La segunda oportunidad en el amor
Capítulo 924

Capítulo 924:

En un principio, Marcus tenía la intención de regresar a su apartamento, pero después de pensarlo un poco, cambió de idea y se dirigió a la mansión de la familia Fowler.

Ya era bien entrada la noche.

Waylen, el padre de Marcus, estaba disfrutando de un cigarrillo. Al percatarse del regreso de Marcus, apagó el cigarrillo y se burló: «Mira qué patético eres, viniendo a casa tan temprano. En mis tiempos, nunca estaría en casa a estas horas. Es vergonzoso».

Mientras tanto, Marcus se aflojó la corbata despreocupadamente.

Apoyado en el sofá, dijo con voz fría: «¡Preferiría no hacer el tonto y tener hijos fuera del matrimonio!».

Ante esto, Waylen se mofó. «¿Ah, sí? ¿Prefieres no hacerlo o es porque eres un inútil?».

Desinteresado en continuar la conversación con Marcus, Waylen se levantó y comenzó a subir las escaleras. Hizo una pausa y miró hacia atrás para decir: «Ya estás en la treintena. Tu madre y yo no pretendemos entrometernos, pero nos preguntamos cuándo podríamos esperar un nieto tuyo.»

«¿No son Alexis y Leonel padres de dos niños? Y Edwin también tiene dos. ¿No es suficiente?»

Waylen se burló: «¿Se supone que es lo mismo?».

¡Ninguno de esos niños, salvo Evelyn, llevaba el apellido Fowler! Waylen había estado esperando ansiosamente un nieto que continuara el legado de la familia Fowler. Regañó a Marcus en ese momento, no sólo por sus expectativas, sino también por los recordatorios diarios de su padre por teléfono.

Tomándose un momento para pensar, Waylen preguntó por la relación de Marcus con Violette.

«Nada digno de mención», respondió Marcus con indiferencia.

Al oír esto, Waylen volvió a burlarse. «Si las cosas van bien entre vosotros, ¿por qué no la traes de visita? Se acerca su cumpleaños, ¿no?

Y no la hemos conocido bien. Además, ¡tenemos que evaluar si es apta para unirse a la familia Fowler! ¡Bastardo! ¡No seas una preocupación constante para tu madre y para mí!»

Con esas palabras, Waylen subió las escaleras.

Marcus permaneció sentado solo.

Marcus se sirvió una taza de té, tomándose un momento para reflexionar sobre las palabras de su padre. Sentía que sus padres estaban siendo demasiado críticos con Violette.

Recordó a Melissa, que era más sencilla e inocente que Violette.

Sin embargo, Waylen la había recibido con los brazos abiertos, mostrando incluso cariño por ella. Marcus era consciente de la razón que había detrás de la aceptación de Melissa por parte de su padre. No se trataba de su origen familiar, sino de que Marcus la quería de verdad.

Sin embargo, la situación con Violette era diferente. Waylen era consciente de que Marcus no la quería de verdad, lo que explicaba su escrutinio.

Marcus no pudo evitar sonreír con pesar, preguntándose si su falta de afecto por Violette era tan evidente que hasta sus padres podían verlo.

Al día siguiente.

Mientras Marcus se abrochaba los gemelos, bajó las escaleras a paso tranquilo.

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