Enamorado de mi ex esposa
Capítulo 97 - Él fue el infiel

Capítulo 97: Él fue el infiel

[Sí, la Señorita Reed tiene razón en que el Señor Farrell podría haberla rechazado y ella no le habría forzado, pero el Señor Farrell aceptó de buen grado, pero después la trató de una manera terrible].

[Ahora dudo de sus sentimientos por la Señorita Gardner; si ama a la Señorita Gardner, ¿Por qué aceptaría casarse con la Señorita Reed? ¿No debería esperar a que ella despertara?] Makenna apretó los dientes de celos al leer estos comentarios.

Ella sabía de quién estaba enamorado Jared; siempre había sido Amber, y había llamado su atención haciéndose pasar por Amber, que había estado intercambiando cartas con él. Si descubría la verdad, todos sus sentimientos por ella se trasladarían a Amber inmediatamente.

«Jared, eres un idiota por hacer eso. Siento el dolor sólo con escuchar sus palabras, pensar que ella lo soporto durante seis años. Supongo que ella te amaba de verdad, mientras que tú no te merecías su amor», dijo Hayden, haciendo una mueca.

Los puños de Jared se cerraron nerviosamente. Detestaba su asqueroso truco de casarse con él mientras Makenna estaba en coma, pero paso por alto el hecho de que podía haber rechazado su petición desde el principio. Durante su matrimonio, incluso permitió que su familia la acosara. Todo había sido culpa suya, y le dolía el corazón sólo de pensarlo.

«Sólo quiero aclarar que no fui una intrusa entre el Señor Farrell y la Señorita Gardner», aclaró Amber, mirando a la avergonzada multitud.

Esa debeía ser la verdad, ya que Amber se atrevió a hacer las declaraciones ante los medios de comunicación en directo. Porque si mentía, la Compañía Goldstone y ella misma se meterían en más problemas, cosa que no podía soportar.

«¿Y qué pasa con el que siga molestando al Señor Farrell después de su divorcio?» Preguntó el mismo periodista.

«Una vez más, no me he involucrado con él; Olkmore no es una ciudad grande, por lo que es inevitable que nos encontremos, sobre todo porque ambos somos gente de negocios. Mientras que anoche en el estadio», explicó Amber con una sonrisa de satisfacción, «los dos recibimos entradas del hermano del Señor Farrell y si supiera que él iba a estar allí, ¡Juro por los cielos que nunca habría ido!»

«Parece que el amor de Amber por ti se ha convertido en asco, jaja», rió Hayden, dándole una palmada en el muslo a la declaración de Amber.

Jared le dirigió una fría mirada antes de devolver su atención a Amber. ¿De verdad se había cansado de él?

«Entiendo que puede ser difícil de creer para ustedes porque cada uno piensa de forma diferente. Pero una cosa que me gustaría señalar es, ¿Por qué iba a involucrarme con un hombre que echó a su mujer de casa para darle la bienvenida a su amante?» Amber continuó con frialdad.

Al oír esto, a Makenna le dio un vuelco el corazón y tuvo un mal presentimiento.

¿Qué estaba intentando decir? Las palabras de Amber hicieron que Jared frunciera el ceño al no saber cuál era su plan.

Cuando los periodistas del público percibieron un tema candente, uno de ellos preguntó rápidamente: «¿Podría explicarse mejor, Señorita Reed?»

«Claro. Alguien en Internet difundió el rumor de que el Señor Farrell se divorció de mí porque le engañé, pero la verdad fue todo lo contrario. En nuestro matrimonio, Jared Farrell fue el que engañó».

Lo único que quería era desarrollar a la Compañía Goldstone, vengar a su padre y vivir una vida tranquila, pero Makenna y su grupo nunca la dejaron en paz.

Así que, ¿Por qué iba a ser amable con ellos?

Su revelación provocó un alboroto en la multitud. ¿Qué? ¿El Señor Farrell fue el infiel?

«Parece que Ambe te pone contra las cuerdas, Jared», dijo Hayden, lanzando una mirada juguetona a Jared.

