Infinitamente nuestra
Capítulo 21

Capítulo 21:

“Te lo juro, mientras yo viva siempre estaré a tu lado para cuidarte y apoyarte, te lo prometo, ¡Siempre juntos, hasta el sol y las estrellas, aún más allá!”, me dijo y esa frase siempre se quedó marcada en mi mente, él fue mi primer caballero el que prometió cuidarme y hasta la fecha siempre ha cumplido su promesa.

Fin del Flashback.

“¿Aún te pones nerviosa?”, dijo mirándome con una sonrisa burlona, él tenía ese don de saber incluso mis pensamientos, antes que yo misma, como si me leyera y yo fuera un libro abierto.

“Un poco, porque se me nota”, dije toman mi rostro con mis manos, como si trajera en mi frente una letra escarlata, que dice ‘Tonta nerviosa presente’.

“No te preocupes, tu secreto está a salvo conmigo, mientras no se te ocurra vomitarme encima como la primera vez que oficiaste esta ceremonia, entonces estaremos bien”, dijo sonriéndome.

“¡Diablos! Lo siento, no me lo recuerdes aún tengo cargo de conciencia por eso”, dije apenada.

“Solo respira y todo estará bien, aquí estoy a tu lado recuérdalo, siempre”, me dijo y extendió su mano para que la tomara y entráramos juntos al jardín.

Sonreí y tome su mano sin dudarlo por un segundo, lo miré recordé a ese jovencito que me prometió quedarse a mi lado para siempre y que cuando cumplí 13 años me declaro que estaba enamorado de mí y que siempre lo estaría.

“¡Siempre juntos, hasta el sol y las estrellas, aún más allá!”, dije y lo miré.

El giro su cabeza y me regalo una sonrisa maravillosa, que hace mucho no veía, sentí su amor y su ternura al escuchar esas palabras salir de mis labios, se acercó a mí y me dio un beso en la frente,

“Siempre”, me miró fijamente y se inclinó aún más para tomar mis labios en los suyos.

Sus besos me tomaron con ternura, pude sentir su amor incondicional y me sentí protegida en sus brazos, nuestros labios se separaron y él me miro acariciando mi mejilla

“¡Siempre juntos, hasta el sol y las estrellas, aún más allá! Porque te amo Faith, siempre te ame”, me dijo y en ese momento era la primera vez que me lo decía de una manera seria, verdadera y eso por un momento me hizo sentirme nerviosa, algo en mí me decía ‘¡Ten cuidado!’, pero que tonta seria al no escuchar esa voz en un futuro.

POV Arya.

Hace solo unos días que se ha ido Lanox a París y lo extraño demasiado, el que esté cerca de mi hermana no me gusta para nada, me siento intranquila y ansiosa, todos la adoran siempre escucho como se expresan de ella.

Es maravillosa, en fuerte es una gran guerrera, será una gran reina, desde que no estamos juntas pensé que ahora yo podría brillar con luz propia, pero que equivocada estaba, ahora yo me convertí en su sombra.

Sin embargo, esta vez le gané, encuentre a mi mate primero ser la nueva Luna Reina y Lanox será, Faith no podrá quitarme esta vez lo que es mío, pero porque nos sentimos de esta manera Akira,

“Debimos exigirle a Lanox que nos marcara, fue un error no completar la unión antes de que se fuera”, dijo Akira en mi mente preocupada.

“¿Por qué?”, le preguntaba nerviosa, pero ella no me decía nada, solo hablaba con acertijos con palabras confusas, sin decirme la verdad, odiaba eso de ella, pero me decía que lo tenía prohibido, que no podía confesarme todo, que tenía que descubrirlo por mí misma.

Esto me estaba volviendo loca, decidí llamar a Lanox, no quería sonar como al novio celosa, pero necesitaba escuchar su voz y que me dijera que me extraña, fui a la oficina de mi padre y tome el teléfono, siendo loba podemos comunicarnos con nuestro vínculo mental, pero como aún no me ha marcado no tengo una conexión telepática con Lanox.

El teléfono sonó varias veces, sin que nadie contestara hasta que finalmente algún lo hizo, era la voz de una mujer y no cualquiera, era mi voz, era ella.

“Faith”, respire profundo y conteste con seguridad.

“Vaya hasta que alguien contesta, era lógico que serías tú”, le dije esperando no tener que cruzar más palabras con ella.

“No esperaba que fueras tú, ¿Cómo estás?”, me pregunto seria, como si realmente le importara saber de mí, pero a mí no engañaría con su estúpido juego de la hermana preocupada.

“Por favor, como si realmente te importara, además tengo prisa y no eres a quien busco, puedes decirle a mi prometido que conteste, me refiero a Lanox el príncipe, si sabes que es mi mate, ¿Verdad? Por supuesto que lo sabes, papá debió decírtelo, además estoy segura de que está ansioso por saber de mi”.

