Capítulo 76:

Con eso, Shantelle firmó los papeles. El único documento que quedaba sin firmar era la solicitud de cambio del apellido de Lucas por el de Thompson, que también se había acordado durante la reunión de aquel día.

Unos días después.

Desde el regreso de los Scott a Warlington, Erick y Clara conversaban por teléfono regularmente con los padres de Shantelle. Lucas se unía a menudo a la conversación, añadiendo más diversión a su video llamadas.

Hasta ese momento, Evan también seguía hablando constantemente con Lucas por la noche. Algunas veces lo hacía desde el trabajo, pero siempre informaba a Shantelle o a William si no tendría oportunidad de llamar a Lucas algún día.

En el hospital, con el Doctor William Scott de vuelta, la ansiedad que Shantelle mantenía por la lista de donantes de órganos se le fue de las manos. Ahora, la responsabilidad volvió a ser de William.

Hasta el momento, ninguna amenaza había resurgido.

Sin embargo, a pesar de volver a su rutina habitual, Shantelle seguía teniendo a sus guardaespaldas, que se turnaban para protegerla. Evan insistió en que se debía mantener de esa manera.

Una tarde, William invitó a Shantelle a su oficina.

“Shanty, hay una invitación de la oficina del alcalde. Va a celebrar una fiesta a la que invitará a directores médicos de hospitales célebres de la ciudad. Como sabes, la familia del alcalde es muy rica. Tienen negocios por toda la ciudad. Ahora, están buscando posibles hospitales para financiar”, le dijo su padre.

“El hospital quería que yo fuera el representante”, agregó William.

“Pero, el evento es una cena elegante con esos trajes de lujo, y tu padre ya no puede aguantar y asistir”.

“Por favor, te ruego que vayas en mi lugar, Shanty. El Doctor Hale se tomó una semana entera de permiso y tampoco puede ir”, agregó William.

“Y no te preocupes, no estarás sola”.

“¿Quieres decir que mis guardaespaldas estarán conmigo?”, aclaró ella.

“No, Shanty. Alguien que conoces también fue invitado a la fiesta”, reveló William, con los ojos hijos en la puerta.

Cuando Shantelle se dio la vuelta, vio a Keith Henderson, entrando con un ramo de flores en las manos.

“¡Shanty! Te extrañé. ¿Cómo has estado?”, le saludó con una gran sonrisa.

“¿Keith?”.

Shantelle aceptó las flores y se abrazaron.

“Había olvidado que venias”.

“Tenía que venir para la fiesta y los negocios, por supuesto”, respondió Keith.

“El alcalde no permitirá que asistan invitados no deseados. Por lo tanto, los guardaespaldas se mantendrán fuera del centro de convenciones, esperando en los coches”, dijo William.

“Así que pensé que deberías ir con Keith. Él cuidará de ti. No estarás sola. En cuanto a promover nuestro hospital, tú eres la más indicada, estás mejor informada, ya que prácticamente lees mi trabajo diario aquí en la oficina”.

Luego de eso, William recibió una llamada del edificio de administración.

“Tengo que ocuparme de algo. Ustedes dos planifiquen su asistencia. El evento es este próximo fin de semana. Cierra la puerta cuando salgas, Shanty”, se excusó.

Al ver marchar a su padre, Shantelle miró a Keith. Luego de su incómoda conversación sobre sus sentimientos, ella había respondido a sus llamadas de mala gana. Lo hizo algunas veces, por respeto.

También la había llamado varias veces para hablar de temas de la cobertura del seguro, por lo que no tenía más remedio que coger las llamadas.

“¿Cómo estás?”, le preguntó.

“Me he mantenido ocupado. Fui a Europa y terminé mi trabajo. Por cierto, me encontré con Karise varias veces. Me dijo que quería hablar contigo”, dijo Keith.

“Si tengo que hablar con ella, pero he estado ocupada”, respondió Shantelle.

Se sentó en la silla.

“¿Arreglaste las cosas con Evan?”, preguntó.

“No sé si podremos arreglamos. No hemos hablado desde entonces. Me había dicho que se las vería conmigo cuando nos encontramos en la escuela de Lucas, pero qué raro que aún no lo ha hecho. En lugar de eso, me está evitando”, admitió Keith.

“De hecho, Wendell no me habla y Sean no para de sacudir la cabeza cada vez que pasa tiempo conmigo. Creo que estoy oficialmente fuera del club de los chicos”.

“Siento oír eso. Evan y tú han sido amigos durante mucho tiempo. Pero estoy segura que al final arreglarán las cosas”, sugirió Shantelle.

“Gracias por las flores. Son preciosas”, dijo mirando las flores.

“Siempre te regalo flores. No debería hacerte sentir incómoda”, dijo Keith, viendo lo diferente que ella estaba actuando con él ahora.

Shantelle suspiró.

“Lo siento. No sé cómo actuar frente a ti y no hacerte pensar que”, respondió.

“No lo haré. Conozco mi lugar”, Keith la interrumpió, sabiendo exactamente lo que ella quería decir.

“Cambiando de tema, sobre el evento… te veré en la fiesta”, sugirió Shantelle.

“Puedo recogerte”, se ofreció Keith.

“No, no hace falta. Gracias, Keith, pero puedo ir sola”, insistió ella.

“Además, mis guardaespaldas nunca me lo permitirían”.

“Ay, sí, los guardaespaldas. Sobre eso… Shanty, siento no haber estado cerca para protegerte”, dijo Keith.

“Estaba… tenía cosas de las que ocuparme”.

Keith quería decir que no tenía el valor de enfrentarse a ella después de haber sido rechazado de nuevo. Estuvo deprimido durante varios días y acabó pasando tiempo con Karise. Al final se dio cuenta que ella era una buena persona para charlar.

“En cualquier caso, sabía que Evan no dejaría que te pasara nada”, dijo luego.

“¿Lo sabías?”, preguntó ella.

Keith tardó un rato en contestar. Asintió.

“Si, sabía que te protegería”, dijo.

“Entonces, ¿Te veré este sábado?”, preguntó Keith, cambiando totalmente de tema.

“Y tal vez, para evitar la incomodidad, ¿Qué tal si traes solo un guardaespaldas y vienen en mi coche? De todas formas no podrán entrar. Pero el lugar estará lleno de guardias de seguridad del gobierno. Es muy seguro”.

“Pues”.

Shantelle se lo pensó.

“Vamos, Shanty. Seré tu caballero protector para la fiesta. No dejaré que te pase nada”, dijo Keith con un guiño.

“De acuerdo. De acuerdo, llevaré solo un guardaespaldas”, concedió Shantelle.

“Además, no ha pasado nada en las últimas semanas. Tal vez el incidente fue por otra cosa, 0 tal vez ese hombre solo quería mi bolso”.

Llegó el jueves y Shantelle recibió una llamada de Evan mientras estaba en el trabajo.

“Shanty, en lugar de llegar el sábado, aterrizaré el domingo. Puedo quedarme allí hasta el lunes para estar con Lucas. Al fin y al cabo, es día feriado. Mi cliente de Rusia llegó hoy, así que no creo que termine a tiempo con mis asuntos”, dijo.

“Ay, esperaba que Lucas pudiera pasar la noche contigo, Evan. Tengo que asistir a una fiesta”, respondió Shantelle.

“Pero está bien, él debería estar bien con mamá”.

“¿Una fiesta? ¿Qué… tipo de fiesta?”, preguntó Evan por la otra línea.

“¿Estarás… conociendo a otras personas allí? ¿Es ese tipo de fiestas en las que hay que vestirse bien?”.

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