche”.
“Dejadme terminar. Pronto nos dimos cuenta de que el club no tenía nada que ver con las películas. Las mujeres daban… miedo. Un par de chicos querían quedarse, pero la mayoría nos fuimos a una pastelería que estaba abierta toda la noche”.
Malcolm recordaba muy bien aquella noche.
.
.
.
Si encuentras algún error (contenido no estándar, redirecciones de anuncios, enlaces rotos, etc.), por favor avísanos para que podamos solucionarlo lo antes posible.
Reportar