La exesposa muda del multimillonario
Capítulo 470

Capítulo 470:

Por un momento, Ruth se quedó inmóvil, pero entonces la determinación surgió en su interior. Sabía que no podía dejar escapar esta oportunidad.

Con determinación, Ruth corrió tras Kallie, su torpe andar delataba su discapacidad, pero no le importaba. Sabía que Kallie era su última esperanza.

«¡Señorita Nixon!» gritó Ruth, con la voz entrecortada.

Kallie se giró justo a tiempo para ver cómo Ruth caía de rodillas. Sorprendida, Kallie se apresuró a ayudarla a levantarse. «¿Qué estás haciendo? Si tienes algo que decir, dilo». Ruth se secó las lágrimas, su vulnerabilidad al descubierto por primera vez en años.

«Tienes razón. He perdido mi ambición y llevo mucho tiempo estancada en esta rutina. Pero no estoy dispuesta a rendirme. ¡Yo no plagié! ¿Cómo pueden obligarme a cargar con la culpa de algo que no he hecho? ¿Por qué debo soportar el dolor?».

Mientras las palabras de Ruth flotaban en el aire, Kallie sintió que las piezas del rompecabezas encajaban. Por fin comprendía por lo que había pasado Ruth. Había una razón más profunda detrás de las acciones de Ruth; la verdad era que Ruth y Jenny eran hermanastras, una conexión tan dolorosa como irónica.

La madre de Jenny era la esposa legal, mientras que la madre de Ruth era la otra mujer, atrapada sin saberlo en una red de engaños. Cuando la madre de Ruth conoció al padre de Jenny, Barth Patterson, no sabía que ya estaba casado. Fue engañada y, cuando descubrió la verdad, ya estaba embarazada de Ruth.

Barth prometió divorciarse de su mujer y estar con Ruth, pero la madre de Ruth no quería ser parte de la ruina de la familia. Intentó poner fin a su relación, decidida a liberarse.

Pero Barth se negó a dejar marchar a la madre de Ruth; amenazó con quitarse la vida e incluso juró avergonzarla públicamente como amante si le dejaba. La amenaza era aterradora. Si se corría la voz, arruinaría la reputación de su familia y le costaría el puesto de trabajo.

Acorralada y desesperada, la madre de Ruth aceptó quedarse a regañadientes, aferrándose a su promesa de divorcio. Pasó un año, nació Ruth y el divorcio prometido nunca llegó. Quedó claro que la madre de Ruth había sido engañada todo el tiempo.

Agotada por las mentiras y la manipulación, la madre de Ruth decidió finalmente escapar con su hija, dejando atrás a Barth.

Pasaron los años y el destino jugó una mala pasada cuando Jenny y Ruth acabaron en la misma universidad. El pasado que la madre de Ruth había intentado dejar atrás resurgió cuando Barth vio a Ruth en el campus. La reconoció de inmediato: era su hija, la que había abandonado.

La frágil paz de la vida de Ruth se hizo añicos una vez más. Su madre, ya de por sí delicada de salud, era incapaz de recuperarse de la agitación provocada por su pasado.

Decidida a no dejarse amenazar más, la madre de Ruth decidió enfrentarse directamente a la familia Patterson. Fue a su casa, dispuesta a revelar la verdad a todos, incluida la madre de Jenny.

Sin embargo, sobrevino la tragedia. La madre de Jenny, incapaz de hacer frente a la impactante revelación, saltó del edificio, acabando con su vida. Jenny y Ruth fueron testigos de lo impensable.

Nadie podía prever semejante giro de los acontecimientos. Desde ese día, Jenny sintió un profundo odio por Ruth. La situación empeoró cuando la madre de Ruth falleció y la familia Patterson la rechazó por completo.

Sólo la madre de Barth, Tilda, permaneció a su lado. A pesar de la negativa de la familia, Tilda insistió en que Ruth era su nieta y que no la abandonaría.

A regañadientes, Ruth siguió a Tilda hasta una pequeña casa aislada. Al principio, creyó que era una estratagema de la familia Patterson para mantenerla oculta y asegurarse de que no interfiriera en la vida de Jenny. Pero lo que Ruth encontró estaba lejos de ser una trampa. Era una vida de penurias que Tilda había soportado sola.

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