Capítulo 1600:

A la mañana siguiente, Nicole contemplaba las píldoras abortivas, sumida en sus pensamientos. Se enfrentaba a una decisión difícil. Comprometida a desafiar a Jarrod en los tribunales, sabía que las interacciones frecuentes eran inevitables.

El proceso judicial comenzaría con una mediación, lo que prolongaría el calvario. Sus caminos se cruzarían a menudo, y su objetivo era minimizar las complicaciones. Esperaba una resolución rápida.

Con el corazón encogido, Nicole cogió las pastillas, se metió una en la boca y se dispuso a tragarla con agua.

En ese momento, su teléfono vibró. Supuso que era un teleoperador y desestimó la llamada.

Cuando estaba a punto de beber un sorbo de agua, el teléfono volvió a sonar, esta vez con urgencia. Al darse cuenta de que los teleoperadores rara vez devolvían la llamada tan rápido, contestó vacilante. Era la nueva ayudante de Jarrod. «¿Señorita Lawrence?»

«Sí», respondió Nicole.

«Soy Conor Jensen, el asistente del señor Schultz. Al señor Schultz le gustaría discutir los derechos de visita. ¿Puede hablar ahora?»

Aturdida por un segundo, Nicole se alegró enseguida. «Sí, estoy disponible», dijo rápidamente.

«Excelente. El Sr. Schultz tiene tiempo ahora pero estará ocupado más tarde. ¿Podría venir inmediatamente?» preguntó Conor.

En su excitación, Nicole dejó de lado su plan de tomarse la píldora abortiva escupiéndola. Se apresuró a llamar un taxi para ir al Grupo Schultz. Conor la condujo al despacho de Jarrod.

Al entrar, Nicole vio a Jarrod tecleando afanosamente en su ordenador. Conor guió a Nicole hasta un sofá, le sirvió agua y salió de la habitación.

Tras terminar su tarea, Jarrod se acercó a Nicole.

Nicole, rebosante de impaciencia, inició la conversación preguntando: «¿Me vas a dejar ver a Austin?».

«I…» Antes de que Jarrod pudiera terminar la frase, Nicole sintió una oleada de náuseas y empezó a tener arcadas. «Uf…», gimió.

El ruido inesperado hizo que Jarrod frunciera el ceño. «¿Qué te pasa?»

«Estoy bien… Ugh…» Nicole se esforzó por hablar mientras volvía a sentir arcadas. Rápidamente se tapó la boca y se apresuró a ir al baño de la oficina. Como ya había estado aquí con frecuencia, sabía exactamente dónde estaba.

Dentro, con la puerta cerrada, el sonido de las arcadas de Nicole llenó el espacio, frunciendo aún más el ceño de Jarrod. El estómago de Nicole seguía revolviéndose, lo que provocó que vomitara en seco durante varios minutos y que sólo produjera un poco de saliva. Este embarazo estaba resultando especialmente difícil para ella, con síntomas graves e incómodos.

En el aseo, Nicole respiró hondo para estabilizar su ritmo cardiaco y mantener la compostura. Finalmente, se tranquilizó. Después de enjuagarse la boca, salió lentamente del baño.

Para su asombro, Jarrod la esperaba justo al otro lado de la puerta. Su metro noventa de estatura y su formidable presencia parecían bastante intimidantes. Miró a Nicole y le preguntó en voz baja: «¿Qué te preocupa?».

A Nicole se le aceleró el corazón. Disimuló su nerviosismo y dijo: «Creo que esta mañana he mezclado gachas calientes con algo frío. No me sentó bien al estómago».

A pesar de su racionalización, Jarrod permaneció en la puerta, su presencia intensificó su ansiedad. Sintiéndose obligada a dar más explicaciones, añadió: «Siempre he tenido el estómago delicado».

Jarrod la observó en silencio durante unos segundos antes de apartarse. «Si no te encuentras bien, deberías consultar a un médico», sugirió con tono distante.

Nicole percibió su comentario no como una preocupación, sino quizá como una señal de que la intervención de Rhett estaba surtiendo efecto. Compartían un hijo, y preservar una relación cordial era esencial para el bienestar de su hijo.

Nicole asintió y dijo: «Lo haré».

.

.

.

Consejo: Puedes usar las teclas de flecha izquierda y derecha del teclado para navegar entre capítulos.Toca el centro de la pantalla para mostrar las opciones de lectura.

Si encuentras algún error (contenido no estándar, redirecciones de anuncios, enlaces rotos, etc.), por favor avísanos para que podamos solucionarlo lo antes posible.

Reportar