Capítulo 45:

🍙 🍙 🍙 🍙 🍙

“Que lo amaba tanto, que permití que hicieran, yo tuve la culpa de que ellos me humillaran, me hicieran menos, porque mi marido nunca hizo nada por darme mi lugar”.

“Lo lamento”

Respondió con sinceridad.

“Debes sentirte orgullosa de la mujer en la que te has convertido, a pesar de quedarte sin nada, haz sacado adelante a tu hija”

Sonrió con ternura, y tomó nota mental de quien era el marido de Isabella.

Una coincidencia más.

Pues su firma ‘De la Vega’, era quien los había desbancado de la posición en la que se encontraban.

“Ya no pienses más en ellos, la vida se encarga de poner las cosas en su lugar”

Expresó con simpleza.

Y sino era así, él se encargaría de darles un empujón.

Antes de ingresar a la habitación, Emma abrió su bata y descubrió uno de sus hombros.

Tomó la bandeja del desayuno que dejó sobre una de las mesas del corredor e ingresó sosteniéndola.

Separó sus labios con sorpresa al ver colocarse una playera a Oliver.

“¿Vas a salir?”

Indagó con voz temblorosa.

“Si, quedé de ir al club, me comentaron que Guillermo de la Vega, suele ir a jugar tenis antes de irse a la empresa. Veré si tengo un golpe de suerte y lo encuentro”.

“Traje el desayuno, esperaba que compartiéramos un rato juntos”

Mencionó con nostalgia.

Oliver ladeó los labios sonriente, tomó el tenedor y pinchó unos trozos de papaya, manzana y fresas, se las llevó a la boca.

“Mañana desayunamos juntos, ahora tengo que irme, se me hace tarde”

Besó su frente y se fue.

Las manos de Emma comenzaron a temblar, al darse cuenta que ni siquiera la miró, llevaba su camisón más se%y.

El desayuno estaba perfectamente emplatado, se había esmerado tanto.

“¿Por qué no me amas?”

Cuestionó lamentándose tanto.

De pronto aquella conversación que tuvo con Mason retumbó en su cabeza.

‘Juro que lo que experimentaras va a provocar que te olvides de él’

Se llevó una mano a su pecho y jadeó sin poder evitarlo, ¿Sería posible?

Guillermo estaba sentado mirando hacia el azul del cielo de aquella cálida tarde, tomó su móvil e hizo una llamada.

“Algo se te debe estar ofreciendo para que te tomes la molestia en buscarme”

Melisa su hermana respondió.

Guillermo rodó los ojos.

“No es verdad, suelo llamarte a menudo”.

“Sí claro en navidad o año nuevo”

Bromeó la chica.

“¿Qué se te ofrece?”

Indagó curiosa.

“Necesito un favor”

Expresó con sinceridad.

“Yo no sé nada de moda, ni esas cosas y tú eres una experta”

Manifestó.

“¿Acaso necesitas que te cambie tu anticuado look de atractivo y empoderado hombre de negocios?”

Carcajeó.

Rodó los ojos.

“No es para mí lo que necesito, sino para una amiga”

Suspiró profundo.

“Pronto entrará a trabajar y necesita que la ayudes con algunas compras… ¿Lo harás?”

“Tienes suerte”

Resopló.

“Tengo libre esta tarde, te costará que pague algunas cosas para mí”.

“Hecho”

Respondió de inmediato.

.

.

.

Consejo: Puedes usar las teclas de flecha izquierda y derecha del teclado para navegar entre capítulos.Toca el centro de la pantalla para mostrar las opciones de lectura.

Si encuentras algún error (contenido no estándar, redirecciones de anuncios, enlaces rotos, etc.), por favor avísanos para que podamos solucionarlo lo antes posible.

Reportar