Un año para separarme
Capítulo 22

Capítulo 22:

Hugo no podía creer que su abuelo le había buscado semejante mujer como su esposa, como pudo ser tan ciego e incluso darle acciones de la empresa. Él debía hacer algo para impedir que esa mala mujer se quedara con todo el trabajo que él había realizado por la empresa.

Debía de haber alguna manera de alejar a esa insoportable víbora arribista. Luego se le ocurrió una idea, la cláusula de infidelidad, si Hugo lograba comprobar que ella era infiel podría solicitar el divorcio y su abuelo no se lo podía impedir y de esa manera también desenmascaraba asa falsa mujer delante de su abuelo. Solo tenía que quitarle la careta.

Hugo sacó su móvil del bolsillo de la chaqueta y marco un número, al segundo timbre fue contestado.

“Necesito un gigoló” ordenó Hugo, Martin que se acababa de despertar y creyó no entendía lo que decía su amigo y le preguntó.

“Podrías repetir creo que no entendí bien”.

“Necesito un gigoló” repitió Hugo.

“Ah, ya, creí que te iban más las mujeres” dijo incrédulo aun por la petición de su amigo.

“No es para mí imbécil, es para tenderle una trampa a mi esposa”.

“Está bien, dame algunos minutos y veo que encuentro”.

“También invita a tu hermano a tu discoteca hoy, dile que estas de buen humor y hoy no tiene que pagar nada, que valla con todos sus amigos”.

“Pero que estás hablando, ese es mi negocio, decirle eso a mi hermano seria ir a la quiebra, no sabes lo que dices, ese chico no sabe cuándo parar de beber, además que tiene que ver mi hermano en todo esto”.

“Tu hermano es amigo de esa mujer, no te preocupes por los gastos, yo pago todo; pero asegúrate de hacerle saber que tiene que traerla a ella, no me importa el resto. También dile al gigoló que vaya esta noche y contrata un paparazi. Me llamas cuando tengas todo listo. Quiero supervisar los detalles”.

“Tú sabes que estás hablando conmigo verdad, con Martin tu amigo, no con Alejandro tu asistente. Me da la impresión de que te equivocaste de número”.

“Has lo que te digo. Alejandro tiene cosas más importantes que hacer“ respondió simplemente Hugo y luego colgó la llamada.

Martin se sentó en la cama y miro a las dos hermosas mujeres que dormían a su lado y maldijo a Hugo por alejarlo de tan deliciosas criaturas. Se levanto de la cama y caminó hasta el baño desnudo y descalzo.

Pero cuando fue a abrir la puerta una chica salió de él y entonces Martin recordó que anoche eran cuatro. La chica le sonrió seductora y Martin movió la cabeza hacia los lados para concentrarse.

“Lo siento, será en otro momento, tengo cosas que hacer.” le dijo mientras la esquivaba y caminaba a su destino.

La chica lo abrazo por la espalda, renuente a perder la oportunidad de por fin disfrutarlo ella sola, sin tanta compañía.

“Yo te puedo ayudar, si quieres, te escuche hablar por teléfono y tengo unos amigos que te puede servir son jóvenes y guapos y están necesitados de dinero.” le dijo mientras besaba su oreja y su mano descendía. Martin ya no era capaz de concentrase ni de pensar en nada mas así que acepto.

“Está bien, envíales un mensaje, mientras yo le escribo a mi hermano.

La chica sonrió y se acercó a buscar su móvil, envió dos mensajes y luego volvió a complacer al hombre frente ella, que aún estaba con el teléfono en la mano. Ella se arrodilló y él envío el mensaje para concentrarse solo en el placer.

Sara había llamado a Emily para salir a dar una vuelta con su coche nuevo. Pero Emily no tenía tiempo, estaba en su trabajo de medio tiempo. Así que Sara solo le quedaba un amigo para pasar el tiempo, marco el número de Tobias.

Él también estaba ocupado en ese momento, perola invito a salir esa noche, al parecer su hermano se había dado algún fuerte golpe en la cabeza y estaba misteriosamente amable y le había invitado a ir al bar con todos los gastos pagos. Sara lo considero unos segundos, pero como no tenía nada que hacer decidió asistir.

Después de todo ella estaba casi segura de que las dificultades que había enfrentado hoy todas tenían que ver con Hugo, así que lo mejor sería llegar tarde para no tener que cruzarse con él, por lo que acepto la propuesta de Tobias y luego de colgar la llamada le envió un mensaje a Emily invitándola también y esta acepto, así que quedaron en que Sara la recogería dentro de dos horas en el trabajo, luego irían a casa a cambiarse para ir juntas a la discoteca.

Sara tenía dos horas libres antes de recoger a su amiga y considerando que acababa de gastar sus ahorros decidió hacer una visita a su editorial y ver cómo iba la venta de su último libro, también aprovecharía y así entregar su próximo manuscrito, aun le quedaba tiempo para la fecha de entrega, pero a ella nunca le gustaba estar corta de tiempo, prefería hacerlo con anterioridad, así si había que hacer algún cambio tenía tiempo de sobra.

Los hombres en el carro negro aun la seguían y de inmediato llamaron a Hugo y le informaron que la mujer había entrado a una editorial, pero habían preguntado en la recepción y se negaron a darle información. Hugo supuso que ella se había ido a encontrar con su amante. Y de inmediato llamo a Alejandro y le ordeno

“Averigua a quien fue a ver a la editorial y tráeme toda la información al respecto”.

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