Yo soy tuya y tú eres mío
Capítulo 986

Capítulo 986:

Mitchel intentó localizar la fuente del olor, pero su cuerpo le falló y sólo sus pestañas aletearon como alas de mariposa.

Al salir de la sala de Mitchel, Raegan consiguió contener las lágrimas que habían brotado de sus ojos.

Las luces del pasillo eran tenues y Matteo no miró directamente a la cara de Raegan, por lo que no percibió los signos de su angustia. Sin embargo, una tristeza invisible seguía envolviéndola, imposible de quitar.

Matteo consoló a Raegan: «Señorita Foster, no se preocupe. La operación de mañana seguramente tendrá éxito. El señor Stevens ha hecho todos los preparativos necesarios. Debemos tener fe en él y confiar en que Mitchel saldrá adelante».

Raegan sintió un profundo dolor, pero lo disimuló con un exterior tranquilo, limitándose a asentir. «Sí, todo irá bien. Por favor, cuida de él».

Matteo afirmó: «Es mi responsabilidad».

Pero tras responder, Matteo sintió que algo iba mal. ¿Qué quería decir Raegan al pedirle que cuidara de Mitchel en el futuro? ¿Planeaba marcharse a algún sitio? No se atrevió a preguntárselo directamente. Tras estudiar su expresión, descubrió que parecía normal, lo que le inquietó un poco.

«Me voy, Matteo», dijo Raegan y se marchó rápidamente. Sentía que si se demoraba, su pena la abrumaría.

Al día siguiente, a las siete de la mañana, Raegan ya estaba en un avión rumbo al extranjero. Victor y Erick la acompañaban.

Al ver que Raegan miraba continuamente por la ventanilla en dirección a Ardlens, Erick pensó un momento y luego dijo: «Raegan, si estás preocupada, podemos volver».

«No hace falta, Erick». Dicho esto, Raegan se arrebujó en la manta, cerró los ojos y empezó a dormir.

Erick suspiró. Podía ver que Raegan realmente no quería irse.

Incluso en el hospital, cuando Raegan había mejorado hasta el punto de recibir el alta, se había quedado debido a su preocupación por Mitchel.

Pero el día de la operación de Mitchel, insistió en marcharse, lo que Erick sospechó que era su forma de intentar escapar.

En el extranjero, a las tres de la madrugada, Erick recibió una llamada de Ardlens. Era una actualización sobre el estado de Mitchel.

La operación de Mitchel había transcurrido sin contratiempos, y ahora lo único que necesitaba era recuperarse lentamente. Se calculaba que tardaría entre tres y cuatro meses más en ponerse de pie. Después de todo, había sufrido una grave herida de bala en el pecho. Aunque no había alcanzado ningún órgano vital, había afectado a parte de la movilidad de sus articulaciones.

La rodilla estaba destrozada y, tras una operación para extraer los fragmentos y limpiar la zona, le habían colocado una prótesis articular impresa en 3D. Tardaría unos seis meses en recuperarse y adaptarse por completo. La recuperación no iba a ser rápida.

Erick transmitió esta buena noticia a Raegan, que se tomó un momento antes de responder suavemente: «Qué bien».

Luego, Raegan se retiró a su habitación. Una vez dentro, cerró la puerta, se sentó al borde de la cama y juntó las manos en señal de oración. «Gracias, Dios. Gracias por responder a mis plegarias».

Un mes después, en una habitación de hospital de alto nivel en Ardlens.

Mitchel, vestido con una bata de hospital color caqui y con un aspecto delgado pero inconfundiblemente atractivo, oyó un golpe seco en la puerta. «Pase», respondió, sin emoción.

Entró una joven enfermera, empujando un soporte de suero. Cuando se percató del llamativo aspecto de Mitchel, sus mejillas se sonrojaron.

Al mirarla de cerca, la enfermera se había puesto un maquillaje difícil de distinguir, que le daba un aspecto de falsa naturalidad. Su uniforme blanco de enfermera le daba un aspecto inocente pero sutilmente seductor.

Sin embargo, Mitchel no le prestó atención, indiferente a quienquiera que entrara a ponerle la vía.

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Nota de Tac-K: Tengan un excelente inicio de semana lindas personitas, Dios les ama y Tac-K les quiere mucho. (ɔO‿=)ɔ ♥

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