Yo soy tuya y tú eres mío
Capítulo 1187

Capítulo 1187:

Era el primer regalo que le hacía a Roscoe, y estaba deseando que se lo probara pronto.

Todavía era de día cuando Roscoe regresó. Había viajado al pueblo a buscar una rara hierba beneficiosa para la salud de Nicole.

Había hecho un trato con la farmacia del pueblo para comprar cualquier hierba que tuvieran, incluso desafiando el mal tiempo para conseguirla. Eso fue exactamente lo que consiguió hoy.

Al entrar, Roscoe vio que Nicole se había trasladado del exterior al lado de la hoguera, todavía trabajando en la bufanda.

Había engordado un poco y, aunque seguía siendo delgada, ya no parecía tan demacrada.

La luz del fuego iluminaba su rostro, dándole un aspecto vivo y hermoso.

La visión de su labor de punto era profundamente reconfortante.

Roscoe se acercó, cogió suavemente el hilo de las manos de Nicole y le dio un pastel de flores de ciruelo. Luego bromeó: «Se supone que tienes que practicar un poco cada día. ¿Te has esforzado demasiado hoy?».

«No soy tan delicada, y tejer no es agotador», respondió Nicole riendo entre dientes. Dio un mordisco al pastel de flores de ciruelo, cuyo sabor y dulzor eran característicos de esta ciudad y deliciosamente únicos.

«Recuerda, no te esfuerces demasiado. Sólo puedes tejer cuarenta minutos al día», dijo Roscoe en voz baja.

«Cuarenta minutos no son suficientes. Mis manos todavía se están adaptando. No puedo terminar bien en tan poco tiempo», replicó Nicole.

«No importa si no está perfecto. No hay prisa. Aunque lo termines para el verano, me lo pondré», le aseguró Roscoe.

Nicole soltó una risita. «¿No te daría un sarpullido por llevarlo en verano?».

«Sería un sarpullido alegre», bromeó Roscoe y se levantó para preparar la cena.

Al verle alejarse, Nicole dejó a un lado el pastel de flores de ciruelo y volvió a coger la bufanda, tejiendo con renovado vigor.

Por alguna razón, sentía la imperiosa necesidad de terminarla más rápidamente.

Sintió un miedo inquietante, temiendo que Roscoe nunca pudiera ponerse esta bufanda.

En el cumpleaños del padre de Vicki, Jarrod y Vicki asistieron juntos.

Cuando salió a la luz el escándalo de Jarrod, el padre de Vicki, Wayne, insistió firmemente en que Vicki y Jarrod pusieran fin a su relación.

En la alta sociedad, un poco de coqueteo y algunos hábitos extravagantes no eran nada inusual. Muchos hombres veían a sus amantes simplemente como un medio para aliviar el estrés. Pero no trataban a sus esposas de esa manera.

A decir verdad, Wayne había sido más salvaje que Jarrod en su juventud, pero Vicki era su hija más querida, nacida de la mujer que amaba entrañablemente. Por lo tanto, siempre había mimado a Vicki.

Cuando estalló el escándalo de Jarrod, Wayne ordenó inmediatamente una investigación.

Los resultados lo dejaron atónito. La mujer involucrada con Jarrod era Nicole, la heredera de la familia Lawrence, desaparecida desde entonces.

Por aquel entonces, la dramática caída de la familia Lawrence había sido un importante tema de conversación en la sociedad.

Aunque todos temían la naturaleza despiadada de Jarrod, Wayne admiraba su actitud intransigente. Veía mucho de su yo más joven en Jarrod, un hombre con agallas.

Pero con la caída de la familia Lawrence, no era justo decir simplemente que Jarrod les guardaba rencor por mantener a Nicole a su lado y torturarla.

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