‘¿Engañar?’ El rostro de Jared se ensombreció, transmitiendo una sensación de frialdad. ‘¿Yo? ¿No fue ella la que me engaño?’ Jared se deprimió al pensar en los hombres que rodeaban a Amber.

«¿Está segura de que está diciendo la verdad, Señorita Reed?» La mano del periodista temblaba de emoción.

La reputación de infiel del Señor Farrell era un tema candente que podía durar semanas.

«Sí. Jared Farrell se había reunido con Makenna en el hospital mientras aún estaba casado conmigo», asintió Amber. «Incluso me exigió que me mudara de la casa para que Makenna viniera».

«Cielos, esto es increíble», la multitud estaba sorprendida.

«Jared, ¿Es eso cierto?» Hayden también estaba sorprendido.

Jared apretó los labios, incapaz de negar la verdad.

«Espera, ¿En qué estabas pensando? Aunque quieras estar con Makenna, no deberías haberle pedido a Amber que se mudara. ¿Te faltan habitaciones en tu casa?» Hayden no podía creer lo que escuchaba.

«Makenna no quería ver a Amber», dijo Jared, con la voz teñida de culpa.

«Si ese es el caso, deberías arreglar que Makenna viva fuera; mudarse a la Mansión Farrell no era necesario», rió Hayden sin poder evitarlo.

Mientras tragaba saliva, Jared optó por ignorarlo. Sabía que estaba mal, pero Makenna acababa de despertarse y no podía soportar decepcionarla.

«Sé que algunos de ustedes pueden pensar que está bien que se reunan, pero lo que quiero decir es que cruzaron la línea moral al hacerlo mientras Jared y yo aún estábamos casados».

Nadie podía argumentar lo contrario, por muy locamente enamorados que estuvieran ambos, no deberían haberlo hecho.

Makenna tembló de rabia al escuchar eso. «Cómo se atreve a hacer algo así». Al revelar esto, humilló tanto a Makenna como a Jared. Aunque no se acostaran, quedar a escondidas seguía considerándose un acto moralmente repugnante, y Jared seguiría siendo considerado un infiel.

Mientras que ella era vista como una tercera persona, incluso si se casaba con Jared más tarde, no serían bendecidos y, en cambio, serían el hazmerreír de la ciudad, que era exactamente lo que Amber deseaba.

Jared pensó lo mismo que Makenna, pero sin el menor atisbo de rabia.

«He dicho lo que había que decir. De nuevo, me gustaría aclarar que yo no era una tercera parte entre Jared Farrell y Makenna Gardner, ni me involucré con Jared después de nuestro divorcio; espero haber dejado claro mi punto de vista, y espero evitar escuchar la misma acusación en el futuro», concluyó Amber.

«En cuanto al autor que difundió la noticia, demandaré a Chloe Mendez por difamarme a mí y a la Compañía Goldstone. También presentaré una demanda contra un total de veinte cuentas de KOL en T%itter y trescientas cuentas personales que me han calumniado y agredido verbalmente en Internet», continuó Amber con severidad.

¿Veinte cuentas y cientos de internautas? El público se quedó sorprendido por las cifras y asombrado por el aura de Amber.

«¿De verdad tiene intención de demandarlos, Señorita Reed? ¿No tiene miedo de molestar al público?» preguntó un periodista.

«Ahora que he decidido llevar esto a los tribunales, no tengo nada que temer. Además, he actuado por motivos de autoprotección y de protección de los derechos, al mismo tiempo que he informado a los titulares de las cuentas y a los internautas de que el acoso en línea es un delito; por favor, esperen mis demandas».

Amber respondió con calma antes de dejar el micrófono y alejarse en muletas, seguida por Sheila.

Cole tomó el relevo y terminó la conferencia con un resumen.

Amber asombró al público; nadie esperaba que tomara la vía legal y los demandara. Muchos internautas se apresuraron a borrar sus comentarios anteriores por miedo a ser demandados por Amber.

Chloe también estaba aterrorizada, así que llamó por teléfono a Makenna de inmediato.

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