Capítulo 875:

«Sr. Fowler, he descubierto que los padres adoptivos de Melissa visitaron Warsew recientemente. Hubo un enfrentamiento entre la madre de Ryan y Melissa, documentado en la comisaría. Añádase a eso la visita inesperada del Sr. Smith. Creo que está relacionado con el verdadero parentesco de Melissa.

Melissa puede haberse sentido amenazada, llevándola a dejarlo en ese momento.

Y por desgracia, actualmente no puedo localizar a Melissa».

La palidez cubrió el semblante de Marcus.

Examinó repetidamente el vídeo y el mensaje de Sylvia.

Sylvia telefoneó, con tono dubitativo. «Sr. Fowler, ¿deberíamos posponer el vuelo?».

«Aplazarlo una semana», pronunció Marcus, con voz áspera.

Un suspiro de alivio escapó de los labios de Sylvia.

A continuación, Marcus recurrió a todos sus contactos para intentar localizar a Melissa.

A decir verdad, nunca se había planteado los siguientes pasos tras localizar a Melissa. A pesar de su tensa situación, se sintió obligado a garantizar al menos su bienestar.

Además, debía disculparse.

El arrepentimiento le pesaba. Se reprochó haberla maltratado, haberle hecho la degradante oferta de dos millones de dólares por una noche y haberla considerado inútil.

No era ningún secreto que ella era un alma tan frágil.

A pesar de que Marcus había agotado todos sus contactos, Melissa seguía siendo escurridiza. La frustración de Waylen se desbordó, recriminando a Marcus su percibida ineficacia para localizar a Melissa y haciendo hincapié en que su única mujer había quedado indignada.

Marcus se encontró en un estado de ánimo sombrío.

Optando por no regresar a la residencia de los Fowler, Marcus volvió a visitar el apartamento.

Al entrar, le recibió el aroma de una comida preparada.

Una momentánea pausa de sorpresa sorprendió a Marcus. Se dirigió rápidamente a la cocina y llamó instintivamente a Melissa, pero descubrió que se trataba de una criada de los Fowler, no de Melissa.

La sirvienta sonrió. «A tu madre le preocupaba que pudieras saltarte comidas, así que me encargó que te preparara un plato delicioso. Incluso me enseñó a hacer estas chuletas de cordero, cocinadas con vino tinto».

Chuletas de cordero…

Sus pensamientos vagaron involuntariamente a la época en que acompañó a Melissa a hacer la compra al supermercado.

Ese día, se gastó los únicos 300 dólares que Melissa tenía.

Parecía angustiada.

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Nota de Tac-K: Tengan un excelente fin de semana lindas personitas, Dios les ama y Tac-K les quiere mucho. (>‿=)✌

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