La exesposa del CEO es una cirujana
Capítulo 132

Capítulo 132:

“No debió comerse el atún”, dijo Wendell desde una esquina de la sala.

“Creo que fue el queso. Shanty lo señalaba como si le hubiera hecho algo. Pero lo extraño es que, ¿No es Shanty una amante del queso?”, preguntó Sean.

“No creo que sea el queso”, dijo William.

Cruzó tranquilamente la pierna mientras se sentaba en el sofá.

“Mi hija ha comido del queso más oloroso y no le ha pasado nada en el pasado”, describió.

Los mayores estaban tranquilos ante la situación, simplemente sentados esperando en los sofás.

Era Evan quien estaba preocupadísimo.

Seguía caminando de un lado a otro, esperando a que se abriera la puerta de la habitación principal de la villa.

Finalmente, Shantelle salió con Eleanor. Se había puesto ropa nueva y parecía estar recién bañada.

Tenía la cara roja mientras seguía a su madre por detrás.

“Shanty, gracias a cielos. ¿Qué te pasó, esposita?”, dijo Evan, acercándose a Shantelle. Le acarició la mejilla.

“¿Te sientes mejor?”, le preguntó.

Shantelle asintió. Sonrió débilmente.

“Estoy bien, Evan”, contestó.

“Está bien. A mi hija no le pasa nada”, dijo Eleanor.

Levantó dos pruebas de embarazo, que mostraban dos líneas.

“¡Solo está embarazada!”, anunció.

“¡Lo sabía! Pronto voy a poder cargar a un bebé”, gritó Clara mientras todos se quedaban petrificados.

“Yo también me lo imaginaba, viendo a William tan tranquilo”, dijo Erick.

“Esperen. Esperen. Esperen…”, dijo Evan.

Observó profundamente a Shantelle.

“¿Estás embarazada?”, preguntó.

“No, estamos embarazados”, corrigió Shantelle.

“Vas a tener que cuidar de mí y de Lucas a partir de ahora”.

“¿De verdad estás embarazada?”, preguntó nuevamente Evan. No podía creer lo que escuchaba.

¿Acaso estaba recibiendo dos recompensas en una misma noche?

Shanty aceptó casarse con él, ¡Y por fin iba a experimentar el ser padre desde el primer día!

“Estás embarazada. Estás embarazada de verdad”, repitió Evan.

Lo dijo tantas veces que hizo reír a todos los presentes.

“¡Voy a ser padre!”, anunció Evan.

“¡Ya eres padre!”. Shantelle se rio de su reacción.

“¡Papi es tan tonto!”, dijo Lucas.

Evan respiró profundamente.

Abrazó con fuerza a Shantelle delante de todos.

“Quiero decir que por fin puedo ser padre de nuestro nuevo bebé desde el principio”, aclaró cuando la soltó.

Miró a sus amigos y a sus padres.

“Me perdí muchos años con Lucas mientras crecía, incluso cuando estaba dentro de Shanty”, dijo.

“Tu mami me contó muchas historias sobre tus primeras pataditas, cómo te movías por su v!entre y cómo te cargó por primera vez”, dijo mirando a Lucas.

“Pensé en ello muchas veces, imaginé cómo se sentiría. Me pareció increíble. ¿Qué tan feliz me sentiré al experimentarlo yo mismo?”, explicó Evan regresando la mirada a todos.

Evan juró que apreciaría cada momento.

“Papá, te permitiré que me cargues como bebé solo una vez”, dijo Lucas.

Evan se rio de la oferta de Lucas.

“Estás tarde, colega. Ya te he cargado así demasiadas veces. Olvidas cómo te quedaste dormido en algunos de nuestros viajes”, le contestó.

Evan levantó los brazos en posición de cuna.

“¡Así!”, dijo.

“¡Jaja! ¿Cuántas veces?”, preguntó Lucas.

“¡Espero  que nadie te haya visto, papi!”.

Fue porque Evan reveló hace un momento sus deseos que Lucas se ofreció a ser tratado como un bebé solo por esa noche, pero resultó que su padre se había adelantado y lo había hecho mientras dormía.

“¿De verdad lo hiciste, papi?”, preguntó Lucas.

Detrás de ellos, Shantelle se reía de su conversación.

“Bueno, en realidad no como a un bebé, pero te cargué en brazos muchas veces”, respondió Evan finalmente.

“Siempre era tu papá quien te cargaba desde el coche cada vez que salíamos juntos y estabas dormido”, reveló Shantelle a Lucas.

“Pero ya que te ofreciste, entonces déjame tratarte como un bebé”, dijo Evan, estirando los brazos hacia Lucas.

“Vamos, muéstrale cariño a tu papá”.

Lucas hizo un puchero.

Se sintió totalmente engañado. Aun así, no pudo rechazar a su padre a subirse a sus brazos, así que Evan empezó a balancearlo de un lado a otro.

“Mami, ¿Qué canción le cantabas a Lucas cuando era un bebé?”, preguntó Evan.

Shantelle resopló mientras observaba a los dos.

“La de siempre. Duérmete niño”, respondió.

“De acuerdo, ahí va entonces”, dijo Evan.

“Duérmete niño, duérmete ya, que viene el coco y te comerá”.

Lucas se rio mucho, escuchando a su padre cantar la canción.

Shantelle también lo hacía, tocándose el v!entre, completamente entretenida por los esfuerzos de Evan.

“Basta, papi. Basta”, se rindió Lucas.

“Bájame ya”.

“Soy oficialmente un niño grande”, dijo el niño cuando Evan dejó a Lucas en la cama.

“Lo eres”, dijo Evan, pellizcándole la mejilla.

“Gracias por dejarme vivir la experiencia del bebé Lucas, hijo mío”.

Lucas soltó una risita.

“De nada, papi, Cuando nazca mi hermano o hermana, podremos ponerlo a dormir juntos”, dijo.

“Lo haremos, junto con tu mami”, dijo Evan.

“¿Estás listo para ir a la cama?”.

“Si, me gusta quedarme en este complejo. Ojalá pudiéramos quedamos aquí para siempre”, dijo Lucas con un bostezo.

“Volveremos aquí un fin de semana largo, te lo prometo”, juró Evan. Le dio un beso en la frente a Lucas.

“Buenas noches, Lucas”, dijo.

“Buenas noches, papi”, respondió Lucas.

Se giró hacia Shantelle y le dijo lo mismo.

“Buenas noches, mami”.

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