Se vuelve glamurosa tras la anulación del compromiso
Capítulo 256

Capítulo 256: ¡Una Explicación Razonable!

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Diez segundos después, el silencio absoluto llenó la sala.

«…»

Un minuto después, el silencio en la habitación se volvió aún más aterrador.

«…»

Incluso después de que pasaran dos minutos, ninguno tenía intención de hablar.

«…»

A Nora, que siempre había tenido poco sueño, le costaba especialmente pasar el tiempo en ese momento. Cómo deseaba poder cerrar los ojos y quedarse dormida, para que cuando se despertara, el día volviera a ser luminoso y soleado.

Pero, obviamente, eso no era lo más apropiado en ese momento.

Nunca había tenido miedo de nada, y siempre había sido una persona directa y franca. Aun así, en ese instante comprendió un poco lo que significaba querer cavar un agujero y enterrarse en él.

Su mirada vagaba erráticamente. Miró al techo con los brazos colgando a los lados y le dio un codazo a Pete con la mano para que rompiera el silencio.

Pete: «…»

Para entonces, Pete y Cherry ya se habían comunicado mucho entre sí con la mirada.

Pete miró a Cherry: ‘¿Qué hacemos ahora?’.

Los grandes ojos de Cherry parpadearon: ‘¡Yo tampoco lo sé!’

Pete levantó las manos con impotencia: ‘El tirano parece tan tranquilo, pero cuanto más tranquilo está por fuera, más enfadado está por dentro’.

Cherry también miró a Nora: ‘Mamá también tiene una mirada muy seria. Cuanto más grave parezca, más miedo dará la decisión que tome’.

Pete estaba aterrorizado: ‘Seguro que mamá no está pensando en liquidar al tirano y llevarnos a los dos, ¿verdad?’

Cherry: ‘… No es imposible’.

Pete: ‘…’

Mientras los dos niños se comunicaban con la mirada, Nora le dio un codazo a Pete. Curvó un poco los dedos, haciéndole un gesto para que hablara.

Así, Pete dijo: «Mami, papá siempre trae 12 guardaespaldas e incluso 24 guardaespaldas ocultos cada vez que sale. No podrás luchar mientras escapas».

Tan pronto como dijo eso, la habitación se volvió aún más silenciosa.

«…»

Era como si la respiración de todos fuera audible.

Justin: «…»

Para ser honesto, ¡Él también estaba en un gran pánico en este momento!

Antes de esto, Nora no había sabido que él ya estaba al tanto de todo. Para que la mujer se quedara, había mantenido deliberadamente a uno de los dos niños con él. De este modo, ella permanecería siempre a su lado.

Pero ahora.

Si se hablaba del elefante en la habitación, ¡No podría seguir siendo ‘narcisista’!

La mujer le explicaría todo, y entonces…

¿Qué debía hacer para que la mujer y los niños se quedaran?

El hombre, que siempre había estado lleno de ideas cuando se trataba del mundo de los negocios, también tenía pánico. Por lo tanto, lo único que pudo hacer fue quedarse allí con una mirada pensativa.

Desgraciadamente, su expresión dio a Nora la impresión de que era un hombre muy aterrador.

Bueno, eso tenía sentido. Justin se pondría definitivamente furioso cuando supiera que le habían quitado a uno de sus hijos. Ya era muy impresionante que pudiera reprimir su ira y evitar desahogarse. Además, tampoco había dicho nada realmente horrible.

Cuando Nora, que acababa de pensar en eso, escuchó lo que dijo Pete, las comisuras de sus labios no pudieron evitar un espasmo.

*Cough*.

Jamás admitiría que, en efecto, hacía un momento había tenido ganas de noquear al hombre y luego huir del país con los dos niños.

De hecho, una ruta de escape ya se había formado en su mente en ese mismo momento. Después de salir, no debía conducir directamente al aeropuerto porque Justin era definitivamente lo suficientemente poderoso como para sellar el aeropuerto y los trenes.

Por lo tanto, conduciría hasta las afueras, encontraría un helipuerto vacío y haría que Lily pilotara un avión privado y viniera a recogerlos lo antes posible.

Sin embargo, Lily tardaría entre siete y ocho horas en volar. Después de todo, estaban demasiado lejos de Suiza, donde se encontraba Lily… Si realmente estaba fuera de las posibilidades de Lily, entonces conseguiría que Solo los recogiera en su lugar. Después de todo, él estaba más cerca de donde estaban.

Si no, su única opción sería pedir ayuda a su tía en el extranjero…

Pero cuando escucho hablar de los 36 guardaespaldas, Nora se calló y descartó la idea.

