Ámame maldito CEO
Capítulo 85

Capítulo 85: 

Sus padres le escuchaban asombrados, no podían creerlo.

“¡Eso es imposible! Nadie es más rico que los Carson en Genesee”

Sentenció Arabella con desdén.

“Te digo que sí, madre, es más rico que mi futuro esposo, pero, ¿Cómo es que Merybeth consiguió casarse con un hombre tan poderoso y rico? dijo rabiosa y celosa de su hermana”

“iJa! Si eso fuera cierto, si ese hombre fuera tan poderoso y rico, yo no estaría ahora aquí, seguro estaría tras las rejas, ¿Y qué han hecho? ¡Nada, absolutamente, nada! Porque Merybeth es la esposa de un farsante, Merybeth está casada con un pobre diablo, con ínfulas de grandez”

Exclamó, y Sophie se rio junto con ella.

De pronto tocaron a la puerta.

Los hombres no dieron pie a que fueran presentados, entraron como si fueran dueños y señores de esa casa.

“Buenos días, buscamos a la soñera Arabella Hansen”.

La mujer se levantó asustada, al ver a los hombres.

“¡¿Y ustedes quiénes son?! ¿Qué quieren?”

Exclamó-

Los hombres le mostraron su placa de policía.

“Somos policías, tenemos una orden de arresto en su contra”.

“¡¿Qué?! ¿De qué se me acusa?”

“Se le acusa de haber privado de su libertad a la Señora Merybeth Hyland, y de haberla golpeado, causándole lesiones, así que venga con nosotros, todo lo que tenga que decir será usado en su contra, es mejor que guarde silencio, y llame a un abogado”.

Arabella lanzó un grito de terror, y los hombres la esposaron.

“¡No! ¡Mami!”

Gritó Sophie mientras, Félix la miraba incrédulo de lo que pasaba.

Sophie corrió tras su madre, pero solo vio como era subida a la patrulla y era esposada, la mujer sollozaba y todos los vecinos, veían lo que la mujer padecía.

Sophie sollozó.

Iban en el auto con su padre y llamaba por teléfono.

Al fin la llamada fue contestada.

“Hola, Sophie; ¿Tan temprano estás despierta?”

Preguntó Joe.

“¡Amor! Tienes que ayudarme”

Exclamó con desespero.

Joe se quedó perplejo al notar su tono de voz tan desesperado.

“¿Qué sucede, Sophie?”

“¡Es Merybeth! Nos ha hecho mucho daño, nos ha hecho algo terrible tienes que ayudarme, por favor”

Exclamó angustiada.

Joe sintió un miedo descomunal.

“¡No entiendo! ¿Qué ha hecho Merybeth? ¡Habla, ahora! Dime, ¿Cómo está Merybeth?”

Sentenció.

“¡Acusó a mamá de cosas inverosímiles! Han detenido a mi madre, Joe, ¿Entiendes lo que significa? ¡Mi madre está presa!”

Exclamó llorando con angustia Joe estaba impactado.

No podía creer que Merybeth fuera capaz de algo así.

“¡No puedo creerlo! Ella no haría algo así”

Exclamó.

“Juro que lo hizo, mi madre está tan enferma de tristeza, y papá está tan desesperado, debes ayudarnos, Joe”.

“Ya regresé de Nueva York, voy de inmediato a la comisaría”

Dijo y colgó la llamada.

‘¡Maldita Merybeth! Te juro que lo pagarás caro, estás labrando tu tumba y por lo menos, ahora Joe te odiará más que nunca, él no creerá en ti, menos ahora que tienes a un esposo, no puedo creerlo, miserable arribista, ¿Cómo has hecho para conseguir el corazón de ese CEO billonario tan atractivo? Te odio, Merybeth, y no descansaré hasta verte acabada’

Pensó con la furia hirviendo en su interior.

Estaba tan molesta.

Estaba tan… ofendida.

¿¡Como su hermana había conseguida una oportunidad así!?

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