Los pequeños del CEO
Capítulo 40

Capítulo 40:

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Aunque sabía que Stella era muy pegajosa con él, Joseph nunca pensó que esta chica tuviera la intención de emparejarlo a él y a su madre. Se quedó paralizado durante unos segundos antes de recuperar la presencia de ánimo. Acarició la cabeza de Stella, pero no contestó nada.

«A Noah también le gusta mucho mi mami». Stella hizo un movimiento asesino y guiñó un ojo mientras hablaba: «Puedes preguntarle a Noah, estoy segura de que espera sinceramente que mi mami pueda convertirse en su mami».

La mirada de Joseph se posó en la cama del hospital. Preguntó vacilante: «Noah, ¿Es verdad?”.

Noah asintió enérgicamente con la cabeza.

Joseph frunció el ceño y volvió a oír la voz de Stella.

«Señor, a Noah no le gusta nada la superestrella. Si quieres conseguir una esposa, ¡Deberías tener en cuenta su opinión! Mi mami siempre me ha dicho que me pedirá mi opinión si quiere buscar un esposo».

Lo que quería decir era que, si Joseph estaba de acuerdo, Hayden también lo estaría.

Desconcertado, Joseph quiso reír y llorar a la vez, preguntando. «Stella, ¿No tienes padre?».

«Tengo, pero desde que crecí, no he visto a mi padre más de dos veces en un año». Stella suspiró como una joven adulta con cara de amargura: «Es triste, ¿Verdad?».

Mientras ella hablaba, ella secretamente midió la expresión de Joseph también.

Joseph de alguna manera podía entender su mente. No es de extrañar que Stella siguiera el apellido de Hayden. Era probablemente porque su padre y Hayden no tenían una relación cercana así que se separaron hace mucho tiempo.

Peor ella todavía se atrevía a criticarlo, ella tampoco tenía suficiente cuidado de su hija ya que ni siquiera sabía lo que su hija realmente quería.

Mientras Joseph analizaba la relación entre marido y mujer, los niños se miraban disimuladamente. En los ojos de ambos brillaban luces que significaban ‘objetivo cumplido’.

…

«¿Estás seguro de que nadie vio lo que pasó allí aquella noche?».

En la cafetería del campo de golf, Violet, que iba vestida con un traje informal, tomaba tranquilamente un café. Mientras sonreía de forma extraordinariamente agradable, saludaba de vez en cuando con la mano al productor que balanceaba el palo de golf al otro lado de la ventana que daba al techo.

Pero en cuanto volvió la cabeza para mirar al agente, su rostro se puso bruscamente rígido.

«No te preocupes, Violet». El agente tenía una mirada relajada.

«Las he interrogado a todas con preguntas indirectas. Aquel día, esas criadas estaban muy ocupadas repartiendo los regalos entre ellas, así que no había nadie en el lugar. Cuando llegaron, el niño ya llevaba un rato tirado en el suelo».

«No es nada difícil ocultárselo a esos tontos. Incluso si alguien lo ha visto, no tengo miedo, ya que una gran cantidad de dinero puede permitir a una persona hacer cualquier. Sólo me asusta el asunto de que Harrison haya pedido que vayan a investigar a la villa, ¿Estás seguro de que no descubrirán nada? Harrison es muy listo».

«Estoy seguro de que no pueden averiguar nada. Cuando envío gente a preguntar a las criadas, ¿Sabes qué dijeron?».

«¿Qué?».

«Dicen que, durante tantos años, nunca han visto a su joven amo traer una mujer a casa, pero te han visto a ti en su cama. En este caso, ¿Crees que seguirán sospechando de ti?».

Cuando se habló de este asunto, Violet se sintió triunfante al instante: «Definitivamente, tengo grandes habilidades. ¿De verdad crees que no he aprendido nada más que a acompañar a Joseph estos seis años?».

El hecho de que a Joseph no fuera mujeriego, era conocido por casi todo el mundo en Ciudad N, que aparte de Violet, no tenía absolutamente ninguna mujer a su alrededor. Mucha gente incluso sospechaba que era g$y.

Respecto a este punto, el agente de Violet también sospechaba eso, pero Violet no se lo tomó en serio.

«No me importa si le gustan los hombres o las mujeres. Lo que quiero no es que le gusten a él, sino el título de joven propietaria de la Familia Beckham».