Ya había luchado contra los guardaespaldas de Justin antes; le resultaba fácil vencer a uno o dos, pero 36… Digamos, ¿Hasta qué punto tenía miedo de morir ese hombre? ¿Tenía que llevar a tanta gente con él cada vez que salía?

Mientras Nora soñaba despierta, Justin finalmente habló. «¿No debería darme una explicación razonable sobre esto, Señorita Smith?»

Uf…

Por fin se había roto el extraño ambiente. Nora respiró por fin aliviada. Después de pensar un rato en cómo explicar la situación, empezó a explicar los problemas con los niños. Dijo: «… Como ya lo has visto todo, no te lo voy a ocultar más. La razón por la que he estado tratando de acercarme a ti y a Pete es en realidad…»

Pero antes de que pudiera terminar, Justin la cortó y dijo: «Esa no es la explicación que pido. Más bien, en aquel entonces, ¿Por qué te quedaste embarazada de mis hijos a mis espaldas?».

Todas las palabras que Nora había preparado se atascaron en su garganta, ahogándola. Estaba a punto de hablar cuando Justin dijo bruscamente: «Será mejor que me des una explicación razonable, ¡¿Por qué conspiraste contra mí y luego huiste aquella noche? Incluso has dado a luz a dos de mis hijos».

Nora: «???»

¡Su mente estaba llena de signos de interrogación!

¿De qué noche estaba hablando?

No, espera…

Nora entrecerró los ojos. «¿No has dicho que no sabías cómo me quedé embarazada?».

Justin bajó la mirada. «No sabía que eras tú en ese momento, así que por supuesto que diría eso. Después de todo, seguro que no podía decir a los de fuera que una mujer había conspirado contra mí y se había aprovechado de mí, ¿verdad?»

Nora: «?????»

Se señaló a sí misma con incredulidad. «¿Yo… conspiré contra ti?»

Justin, que ponía cara larga, contestó: «Sí. Teniendo en cuenta lo gorda y fea que eras entonces, no puede ser que me haya enamorado de ti y haya conspirado contra ti, ¿verdad?».

Nora: «??????»

¿Estaba sufriendo una pérdida de memoria? ¡¿O realmente había sido sonámbula aquella vez?! ¡Pero ella realmente no recordaba que él apareciera en su sueño! Después de todo, dado su rostro, habría quedado profundamente grabada en su memoria si hubiera soñado con él.

Estaba a punto de refutarlo cuando Justin volvió a hablar. «Dime, mujer, ¿Qué estás tramando exactamente al conspirar contra mí e incluso darme dos hijos?»

Nora: «…»

Se quedó sin palabras.

No sabía qué decir.

Al ver, como ella no decía nada, la voz de Justin se volvió aún más fría. «Si no vas a dar explicaciones… Estos dos niños son parte de los Hunts. De ninguna manera voy a permitir que los niños de los Hunt anden por ahí fuera, ¡Y mucho menos que una mujer con segundas intenciones se acerque a mis hijos! Así que, sin una buena razón, ¡Puedes olvidarte de volver a ver a mis hijos!»

Colocó las manos sobre las cabezas de Pete y Cherry, entonces dio un paso atrás con los dos.

Nora: «?»

Sus ojos se oscurecieron.

¡Cómo se atrevía ese hombre a amenazarla! ¡Ahá!

Justo cuando estaba a punto de atacar…

Cherry y Pete, a los que Justin sujetaba, entraron en pánico cuando escucharon a su padre.

¿No podrían ver a mamá nunca más?

No, ¡No podía pasar eso!

Cherry gritó inmediatamente: «¡Papá, mamá no tiene ninguna mala intención! Tampoco tiene segundas intenciones».

Aunque Justin, que estaba en medio de un enfrentamiento con Nora, había adoptado un comportamiento gélido en la superficie, en realidad estaba terriblemente ansioso en secreto.

¿Por qué no había mordido aún el anzuelo aquella tonta?

Bueno, era cierto que no temía un enfrentamiento frontal.

Sin embargo, su preciosa bebé finalmente habló en ese momento. Justin dejo escapar un suspiro de alivio en su interior, aunque la mirada de su rostro seguía siendo fría. «¿Qué está planeando, si no es algo malévolo?»

«Es… es… es…» Cherry miró a Nora, y luego a Justin. Por fin, se dirigió a Pete en busca de ayuda y le preguntó: «Es… ¿Qué era, Pete?».

Pete: «?»

Al ver que el tirano también miraba, Pete balbuceó: «Es… Es…»

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