Se vuelve glamurosa tras la anulación del compromiso -
Capítulo 610
Capítulo 610: Los Celos De Una Mujer
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Lawrence y dos guardaespaldas se situaron detrás de Ruth.
Justin estaba sentado en el sofá con una expresión fría y un aura fuerte. A primera vista, le recordaba a Nora la primera vez que había conocido a este hombre en California.
Sólo en momentos como éste podía Nora ver claramente que este hombre tenía un estatus noble. Cuando no estaba frente a ella, la expresión del hombre era altiva y poderosa. Todo su cuerpo desprendía un aura inaccesible.
No se dejaba molestar por Ruth y sólo bajaba la cabeza para manejar los documentos.
En cambio, Lawrence se dirigía a Ruth. «Señorita Ruth, no se complique las cosas. A lo largo de los años, nadie ha sido capaz de ocultarnos nada…»
Ruth no quiso molestarse en absoluto con él y le dijo directamente a Justin: «Señor Hunt, es inútil que me ignore así. ¿No tiene miedo de la opinión pública? Si desaparezco de la nada, me temo que el mundo exterior empezará a hablar de que usted me ha silenciado».
Justin pasó una página del documento, sacó un bolígrafo y lo firmó.
Sin embargo, Lawrence dijo: «Tsk, Señorita Ruth, estás subestimando demasiado a los Hunts, ¿No es así? ¿Cree que una batalla de la opinión pública nos importará? ¿Cree que puede publicar las noticias que le plazca a su alrededor?».
Ruth se quedó atónita.
Miró a Lawrence y vio la fuerte confianza que provenía de este asistente. Era como si esas cosas no fuera nada para él.
Se mordió el labio. «¡Cállate! Estoy hablando con el Señor Hunt. ¿Cómo puedes interrumpir?».
Lawrence levantó la barbilla y se burló. «Señorita Ruth, tiene que saber que sólo estoy aquí para hablar con usted porque estoy aburrido. ¿Cree que de otra manera tendría la oportunidad de hablar conmigo?».
Como asistente especial de Justin, las palabras de Lawrence tenían mucha importancia en Nueva York.
La gente corriente tendría que devanarse los sesos si quisiera tener una oportunidad de hablar con él. Era muy orgulloso y distante.
Ruth estaba furiosa. «¿Quién te crees que eres? ¿Sabes quién soy? No puedes permitirte ofenderme».
Lawrence se burló. «¿Quién eres tú?» Ruth quiso decir algo, pero se calmó. «¿Quieres sacarme información? No diré nada…» Entonces, volvió a mirar a Justin y dijo: «Señor Hunt, le sugiero que me deje ir. Vamos a tener una buena charla. De lo contrario, ¡Mi gente llamará a la policía si estoy desaparecida durante 24 horas!».
Lawrence: «¡Cielos, estoy tan asustado!» Frunció los labios. «¿Quiénes crees que son los Hunt? Incluso si tu gente llama a la policía, ¿Pueden poner un pie en nuestra propiedad sin ninguna prueba?»
Ruth frunció el ceño. «Tú…»
Lawrence se puso en cuclillas. «Entonces, te sugiero que hables calmadamente. Al fin y al cabo, nosotros tampoco queremos matar mujeres».
Ruth escupió y la saliva salpicó el rostro de Lawrence. «Desde en el momento en que me atreví a venir, no tenía miedo a la tortura. Además, ¡No puedes torturarme! Si pierdo tan solo un mechón de cabello, ¡Te garantizo que el Señor Hunt lo lamentará mucho!»
Lawrence frunció el ceño.
No sabía de dónde venía la confianza de Ruth, pero para estar seguro, seguía mirando a Justin.
En ese momento, Justin dejó por fin el documento. Levantó lentamente la cabeza, pero su mirada pasó por encima de Ruth y se dirigió directamente a Nora. Entonces, se puso de pie.
Seguía actuando de forma muy fría y distante, pero ahora, una sonrisa apareció de repente en su rostro. Se acercó a Nora y le dijo: «¡Estás aquí!».
Nora asintió con calma y luego dirigió su mirada a Ruth.
Ruth no parecía esperar que se acercara, pero en cuanto la vio, comprendió algo de repente. Volvió a mirar a Justin y frunció el ceño. «¡Se unieron para engañarme!»
