La novia más afortunada
Capítulo 651

Capítulo 651:

Brandon entró en la sala de recepción.

Era un hombre alto, y el traje gris bien confeccionado complementaba perfectamente su figura. Sin embargo, sus ojos estaban desprovistos de calidez mientras observaba a la gente en la sala.

«Siento haberles hecho esperar. Estaba en una reunión importante hace un momento». Brandon asintió y se sentó frente a Janet. Se apoyó en el respaldo de la silla, con aspecto indiferente y distante.

Janet lo miró con asombro. Al instante sintió que el hombre que tenía delante era completamente diferente. Si no tuviera los mismos rasgos faciales, la misma figura e incluso la misma voz que la de Brandon, habría pensado que el hombre que tenía delante era un completo desconocido.

«¿Te… ¿Te sientes mejor ahora?» Agarrando con fuerza el reposabrazos de su silla, Janet intentó desesperadamente calmarse.

«Mucho mejor. Gracias por su preocupación». Brandon esbozó una sonrisa cortés, pero sólo le alejó aún más.

Sintiéndose incómoda bajo su fría mirada, Janet se aventuró: «He oído que te has desmayado durante el registro. ¿Qué ha pasado? Brandon, pareces… diferente».

¿Qué quería decir eso?

Brandon entrecerró los ojos ante la mujer que tenía delante. Pero incluso después de estudiar su rostro durante mucho tiempo, seguía sin sentir nada.

Por desgracia, no recordaba nada de ella. Hoy, Janet había venido con sus padres. No había forma de que Brandon le hiciera saber que había perdido la memoria, y mucho menos a sus padres. No estaba seguro de poder confiar su secreto a la Familia White.

¿Y si se filtraba la noticia de su pérdida de memoria? Además, su matrimonio con Janet era sólo por negocios. Y Charis le había dicho a Brandon que Janet estaba obsesionada con él.

Él, en cambio, no tenía ningún interés en ella y sólo se había casado con ella para cumplir el deseo de su difunta madre.

«Estoy bien. Sólo estuve internado en el hospital los últimos días y ayer me dieron el alta. No veo nada diferente en mí». El tono de Brandon era plano y sin vida, como si no tuviera interés en prolongar la conversación.

Después de todo, no recordaba cómo se llevaba antes con Janet. Pero tenía que mantener la distancia con ella para que no se enterara de que había perdido la memoria.

Tenía que mantenerlo en secreto hasta estar seguro de que podía confiar en ella. Janet no se lo creyó en absoluto y quiso interrogarlo más a fondo.

Sin embargo, el teléfono de Brandon empezó a sonar. Al mirar el identificador de llamadas, se excusó. «Lo siento, tengo que cogerlo». Se levantó y se dirigió a la ventana francesa, de espaldas a Janet y a la pareja White. Brandon habló brevemente por teléfono y luego lo colgó.

Se dio la vuelta y volvió a mirar a Janet. «Lo siento. Tengo que asistir a una videoconferencia en el extranjero. Si necesitas algo más, puedes hablar con mi asistente».

En cuanto terminó de hablar, se marchó sin esperar la respuesta de Janet. Su asistente se quedó y les preguntó amablemente: «¿En qué puedo ayudarles hoy?».

Asombrada por el comportamiento frío e indiferente de Brandon, Janet se sintió como si estuviera a punto de derrumbarse. Los White también estaban aturdidos y no sabían qué hacer.

Al cabo de un rato, las palabras de Brandon por fin se grabaron en sus mentes. Johanna estaba furiosa. Miró a su asistente con sorna y dijo: «Llámalo. Tenemos que hablar con él y a solas».

La asistente no sabía qué hacer. «Señora White, yo sólo soy la asistente del Señor Larson. Él me dice lo que tengo que hacer y no al revés…»

Beal también puso cara de asco. Nunca se había enfadado tanto en su vida.

«¡No tenía ni idea de que Brandon fuera tan arrogante! ¿Acaso nos toma en serio? ¿Cómo se atreve a despreciarnos así?»

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