La novia más afortunada
Capítulo 536

Capítulo 536: 

«Señor, lléveme aquí». Lila le mostró al taxista la dirección de su teléfono.

«Parece un barrio lejano». El conductor hablaba el dialecto de Barnes con fluidez, y cuando vio la dirección, obviamente se asqueó.

Lila estaba acostumbrada a vivir en la zona rica y nunca había salido del centro. No sabía nada de esa dirección y, mientras fruncía las cejas, preguntó: «¿En serio?».

«Resulta que ese barrio es tan pobre como desordenado. Sé que la gente que vive allí son todos familias pobres y delincuentes. ¿Por qué querrías ir allí?». El conductor miró a Lila.

Iba vestida de pies a cabeza con un atuendo elegante y no daba la impresión de ser alguien que viviera en un barrio tan malo.

Con una sonrisa seca en el rostro, Lila le dijo: «No creo que eso sea asunto suyo. Lléveme allí»

La casa de la Familia Gillian estaba lejos del centro de la ciudad. El conductor condujo el taxi hacia un barrio ruinoso.

En cuanto Lila se bajó del coche, pudo distinguir un edificio de apartamentos resquebrajado y pequeño, que se parecía mucho a las casas encantadas de esas películas de terror. Las paredes daban un aspecto muy ruinoso y un líquido amarillo desconocido cubría las paredes moteadas.

En los pasillos había montones de basura que parecían haber estado allí durante mucho tiempo. Con la mano cubriendo su boca, el corazón de Lila se hundió en su pecho.

Quería romper a llorar, pero no podía hacerlo en ese momento. Sólo pudo contener la sensación de náusea y encontrar el apartamento donde vivían sus padres.

Después, llamó a la puerta de hierro oxidado.

«¿Quién es?»

Un hombre gritó irritado desde el interior del apartamento y la puerta se abrió con un fuerte chirrido. Un hombre con barba incipiente en la barbilla y un gran lunar en la comisura de la boca asomó la cabeza. Apestaba como un alcohólico.

«¿Quién demonios eres tú?»

Lila se asustó ante este hombre y procedió a dar dos pasos hacia atrás. Dudó y dijo: «Yo… estoy buscando a Glenn y Eva Gillian».

Beal le había dicho a Lila que esos eran los nombres de sus padres biológicos.

Glenn la miró de arriba abajo y, de repente, pareció que había entrado en razón. Entonces gritó emocionado a la mujer de la habitación: «¡Cariño, nuestra hija está en casa!».

Una mujer de mediana edad salió corriendo de la cocina de inmediato. El suelo temblaba ligeramente cuando ella salía corriendo.

Su voz era áspera y con un fuerte acento local, dijo: «¿Lila? ¿Es esa mi Lila?»

Al ver a Lila, la mujer de mediana edad abrazó a su hija emocionada: «Me alegro de tenerte de vuelta».

Glenn y Eva se habían enterado por Beal de que Lila iba a volver. Habían planeado originalmente dejar que su hija disfrutara de una vida de gloria y riqueza en la Familia White.

Ahora que Lila había sido expulsada de la casa de los White, ambos estaban decepcionados, pero al mismo tiempo contentos de que ahora volviera a casa con ellos. Lila les dio una mirada de asco.

Cuando percibió el olor acre y extraño de Eva, arrugó la nariz y apartó a la mujer que era su madre.

«¿Qué es ese olor?» No estaba nada contenta desde que entró en la habitación.

Esta casa estaba sucia y en mal estado. Además, todo el apartamento no era ni siquiera tan grande como su habitación en la residencia de la Familia White.

Obviamente, eran gente muy pobre. Se había enterado por Beal de que su padre biológico, Glenn, era propietario de un pequeño negocio. Al principio, Lila pensó que al menos tendría algo de dinero. Sin embargo, resultó que sólo era un hombre alcohólico y desordenado.

En cuanto a su madre biológica, Eva, era toda una pueblerina. No estaba a la altura de sus padres adoptivos, Beal y Johanna.

Lila se estaba desesperando. Apenas podía creer que hubiera nacido de una mujer así. Eva se secó el sudor de la frente y el cuello con torpeza, entonces bajó la cabeza avergonzada.

«Acabo de salir de la cocina y aún no he podido ducharme. No debería haberte agarrado así. Estaba demasiado emocionada hace un momento…».

Miró a Lila detenidamente, con los ojos húmedos.

«Eres exactamente como yo cuando era más joven». Después de escuchar esto, Lila se enfadó más y maldijo en su corazón. ¿Estaba esta p%rra gorda tratando de humillarla?

Las lágrimas de alegría comenzaron a brotar en los ojos de Eva. Se limpió nerviosamente las palmas de las manos sudadas en el delantal y dijo: «Ya que Lila está en casa, vamos a cenar ahora».

Glenn la regañó: «Nuestro hijo aún no ha vuelto» Tan pronto como terminó de hablar, la puerta se abrió desde el exterior con una llave.

Un joven, que tenía el cabello teñido de rojo, entró desde la puerta. Miró a Lila, se encogió de hombros y dijo de forma bastante frívola con el chicle aún en la boca: «¿Eres mi hermana?».

Se giró para mirar el bolso Hermes de Lila y le preguntó: «¿Es real ese bolso? No es una falsificación, ¿verdad?».

Lila tenía muchas ganas de poner los ojos en blanco. El joven que tenía delante no era más que un idiota. La Familia Gillian era muy pobre, pero ella llevaba muchos artículos de marca. Era mimada. ¿Qué era esa actitud arrogante suya?

Lila estaba a punto de volverse loca. Todo en esta casa era una monstruosidad.

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