La novia más afortunada
Capítulo 652

Capítulo 652:

Johanna procedía de una familia noble de Barnes, mientras que Beal era un White, una de las familias más poderosas de Barnes. Nunca nadie había sido tan irrespetuoso con ellos. La forma en que Brandon los había tratado hoy realmente enojó a Johanna.

«¡Salgamos de aquí, Janet! Me niego a dejar que te intimiden. Ya que Brandon se niega a dar explicaciones, que así sea. ¡No necesitas a un hombre así!» Johanna respiró profundamente y se calmó. Su expresión se suavizó y tomó la mano de Janet para irse.

Janet siguió a Johanna y a Beal fuera de la sala de recepción, aturdida. Después de dar unos pasos, se detuvo en seco y dijo: «Mamá, no creo que sea tan sencillo como creíamos. Brandon nunca se había comportado así antes. Algo debe haberle ocurrido»

En circunstancias normales, era imposible que Brandon se convirtiera en una persona completamente diferente de repente. Aunque hubiera habido un gran malentendido entre ellos, él no se habría mostrado tan indiferente hacia ella.

Se había dado cuenta de que la forma en que Brandon la miraba ahora era distante y fría, como si estuviera mirando a un total desconocido. Era como si el amor que habían cultivado durante los dos últimos años hubiera desaparecido de la noche a la mañana.

Johanna suspiró y miró a Janet con impotencia.

«¿Necesitan los hombres una razón para ser infieles? Janet, la actitud de Brandon demuestra lo contrario».

Al ver que Janet estaba totalmente seria, Beal la miró y le preguntó: «Querida, ¿Realmente confías tanto en Brandon?». Janet asintió sin perder el ritmo.

Confiaba en Brandon con su vida, como él lo hacía con ella.

«Tengo que averiguar por qué está actuando así de repente. Papá, mamá, pueden volver a Barnes primero. Yo me encargaré a partir de ahora».

Johanna apretó la mano de su hija con preocupación.

«Todavía no te has recuperado del todo y Brandon no parece preocuparse por ti. No podemos dejarte sola en Seacisco».

«¿Qué te parece esto? Podemos investigar juntos. Tu madre y yo enviaremos a alguien para que investigue todo lo que le ocurrió a Brandon durante los últimos días después de que se desmayara. Si surge algo, te llamaremos».

Sujetando los hombros de Janet, Beal añadió: «Si necesitas algo, dínoslo. Ya no estás sola, Janet». A Janet se le llenaron los ojos de lágrimas y abrazó con fuerza a sus padres.

Sí, ahora tenía padres y no tenía que luchar sola contra el mundo entero.

Después de que los White se fueran, Janet no perdió el tiempo y se dirigió a la sala de reuniones, con la intención de esperar a que terminara la reunión de Brandon.

Sin embargo, antes de llegar a la sala de reuniones, se topó con Charis. Hacía meses que no se veían, y Charis llevaba ahora el cabello largo. Su larga melena rizada le caía por encima de los hombros, dándole un aspecto afilado y a la vez maduro. Parecía una profesional de la oficina. Charis sonrió en señal de agradable sorpresa.

«¡Señorita White, cuánto tiempo sin verla! Me enteré ayer por Brandon de que estaba usted en el hospital, ¿qué la trae por aquí?”

«¡Señorita Turner, qué coincidencia! Quería preguntarle algo».

«¿De qué se trata?» preguntó Charis con calma, como si estuviera dispuesta a ayudar a Janet.

«¿Qué pasó exactamente con Brandon?». Janet no sabía cómo engañar a Charis para que le dijera la verdad, así que se limitó a preguntar sin rodeos.

«Sabía que me preguntarías sobre esto». Los ojos de Charis brillaron. «En su momento, Brandon pensó que habías muerto y quedó destrozado. Fui yo quien estuvo a su lado mientras pasaba por momentos difíciles. Así que Brandon y yo nos hemos reconciliado».

«Me pregunto por qué Brandon es tan frío conmigo», dijo Janet entre dientes apretados. Apenas podía controlar su ira.

Charis se echó a reír, como si hubiera escuchado el chiste más divertido del mundo.

«¿Cómo diablos voy a saber yo de tus asuntos privados con Brandon? Señorita White, me temo que ha preguntado a la persona equivocada»

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