Sus mil secretos
Capítulo 1589

Capítulo 1589:

Cuando regresó a su coche, Alicia, que esta vez había espabilado, se sentó en el asiento del copiloto. Después de echarle una mirada, Aaron se inclinó para ponerle el cinturón de seguridad.

Con ambos de nuevo muy cerca, hasta el punto de poder oír la respiración del otro, Alicia se sorprendió cuando pensó que Aaron quería entrar de lleno a besarla.

Mientras la punta de sus orejas se enrojecían, ella cerró los ojos anticipándose a su beso.

Dejando escapar una risita, Aaron la abrochó correctamente antes de volver a su asiento. Cuando Alicia se dio cuenta de que Aaron sólo la estaba ayudando a ponerse el cinturón en lugar de besarla, se sintió tan avergonzada que no sabía dónde esconder la cara.

Durante todo el trayecto, no se atrevió a establecer contacto visual y siguió mirando por la ventanilla, lo que hizo que Aaron curvara los labios.

Después de conducir durante una hora, finalmente se detuvieron. Cuando Alicia se apeó junto a él y vio que estaban al pie de una colina, lanzó a Aaron una mirada inquisitiva preguntándole por qué la había llevado allí.

Al notar su expresión de desconcierto, Aaron le explicó: «Estamos aquí para contemplar las estrellas».

A continuación, sacó una tienda de campaña y una mochila del maletero y condujo a Alicia colina arriba. Por el camino, ella se ofreció a llevarle la mochila, pero Aaron se negó.

Soy un hombre, ¿Cómo voy a dejar que una chica lleve mis cosas?

Una vez llegaron a la cima, ambos montaron la tienda antes de sentarse en la esterilla que habían colocado.

Era la primera vez que Alicia observaba las estrellas. Le pareció que observar las estrellas desde un punto elevado era una experiencia totalmente diferente. Mientras contemplaba el brillo de las estrellas en el cielo nocturno, una sonrisa de felicidad se dibujó en su rostro.

Cuando sus ojos se posaron en aquella sonrisa suya, Aaron quedó hipnotizado durante un fugaz instante. Justo cuando recuperó la mirada y se tumbó, Alicia se miró hacia él al percibir su movimiento. En el instante en que lo hizo, sus ojos se cruzaron, haciendo que ella desviara la mirada por reflejo y volviera a mirar las estrellas.

A pesar de que parecía estar mirando las estrellas, su mente estaba siendo inundada por imágenes de Aaron.

No esperaba que él la llevara a mirar las estrellas, porque eso era lo que hacían las parejas. Aaron y yo…

Sólo pensar en su relación hizo que su mirada se oscureciera.

Ya no se tomaba en serio la observación de las estrellas, echó una mirada furtiva a su lado y vio a Aaron con los ojos cerrados. Me sorprende que pueda dormir en estas condiciones. ¿Cuánto hace que no duerme?

En ese momento, sintió pena por él.

Preocupada por si se resfriaba, sacó una pequeña manta de la tienda y lo cubrió suavemente con ella. Después, se tumbó de lado con la mano apoyando la cabeza. Con la ayuda de la luz de la luna y el brillo de las estrellas, observó en silencio su rostro.

Con su piel blanca como la porcelana, su puente nasal alto y sus rasgos exquisitos, era la personificación del hombre perfecto. Era imposible resistirse a él. En sus diecinueve años de vida, era la primera vez que se enamoraba de alguien.

Cuando vio lo profundamente que dormía, no pudo evitar inclinarse hacia él. Mirándole fijamente, su corazón empezó a latir sin control mientras cerraba los ojos y posaba sus labios en los de él.

Lo único que quería era darle un beso. Para su sorpresa, Aaron le dio la vuelta y la inmovilizó debajo de él antes de lanzarle un aluvión de besos.

Una vez desatada su lujuria, la llevó a la tienda, donde no tardaron en oírse gem!dos amorosos.

…

De vuelta en Chanaea, Vinson estaba sentado en el sofá, sombrío. A pesar de todos los controles que había establecido, ninguno de ellos le devolvía ninguna pista sobre el paradero de su madre. Lleno de frustración, se puso en pie, sólo para caer de golpe hacia atrás.

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