Ámame maldito CEO
Capítulo 50

Capítulo 50: 

POV Merybeth:

Siento sus manos que se deslizan de mi cintura, hasta mi entrepierna.

Levanta mi vestido de verano, y me quedó sin aliento.

Su mano izquierda acaricia sobre mi ropa interior.

En suaves círculos, envía señales de placer a todo mi cuerpo.

Siento que estoy húmeda.

Siento que nunca tuve tanto miedo como hoy.

Pero al mismo tiempo… ese miedo se siente tan bien.

¿Por qué?

Nunca soñé que pasaría, nunca con él.

Me quedó quieta, pensando en nada, sintiendo.

Sus besos están en mi cuello, muerde con suavidad el lóbulo de mi oreja y me estremezco.

Me pregunto si lo sabe.

Estoy segura de que sí.

Siento lo que roza mi trasero.

Tan fuerte…

Tan firme y grande…

Sus dedos siguen acariciando esa zona, y yo solo cierro los ojos.

Esto es demasiado para mí.

Siento que no podré más, pero su mano baja mi pantaleta, y siento más terror, pero me quedó inmóvil.

Aunque quisiera detenerlo, tampoco puedo.

Es como si una parte de mi conciencia necesitará saber que pasará para seguir viviendo.

Estoy perdida en sus brazos.

Estoy perdida en sus caricias.

Siento sus dedos acariciando mi cl!toris.

Esta sensación es bendita.

Siento la humedad.

Siento el placer que comienza a dominarme.

Es como si fuera otra persona.

Una nueva mujer… es como si fuera libre.

Jadeo y tiemblo.

Escucho su balbuceo.

Giro mi cabeza, y él aún puede besar mis labios.

Un beso largo, audaz, voraz.

Jamás la noche duró tanto, sigue moviendo sus dedos en mi entrepierna, yo siento que me estremezco, que me dejo llevar, que disfruto, g!mo, y lo gozo.

Si está bien o mal, mi… conciencia ya no tiene sentido; porque me he entregado al placer.

Quiero sentir más.

No puedo respirar.

Mi cuerpo esta tan tenso.

Siento su mano derecha tocando mis pechos hasta acariciar mis pezones erguidos con la yema de su dedo.

Libero un jadeo.

Siento que hay algo en mi interior.

Algo que crece.

Algo que se expande.

Estoy al borde de la locura.

Tanto gozar, parece que no habrá un final…

De pronto su dedo en mi cl!toris se mueve más y comprime con intensidad.

Una ola de placer explota en mi interior.

Viaja desde mi v%gina, liberándose por todo mi cuerpo.

Es como magia.

Lanzó un g%mido y un grito, mientras siento que él cubre mi boca con su otra mano, y besa mi mejilla.

“¿Te gustó? Eso es un org%smo, tu primer orgasmo, ¿Verdad? Y fue todo mío”

Sus ojos me miran y no puedo saber lo que piensa, es como si fuera un enigma que nunca descubriré.

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