La segunda oportunidad en el amor
Capítulo 1367

Capítulo 1367:

Jessie giró la cabeza, evitando la mirada de Jeslyn.

Mientras Albert se alejaba, Jeslyn mantuvo sus ojos fijos en Jessie hasta que desaparecieron en el oscuro pasillo.

De repente, Jessie se sintió mareada, con el corazón palpitándole.

Se agarró el pecho, desconcertada. ¿Por qué sentía lástima por Jesslyn?

Se suponía que estaba resentida con ella.

Lettie cerró la puerta y miró a Jessie con severidad.

«Se han ido. Tienes que dejar de verlos. No importa lo que Albert diga o haga para conquistarte, no puedes volver a verlo».

«Lo sé, mamá», respondió Jessie en voz baja.

Lettie dejó escapar un suspiro de alivio. «¡Bien! Temía que te ablandaras otra vez. Axell es un gran tipo. No descansaré tranquila hasta que te cases con él».

Jessie se sintió incómoda al oír eso.

Sabía que Albert no era su hombre ideal.

Pero tampoco estaba segura de Axell. Sólo había visto a sus padres una vez, pero no había congeniado con ellos.

Pero, ¿quién sabía lo que le depararía el futuro?

Volvió a su habitación. Era medianoche, pero no conseguía conciliar el sueño.

Corrió un poco la cortina, ensimismada.

La lluvia caía con fuerza, como un millón de agujas diminutas que pinchan todo lo que encuentran a su paso.

Vio cómo se abría la puerta del coche negro y el conductor salía, abriendo la puerta a Albert y Jeslyn. Albert apoyó la cabeza de Jeslyn en su pecho y subió al coche. Como no llevaba paraguas, se empapó, pero Jeslyn permaneció seca en sus brazos.

De repente, la niña levantó la vista.

Jessie se asustó y cerró rápidamente la cortina. No quería que Jeslyn se hiciera falsas esperanzas.

Porque ella no podía ser su madre.

Más tarde, Jessie miró a hurtadillas a través de la cortina. Jeslyn apoyaba la cabeza en el hombro de Albert, parecía decepcionada, sus ojos brillantes se nublaban de tristeza…

Jessie se recordó a sí misma que no debía ablandarse.

Fuera, Albert dejó a la niña junto al coche y miró hacia la ventana de Jessie antes de entrar.

Su mirada se detuvo unos cinco segundos.

Luego subió al coche.

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