La Novia Fugitiva y el Magnate Misterioso
Capítulo 64

Capítulo 64:

Celia sintió algo raro en el tobillo. Quiso retirarlo, pero Tyson lo sujetó con fuerza.

Los ojos del hombre eran ardientes, ella podía sentir cómo su piel quemaba junto a su sangre centímetro por centímetro. Él sujetó su tobillo con más fuerza, como para ocultarlo en su cuerpo.

Celia se sentía avergonzada.

Ya que la lujuria que se veía en los ojos de Tyson la estaba casi devorando.

Ella volteó su rostro, y miró el abrigo que estaba en el suelo junto a la botella de alcohol que había sido pateada. Luego, le susurró al hombre: «¿Te molesta si soy muy torpe en esto?».

«¿Cómo podría molestarme si te amo tanto?», respondió él con una sonrisa cautivadora.

Celia sintió que sus ojos ardieron aún más. Fue entonces que ella notó que se encontraba desnuda de nuevo.

Así que rápidamente cubrió su pecho con una mano. De repente la mujer sintió un escalofrío entre las piernas, por lo que se apresuró a cubrir esa parte íntima con la otra mano. Estaba tan ansiosa que incluso se sintió algo mareada por los nervios.

Tyson abrazó a Celia con fuerzas, mientras sus labios húmedos y calientes recorrían todo su rostro, desde la frente hasta las cejas, y el contorno de su cara.

«Creo que lo más eficaz sería que me cubras los ojos».

Ella se sintió mucho más avergonzada al escuchar eso.

“No es mi intención…».

«Lo sé», él la interrumpió en voz baja.

La sostuvo entre sus brazos, y luego agregó: «Pero en mi corazón, eres linda de cualquier manera».

La mujer se sonrojó con timidez. Ella quería tomar el abrigo que estaba en el suelo y cubrirse.

Sin embargo, él no iba a permitir que se escapara de sus brazos. Incluso, el hombre bromeó: «¿Qué me quieres ocultar? Ya lo he visto todo».

Celia estaba demasiado nerviosa como para decir algo, así que solo enterró la cabeza en los brazos de Tyson.

Ella no se iba atrever a tomar la iniciativa. Pero tenía miedo de que él pensara que no era lo suficientemente valiente como para hacer algo. El hombre podría no entender lo que pensaba.

Él podía sentir cómo su delicado cuerpo temblaba en sus brazos. Y no pudo contener los rápidos latidos de su corazón. Quería acercarse a ella, pero tenía miedo de que aún no estuviera lista.

A pesar del nerviosismo de Celia, podía sentir que Tyson se estaba conteniendo. Así que, inconscientemente, la mujer envolvió sus brazos alrededor de su cuello.

Fue precisamente por ese movimiento que él perdió por completo los sentidos.

Tyson se inclinó y la besó, obteniendo una respuesta apasionada.

Él besó aquellos labios rojos, succionó aquel aliento dulce y atractivo, y metió la punta de su lengua entre su boca, queriendo fundirse por completo en ella.

Cuando ambos estuvieron en la misma sintonía, él no pudo evitar extender la mano y acariciar sus pechos.

Su cuerpo era realmente hermoso. Sus pechos eran grandes y atractivos, con unos pequeños pezones rosados en la parte superior, los cuales lo atraían para besarlos.

Celia no pudo evitar hacer sonidos de placer, mientras se entregaba a las caricias.

En ese momento, el teléfono de Tyson que se encontraba en la mesita de noche vibró.

Eso había hecho que la mujer volviera completamente a sus sentidos. Rápidamente, ella levantó la colcha y se encogió con timidez.

Luego, miró al rostro deprimido de Tyson. Celia comenzó a recordar todo lo que estaba haciendo hace un momento, los latidos de entonces su corazón se aceleraron anormalmente.

Cuando el hombre vio que la llamada era de Briar, supo que tenía que ser algo urgente. Así que le dio un beso en la frente a la mujer, y le dijo: «Volveré pronto».

Salió del dormitorio, y procedió a contestar la llamada.

“¿Qué pasa?», preguntó en un tono poco amistoso.

«El Señor O’Brien quiere volver a negociar con usted», explicó Briar con cautela.

El hombre frunció el ceño.

“¿Me estás llamando solo por eso?».

Esa mañana, él y el Señor O’Brien se habían visto. La compañía de entretenimiento que tenía quería hacer una cooperación con el Grupo Semshy para filmar una película de ciencia ficción con la condición de que Keira Guerrero, una actriz con un sólido patrocinador, fuera la protagonista femenina.

Pero para Tyson, las habilidades de actuación de la mujer eran realmente malas. Él no había estado de acuerdo en volverla la protagonista, así que la reunión de esa mañana había sido un fracaso.

Pensó que ese asunto había terminado allí. No esperaba que el Señor O’Brien pidiera otra negociación.

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