Una madre de alquiler
Capítulo 226

Capítulo 226:

Devon aceleró aún más. Anthony trató de alcanzarlo, pero un auto venía del otro lado, por lo que se tuvo que quedar atrás. Anthony golpeaba nerviosamente sus manos en el volante. Devon aceleró, dejando a Anthony un poco más atrás. Cuando consiguió alejarse aún más, se metió entre dos vehículos y giró a la izquierda por un camino que estaba cerrado con conos. Anthony lo siguió junto con la policía.

La carretera estaba en construcción y Anthony comenzó a preocuparse porque Devon no se detenía. La policía se acercó a su vehículo y le ordenó que se detuviera. Devon se desesperó al ver que no había salida, miró para el costado y siguió acelerando. De pronto, al mirar hacia adelante vio un agujero en el suelo, pero no pudo frenar y el auto pasó por el agujero, se inclinó hacia adelante, clavó los frenos y el auto comenzó a dar vueltas. Anthony detuvo su coche de inmediato, gritando desesperado; el coche dio varias vueltas y, cuando se detuvo, Anthony corrió hacia él y encontró a Amanda boca abajo, presa de su cinturón de seguridad. Tenía sangre en la frente y Devon tenía toda la cara herida y el brazo atrapado en el volante.

Anthony intentó abrir la puerta, pero era imposible. Intentó romper el vidrio pegándole puñetazos. Se desesperó aún más al sentir el olor a gasolina. Los policías intentaron sacarlo de allí, pero Anthony los empujó, pateó el vidrio y logró romperlo. Con la ayuda de los guardias de seguridad, se las arregló para abrir la puerta. Luego sostuvo a Amanda mientras que los guardias le cortaban con una navaja el cinturón de seguridad que tenía pegado al cuerpo. Él la cargó en sus brazos y huyó; cuando ya se habían alejado un poco, el coche explotó, haciendo que ambos cayeran al suelo.

El auto estaba en llamas, así que la policía llamó a los bomberos. Anthony miraba las llamas preguntándose qué hubiera pasado si no sacaba a Amanda, le dolía el pecho de solo pensarlo. Miró las heridas de su mujer y la cargó para llevarla a su coche. Los guardias de seguridad estaban hablando con la policía mientras los demás acompañaban a Anthony. La ambulancia ya estaba llegando al lugar, pero Anthony no podía hablar con nadie. Se dirigió lo más rápido que pudo al hospital y vio que Amanda empezaba a volver en sí. Miraba alrededor y sentía que todo giraba, hasta que se desmayó nuevamente.

Anthony estaba muy preocupado, llegó al hospital más cercano y los médicos fueron corriendo hasta donde estaba él y lo ayudaron a trasladar a Amanda. La colocaron en una camilla y salieron corriendo. Anthony llamó al médico de Amanda y le pidió que fuera hasta allí. Por suerte llegó rápido porque estaba en una reunión cerca del lugar. Anthony caminaba de un lado a otro. Sus padres llegaron al hospital luego de haber visto las noticias por la televisión. Anthony tenía mucho miedo de perderla y de perder a su hijo.

Su mayor preocupación era que la había visto manchada de sangre, cada vez que miraba sus manos sentía más miedo. Pasaron las horas y no había noticias. Sabrina trató de calmarlo, pero fue en vano. Anthony lloró desesperadamente hasta caer al suelo sin fuerzas y se abrazó a las rodillas de su madre, llorando. Geoffrey y Sabrina estaban aterrados y tristes de verlo así. Sabrina lo abrazó con más fuerza.

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