“Sabes, Lanox ya me hizo suya, a pesar de que aún no me ha marcado, no es porque no quisiera hacerlo, sino porque yo le dije que quería esperar, si vieras como me rogó que lo dejara hacerme suya, a veces es un loco cuando me desea ¡Perdón! Creo que estoy hablando de más, que lástima que aún no encuentras a tu mate, pero cuando lo hagas solo espero que seas igual de dichosa como lo soy yo ahora”, le dije con toda la intención de hacerla sentir mal.

Por primera vez, era yo la que estaba un paso adelante de ella y claro que lo disfrutaría.

“No sabes lo excitante que es sentir cuando él acaricia mi cuerpo, que sus besos recorran mi piel con necesidad, me ama tanto que no puede disimularlo?”, le dije y note como su respiración se agitaba y no dude en sonreír, porque había logrado mi cometido.

“Aquí está él, no te preocupes, no me interesa saber de su vida se%ual”, me dijo con un tono de voz bastante furiosa. Después escuché la voz de Lanox.

“¡Faith! Espera”, dijo él y eso me confundió un poco, acaso ella se iría enojada, lo cual espero sea cierto.

“Arya, hola amor como estas”, dijo Lanox y la alegría regreso a mi alma cuando por fin escuche su voz después de tantos días.

“¡Lanox! Amor mío, no sabes cómo te he extrañado, ¿Por qué no me has llamado? He estado preocupada por ti, acaso ya te olvidaste de mí”, le dije tratando de hacerlo sentir mal por haberme, descuidado en su viaje.

“Claro que no hermosa, yo también te extraño es que he estado muy ocupado, eso es todo”, me dijo sintiéndose culpable, exactamente lo que yo quería.

“Tan ocupado, que no puedes llamar a tu mate a la mujer que amas y que será tu pareja, tu futura Luna, Lanox, ¿Pasa algo?”, le pregunte preocupada, mis celos estaban escalando solo de imaginar que su ocupación era alrededor de mi hermana.

“No Arya, no pasa nada, no tienes por qué preocuparte amor”, me dijo seguro.

“Eso espero, sabes que confió en ti eres mi mate y sé que nunca harías algo que me destrozara el alma, ¿Verdad?”, le pregunte, tratando de que se comprometiera conmigo.

“Arya no tienes de que preocuparte y discúlpame, por haberte descuidado, te prometo que seré más considerado y te llamaré más seguido”, me dijo con sinceridad.

“Eso espero, cuanto tiempo más debes quedarte, los preparativos ya están en marcha, creo que sería mejor que regresaras ¿No crees?”

“Arya, tienes que entender que soy el futuro Alfa Rey y como tal debo poner el ejemplo, cuál sería si me voy a pocos días de haber traído a mis guerreros, te pido que confíes en mí, prometo que pronto regresaré, ¿Ok?”.

“Está bien, confió en ti, te amo Lanox”, le dije esperando escuchar esas palabras de su boca.

“Cuídate Arya, prometo llamarte pronto, adiós”, dijo y colgó la llamada, desde que estamos juntos no me ha dicho una sola vez, que me ama o te amo, lo cual me parece extraño, el enlace de parejas es muy fuerte, yo siento que lo amo y que no puedo vivir sin él.

Quiero gritarle al mundo lo feliz que soy y decirle que lo amo miles de veces, pero él no ha podido decírmelo ni una sola vez y eso me tiene preocupada, pero soy su mate, la única así que mejor me relajaré y trataré de entretenerme en algo mientras regresa y sé perfectamente como hacerlo.

Estaba cerca del bosque donde entrenan los guerreros cuando vi a quien estaba esperando encontrar a Jackson, estaba entrenando y se veía como un verdadero dios griego, las gotas de sudor bajaban por su pecho y eso me estaba calentando demasiado.

Lo miré como un cazador a su presa, no podía dejar de verlo y él se dio cuenta, su mirada encontró la mía y sonreí al verlo, moví un poco mi cabeza invitando a seguirme y él mordió su labio inferior, sé que entendió mi señal, siempre lo hace me conoce perfectamente.

“Eso es todo por hoy, recuerden los ejercicios y los que tienen sus horarios de guardias, espero que lleguen puntual sin excusa alguna, pueden irse”, les dijo a los guerreros y vi como tomaba una toalla para limpiar su sudor y se dirigió hacia mí.

No podía correr el riesgo de que nos vieran, ahora que soy la mate de Lanox, seguí caminando volteando de vez en cuando, para confirmar que él seguía detrás de mí, procurando estar a una buena distancia, para no levantar sospechas.

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