Nora y Justin no podían molestarse con ella. Sólo Lawrence se molestó en hablar con ella. «Por supuesto. ¿Te has dado cuenta? Je, la Señorita Smith y nuestro Señor Hunt ya pueden hablar sólo con la mirada. ¿Cómo podrían haber sido perturbados por ti? Déjame decirte que tus asuntos no son nada a los ojos del Señor Hunt. Además, la Señorita Smith es muy magnánima. Ya le hasta tendido una trampa antes, así que seguro que no te vas a quejar de nada».
Mientras hablaba, Lawrence miró a Nora con atención.
Nora: «…»
Se giro para mirar a Justin y vio que él también la estaba evaluando. Parecía que a esta persona realmente le importaba su opinión.
Sin embargo…
Si Justin realmente se hubiera acostado con Ruth, sería bastante… desagradable. Simplemente agitó la mano y le dijo a Lawrence: «Deja de perder el tiempo. Sólo interrógala».
Lawrence asintió al instante. Justo cuando iba a llamar a alguien para que la bajara, los ojos de Ruth se abrieron de par en par y apretó los dientes. Miró a Justin y gritó: «Me acosté con el Señor Hunt. ¿De verdad te atreves a interrogarme? ¿Te atreves a tocarme?»
Todos: «?»
Lawrence se quedó atónito ante la lógica de sus palabras. «¿Por qué no podemos interrogarte?»
Ruth miró a Justin. «Señor Hunt, ¿realmente se atreve? Después de todo, tuvimos una aventura de una noche. ¿Cómo has podido tratarme así?».
Se asentó el silencio.
Al cabo de un rato, una mueca se formo en la boca de Nora. Su bonito rostro no pudo evitar tensarse ligeramente. Sólo sintió que el circuito cerebral de esta mujer estaba dañado. Sacudió la cabeza y se burló: «¿Crees que estás grabando un programa de televisión?».
Ruth se mordió el labio. «Eres demasiado descarada. ¿Vas a torturarme? Soy una mujer. ¿Se llaman a si mismos hombres?»
Lawrence: «…»
Nora agitó la mano. «Olvídalo. Busca una habitación insonorizada. Yo la interrogaré». Lawrence estaba aturdido. «Señorita Smith, ¿Lo hará usted?»
«¿Por qué? ¿No puedo?» respondió Nora. Lawrence miró apresuradamente a Justin y le vio asentir. Luego dijo con entusiasmo: «¡Claro que puede hacerlo!».
Con eso, hizo que los dos guardaespaldas llevaran a Ruth al sótano.
El cuarto oscuro del sótano estaba muy insonorizado.
Cuando entraron, Ruth fue atada a una silla. Su postura seguía siendo tranquila. «Ya he dicho que sólo oirás lo que quiero decir. Nunca sabrán lo que no quiero decir».
Lawrence también persuadió: «Señorita Smith, ¿Por qué no lo hacemos nosotros? Después de todo, no es apropiado dejarte hacer una cosa tan sangrienta, ¿verdad?»
En realidad, pensaba para sí mismo: ‘Señorita Smith, puede tratar enfermedades, pero ¿Puede interrogar a la gente?’.
Sin embargo, rápidamente se dio cuenta de que la Señorita Smith no estaba aquí sólo para interrogarla. ¡Sólo quería aprovechar la oportunidad para herir a Ruth!
Cielos, ¡Las mujeres! Eran realmente mezquinas. Aunque decían que no eran celosas, en realidad se preocupaban más que nadie, ¿verdad?
Quería que la Señorita Smith se divirtiera. ¡Más tarde, encontraría una excusa para ocupar su lugar y lo haría él mismo!
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Nota de Tac-K: Listos los capítulos del día martes, ahora si me detendré aquí por hoy, les comento que mañana también adelantaré capítulos pero no sé cuantos serán, pueden ser 5 como pueden ser 60, todo dependerá de cuanto tiempo tenga disponible, igual trataré de traducir lo más rápido posible manteniendo la calidad para ponernos al día con el inglés, tengan una linda mañana, tarde y noche chic@s, Dios les ama y Tac-K les quiere mucho. (ɔo‿=)ɔ ♥
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