La novia más afortunada
Capítulo 501

Capítulo 501: 

Janet ladeó la cabeza.

No tenía sentimientos ni emociones profundas por Lila como sus padres.

Las palabras de Beal parecían transmitir que había perdonado a Lila.

Secándose las lágrimas, Lila se giró para darle un vistazo a Janet. «Janet, ¿Te sientes mejor?»

«¿Tú qué crees?» Janet respondió con frialdad. «Me he caído desde una altura de mil metros. Cielos, no volveré a intentar hacer paracaidismo».

El incidente había dejado una cicatriz indeleble en el corazón de Janet. Ahora tenía miedo a las alturas y no volvería a probar ningún deporte de aventura que implicara volar en el aire. Esta experiencia la había marcado para toda la vida.

Janet dio un vistazo a los ojos hinchados e inyectados en sangre de Lila. No había ni siquiera un rastro de arrepentimiento en ellos. Sabía que Lila no se arrepentía, ni se arrepentía de sus errores.

La dramática disculpa de Lila le pareció poco sincera. No pensaba en nada de lo que había dicho. Sin embargo, Beal y Johanna se sintieron mal al ver a su hija arrodillarse ante ellos y disculparse, así que la perdonaron.

Janet tampoco pudo decir nada.

Johanna cogió inconscientemente la mano de Janet, sus ojos brillaban de dolor y culpa.

Si no se hubiera descuidado, Janet habría sido su única y preciosa hija. No habría tenido tantos problemas.

«Lo siento. Todo es culpa mía». Johanna cerró la boca con culpabilidad.

No podía pedirle a Janet que perdonara a Lila. Como madre, creía que todo esto era culpa suya.

Janet apretó los labios y dio un vistazo a su madre.

Las lágrimas se agolparon en sus ojos al ver a Johanna llorar. No quería volver a culpar a Lila delante de sus padres.

«Sólo me quejaba. Papá, mamá, no se preocupen. Lila y yo estamos bien ahora». Janet forzó una sonrisa.

Dirigió una mirada despiadada a Lila, alertándola para que no volviera a meterse con ella.

Teniendo en cuenta que Janet no se rompió ningún hueso, pronto recibió el alta del hospital.

Lo único que admitió Lila fue que no se lo dijo a nadie cuando supo que el paracaídas no funcionaría. No había pruebas que demostraran que había manipulado el paracaídas.

En última instancia, el club de paracaidismo se hizo responsable del incidente. El gerente del club de paracaidismo se sintió perjudicado. Pero teniendo en cuenta que la víctima era la hija de la Familia White y la esposa de Brandon Larson, no tuvo más remedio que indemnizar a Janet por el desafortunado incidente. Después de todo, tampoco tenía pruebas para defenderse.

El Club dio a Janet una gran suma para evitar que manchara su reputación. Ella dio un vistazo al mensaje de crédito en su teléfono y sonrió con amargura.

«Tú siempre has querido ganar mucho dinero, ¿verdad? Tú te das cuenta ahora. Tu sueño se ha hecho realidad».

En el pasado, Janet había querido ganar suficiente dinero para mantener a Hannah.

«Tengo un marido rico y a mis padres tampoco les falta dinero. ¿Qué voy a hacer con todo este dinero?». Janet le guiñó un ojo juguetonamente.

Ethan la abrazó y la besó. «Entiendo lo que sientes, pero no creo que el accidente haya sido causado por la negligencia del club o por las malas medidas de seguridad». Él creía que alguien estaba conspirando contra Janet.

«Entonces, ¿Quién crees que lo hizo? ¿Lila?» Janet le dio un vistazo con los ojos muy abiertos.

«No.» Ethan negó con la cabeza. Había trasladado sus sospechas al entrenador de Lila. Sólo había unas pocas personas en el helicóptero entonces. El entrenador de Janet no lo habría hecho porque también tendría que saltar con ella. Manipular el paracaídas le mataría a él también.

Por lo tanto, el entrenador de Lila era el único sospechoso que quedaba. Sin embargo, justo cuando comenzó la investigación, escuchó la noticia de un horrible accidente de coche.

Un hombre borracho había conducido su coche por la autopista y había chocado con otros tres coches. Uno de los conductores estaba incapacitado y los otros dos estaban gravemente heridos.

El incapacitado era el entrenador de Lila. Ahora se encontraba en estado vegetal.

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