La segunda oportunidad en el amor
Capítulo 1217

Capítulo 1217:

En lugar de enfadarse, Marcus se rió.

Le susurró al oído: «Sucia putilla».

A Melissa le brillaron los ojos.

Marcus percibió su excitación. Tiró el edredón a un lado e inició otra ronda. «¿Te excita que te diga guarradas? ¿Quieres que te haga sentir bien todos los días? ¿Quieres que te folle todo el tiempo?».

Ella se apartó, murmurando: «Déjalo ya».

Ignorando su protesta, Marcus la besó, sin dejar de decir cosas que la hacían sonrojarse. «Dices que no lo quieres, pero tus acciones dicen lo contrario. Te estás excitando otra vez, ¿verdad?».

Tal vez a los chicos les gustaba este enfoque. Esta vez, Marcus fue más duro.

Al final, Melissa se adormeció en sus brazos, sin molestarse siquiera en limpiarse.

Le dio una palmada en el hombro. «Ve a dormir con Matthew. Le da patadas a las mantas y no queremos que se resfríe».

Marcus levantó a Melissa y la llevó al dormitorio principal. Cuando se quedó dormida, un objeto frío se deslizó por su dedo.

Se despertó y se examinó la mano.

Era un anillo de diamantes.

Marcus la abrazó por detrás. Le dijo con voz ronca: «Vamos a casarnos, ¿vale?».

¿Cómo iba a negarse Melissa?

Sintiéndose tímida, se fundió en sus brazos. Marcus habló con suavidad.

«Matthew empieza pronto el colegio. Acabamos de pasar una noche salvaje. Melissa, ¿no es un poco tarde para hablar ahora de ser reservados?».

Melissa se giró para abrazarlo.

Él se alzaba sobre ella, esbelto y alto, mientras ella se acurrucaba en sus brazos, menuda y acurrucada. Se apoyó en su hombro en silencio antes de murmurar: «Yo también te compraré un anillo, pero me temo que el diamante no será tan llamativo».

Marcus entrelazó suavemente sus dedos con los de ella.

Sonrió. «Los hombres no compiten por eso».

Melissa se sonrojó y se acurrucó contra su cuello, sintiendo cómo le latía el pulso.

Se sintió conmovida y a gusto.

A la mañana siguiente, temprano, se despertó al oír ruidos en el piso de abajo.

Al escuchar atentamente, reconoció la voz de Shawn.

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