Ámame maldito CEO -
Capítulo 312
Capítulo 312:
Orson negó.
“No lo creo, no creo en otros universos o realidades, y si existen, olvídalas, está es tu realidad, esta es tu felicidad, disfrútala”.
Sean sonrió.
“Saldremos de la Mansión Carson, luego de lo que pasó, no quiero más estar cerca de ellos”, dijo él.
“Es lo mejor, y también para Joe, alejarse de Merybeth será bueno, así sin verla, le será más fácil olvidarla”.
Sean asintió.
…
Mientras tanto en otro lugar…
Mary BelI sollozaba y Octave intentaba calmarla.
Para su mala suerte, sus esfuerzos eran inútiles.
ÉI sabía que Tom estaba alIá afuera.
Octave buscaba inútilmente una salida, pero no la encontraba.
“Octave, ¿Crees que volveré a ver a mi hija, algún día?”
Octave sintió que sus palabras lo lastimaban.
ÉI asintió para calmarla.
“Estoy seguro, daré mi vida entera, Mary BelI, para que puedas volver a verla, y seas feliz con ella, lo prometo”.
Mary BelI sonrió y lo abrazó con fuerzas.
Octave no quería dejar de abrazarla, adoraba estar cerca de ella, pero ambos escucharon el sonido de una llamada.
Octave se alejó de Mary BelI y fue a escuchar.
Tom caminaba por la bodega, hablaba en voz bien alta, y las paredes de madera, dejaban que el sonido de su voz llegara a los oídos de Octave.
“Entonces, ¿Traerás el dinero?”
“Sí, tengo el dinero, no te angusties, pero Mary BelI deberá venir conmigo”
Tom sonrió con malicia.
“Claro, te veo a las ocho de la noche, querida Arabella”, dijo con una sonrisa.
“Quiero mi dinero en efectivo, no quiero juegos, ¡Eh!”
Colgó la llamada y sonrió con burla.
“¡Estúpida!”
Arabella miró a Regina, y asintió.
“Todo está listo, Regina, iré por Mary BelI, y con ella chantajearemos a Sean para que te devuelva la herencia Carson, y haré que Merybeth me dé la fortuna Hansen, estaremos a mano, obtendremos lo que queríamos”.
Regina sonrió.
“Buena suerte, querida”.
Arabella salió para esperar a Matthew que la llevaría.
Matthew entró y fue con Regina.
“Ya sabes lo que debes hacer, Matthew, que esa mujer no vuelva jamás, que se pudra en la cárcel, y lleva a Mary BelI al lugar secreto que tenemos, para que pronto podremos chantajear a Merybeth, ella se casará con mi Joe, cuando Sean por fin esté muerto”, sentenció con una gran sonrisa.
Tom tomó su teléfono y marcó al número que venía indicado en la noticia de las reseca.
Pronto la llamada fue respondida por una mujer.
“Bufete Hyland y Asociados”.
“Escuché, tengo a Mary BelI Riley en mi poder, quiero la recompensa que me ofrecieron”.
Lynda sintió una emoción incontenible.
“Un momento”.
La mujer corrió hasta donde estaba Edward y le explicó.
ÉI tomó el móvil.
“Dígame, ¿Dónde está Mary BelI Riley?”
“No tan rápido, quiero antes mi recompensa, quiero los veinte millones”.
“Los obtendrá, se lo puedo jurar”.
“Un juramento no me importa, quiero verlo realidad, IIámeme a las siete de la noche, conduzca hacia las afueras de Allegany, cuando esté ahí, envíeme un mensaje”, explicó con mucha confianza y una sonrisa.
“Le daré la dirección, pero, le juro, si envía a la policía, mataré a la mujer sin dudar”.
.
.
.
Si encuentras algún error (contenido no estándar, redirecciones de anuncios, enlaces rotos, etc.), por favor avísanos para que podamos solucionarlo lo antes posible.
Reportar