Mientras conversaban, una figura que estaba a lo lejos se detuvo unos segundos. Después de que la persona viera claramente que era Violet, se acercó entusiasmada: «Violet, qué casualidad, ¿Tú también estás aquí?».

Al escuchar una voz familiar, Violet levanto la cabeza y puso cara de sorpresa. «¿Chelsea? ¿Por qué estás aquí también?».

Chelsea iba vestida con un elegante traje beige y llevaba un bolso Chanel de edición limitada. Se quitó los lentes de sol y mostró un rostro bien arreglado y sonriente.

El agente solo asintió en forma de saludo.

«Acabo de llegar». Chelsea dejó su bolso a un lado: «Se supone que vine a jugar con una amiga aquí pero cuando llegué, de repente mi amiga dijo que tiene algo que hacer así que no puede venir. Estaba a punto de irme, pero entonces me tropiezo inesperadamente contigo».

«Hace más de un año que no nos vemos, ¿Verdad?».

«Sí, estás ocupada ya que sigues actuando en una obra todos los días, a diferencia de mí, que estoy muy libre».

«¿Se me puede comparar contigo? Eres la hija de la Familia Downey, así que no tienes que correr para ganarte la vida como una persona de la industria del entretenimiento como yo».

«…».

Los dos se conocieron durante una recepción de negocios hace unos años. Mantenían una estrecha relación, sólo que últimamente no habían estado en contacto.

Tras un intercambio de cumplidos, Violet le preguntó a Chelsea cómo le iba últimamente. Chelsea suspiró.

«Todo va bien. Pero últimamente he tenido algunos problemas».

«¿Problemas?».

«¿Te he contado alguna vez que tengo una hermana menor, pero que solo compartimos padre? Ha vuelto hace poco, así que mi padre empieza a prestarle atención de nuevo. La última vez había acordado con mi madre que me dejaría la empresa. Pero hace poco ha vuelto a dudar, diciendo que necesita más tiempo para pensárselo. ¿Es posible que no conozca su intención? En realidad, está considerando a otra persona».

«¿Hermana menor?». Violet se sorprendió ligeramente: «¿Cómo es posible que tengas una hermana menor? Nunca he oído a nadie más decirlo. ¿No me digas que es hija ilegítima de tu padre?».

Chelsea frunció el ceño y dijo vagamente.

«Al parecer, existe tal cosa. Se llama Hayden Downey, desde joven no se lleva bien con nosotros. Luego fue a la universidad a estudiar medicina y siempre se quedaba en los dormitorios de la escuela. Nunca ha participado en los eventos de nuestro círculo, así que es normal que los demás no conozcan su existencia».

Cuando Violet oyó las palabras ‘Hayden Downey’, le cambió la cara. ¿Hayden Downey? ¿Chelsea Downey? ¿Por qué no había pensado en eso?

«La detesto muchísimo». El rostro de Chelsea se ensombreció de repente. «Si no fuera por ella, la vida de mi madre y mía debería ser muy fácil. Pero con ella cerca, a mi padre le preocupa que la traten mal, así que siempre la tiene en cuenta en todos los aspectos. Me irrito mucho cada vez que pienso en esto».

«De todos modos, no es tu hermana biológica». Dijo Violet tímidamente: «A ti y a tu madre no les cae bien. Además, es una hija ilegítima, nunca podrá reemplazarte. Busca la manera de echarla, ¿No es muy común este tipo de cosas?».

Chelsea no explicó el asunto de la hija ilegítima. Al oír a Violet criticar así a Hayden, se sintió muy bien. En ese momento, también le contó a Violet parte del pasado.

«No es que nunca haya hecho nada al respecto. Lo hice hace seis años, conseguí tenderle una trampa para que deshonrara a la Familia Downey y así mi padre renunciara con toda seguridad a dejarla heredar el negocio familiar. Pero inesperadamente, ella desapareció en el momento más importante. Era realmente capaz, ya que desapareció durante medio año en el país y luego se fue al extranjero, incluso se quedó allí cinco años».

Al oír esto, a Violet le dio un vuelco el corazón. Sintió que algo no iba bien.

Pero Chelsea seguía parloteando: «A mí no me importaba porque ya se ha ido, pero ¿Por qué vuelve después de cinco años? ¿Qué quiere hacer? ¿Piensa luchar por la fortuna familiar conmigo y esta es la razón por la que volvió?».

Violet recordó a la niña que siempre estaba cerca de Hayden, reflexionó un momento y preguntó: «¿Está casada tu hermana?».

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