Enamorado de mi ex esposa
Capítulo 680 - Ben vino a disculparse

Capítulo 680: Ben vino a disculparse

La voz de Amber era suave y un poco áspera, llena de somnolencia, y sus ojos ni siquiera se abrieron. Aunque no estaba totalmente despierta, le preguntó a Jared por la hora, lo que demostraba que sabía que habían dormido juntos la noche anterior. De lo contrario, no estaría tan relajada sino sentada para preguntarle por qué estaba en su cama.

«Son las 10 de la mañana». Jared consultó el reloj y respondió.

Amber abrió los ojos inmediatamente y exclamó: «¿Qué? ¿Ya son las 10?». Su voz era aguda por el shock.

Amber se sentó apresuradamente y murmuró: «Cielos, es demasiado tarde. Tengo una reunión esta mañana». Rascándose el cabello desordenado, estaba a punto de bajarse de la cama. Pero Jared la sujetó por la cintura desde atrás y la volvió a estrechar entre sus brazos.

Amber estaba tan ansiosa que intentó separarse de Jared. «¿Qué estás haciendo? Jared? ¡Suéltame! Tengo prisa. Necesito lavarme ahora».

«Tranquila». Jared sonrió. «Tu secretaria te ha llamado y creo que debía preguntarte por qué no has venido todavía a la oficina. Pero cuando supo que estabas aquí conmigo, colgó el teléfono en lugar de instarte a ir a la empresa. Así que la reunión no debe ser tan importante, supongo. No estés tan ansiosa, ¿eh? Vamos a desayunar primero».

«Pero…» Amber sabía que la reunión no era tan importante pero no le gustaba llegar tarde al trabajo.

Al verla fruncir el ceño, Jared supo que seguía siendo reacia a llegar tarde. Le tocó ligeramente las cejas y trató de calmarlas. «Sé lo que te preocupa. Pero a veces no es malo llegar tarde al trabajo. Eres la presidenta, así que tienes ese privilegio, y llegar tarde puede ser un acto de disuasión».

Las palabras de Jared tranquilizaron a Amber y disiparon la ansiedad de su corazón. Ella asintió y dijo: «Bueno, si tú lo dices, me tomaré mi tiempo». Sería mejor seguir el consejo. Además, ella sabía que faltar a la reunión no haría mucho daño a la empresa. Ya que había llegado tarde, no había necesidad de apresurarse.

«Bueno, aunque no hay que tener prisa, es hora de levantarse. ¿No tienes hambre?» Preguntó Amber.

Pero Jared puso su mano sobre la de él y jugó con ella. Comparada con la suya, la mano de ella era pequeña y suave, realmente adorable, y él no podía dejar de jugar con ella.

«Bueno, no tengo tanta hambre», respondió Jared y le soltó la mano.

Al ver la decepción en sus ojos cuando bajó la mano, Amber se sintió divertida. ¿Tan especial era su mano? Miró su mano y ciertamente tenía cinco dedos, ni más ni menos. ¿Por qué estaba Jared tan obsesionado con ella?

Entonces, dejó de pensar, se bajó de la cama y se dirigió al baño. Siguiéndola, Jared también fue al baño con la intención de lavarse con ella. Ya lo habían hecho la noche anterior, así que Amber no se lo impidió. Además, ésta era la casa de Jared y ella era su invitada. ¿Cómo podía el invitado alejar al anfitrión?

Después de lavarse, Jared fue al guardarropa a vestirse mientras Amber iba al balcón a recoger su ropa. Había secado la ropa antes de colgarla, así que no temía que no hubiera ropa para cambiarse.

Una vez cambiada la ropa, Jared salió del guardarropa y vio que Amber ya se había vestido y tenía un espejo para maquillarse.

«¿Qué te gustaría desayunar?» Enarcando las cejas, Amber miró a Jared y le preguntó.

Caminando hacia ella, Jared empezó a mirar su ropa. «Bueno, ¿Comemos fuera?»

Dejando el espejo, Amber dijo: «Vale, está bien».

«Podemos ir al Eclipse. La albóndiga de gambas al vapor de allí era tu favorito». Dijo Jared, ajustando su corbata.

Jared se había dado cuenta de que ayer llevaba la misma ropa. Debía pedirle a Ben que le trajera un juego de ropa, pero ella lo rechazó porque le llevaría demasiado tiempo. Pero entonces se le ocurrió a Jared que podía preparar algo de ropa para ella en su casa. Jared se sintió bastante e%citado pensando en la ropa de ella mezclada con la suya en el armario, como el armario de los esposos, y su nuez de Adán se movió ligeramente de la imaginación.

«Vamos». Al ver que Amber colocaba su bolsa, hablo, con la voz áspera por la e%citación.

«Oye, ¿qué te pasa en la voz?» Preguntó Amber preocupada: «¿Todavía te duele la garganta por el alcohol de ayer?». Pero no debía ser así porque su voz estaba bien cuando se despertó. Amber ladeó la cabeza, desconcertada.

Bajando los ojos, Jared dijo: «No, no. Era… sólo tenía sed». Nunca le diría que estaba demasiado e%citado por imaginar el armario lleno de su ropa y quizás la vida que llevarían juntos, o ella se reiría de él.

Amber no sabía cuál era la imaginación de Jared y pensó que su voz era áspera porque no había bebido agua desde la mañana. Así que Amber se agachó para traerle a Jared un vaso de agua. «Toma. Toma un poco de agua antes de salir».

«Gracias». Jared bebió un trago del vaso. No podía negarse o Amber podría descubrir que estaba mintiendo. Cuando terminó el vaso de agua, se dirigieron a la puerta principal.

Pero justo cuando estaban a punto de alcanzar el pomo de la puerta, sonó el timbre.

Jared miró el monitor y vio que el visitante era Ben.

Ben se paseaba de un lado a otro ante la puerta, juntando las manos y respirando profundamente de vez en cuando. El nerviosismo y la preocupación se reflejaban en su rostro.

Amber también vio a Ben y levantando una ceja, le dijo a Jared: «Creo que Ben ha venido a disculparse».

«¿Disculparse?» Jared estaba a punto de abrirle la puerta a Ben, pero al escuchar sus palabras, se detuvo y se volvió hacia Amber en su lugar.

Empujando su cabello detrás de la oreja, Amber dijo: «Bueno, hay algo que me olvidé de decirte. Ayer mientras estabas borracho, Ben también estaba aquí y cuando tu abuela llamó para preguntar por ti, Ben le dijo algo, y lo que le dijo hizo que se desmayara.»

«¿La abuela se desmayó?» Los ojos de Jared se abrieron de par en par y su rostro se ensombreció.

Amber le agarró la mano inmediatamente y le consoló: «Oye, no te preocupes. La abuela está bien. Se ha desmayado porque le ha sorprendido el mensaje. Ayer por la tarde, Ben me dijo que la abuela había recuperado el conocimiento. Debía decírtelo cuando se te pasara la borrachera, pero estaba tan cansada de cuidarte que lo olvidé. Pues bien, acabo de recordarlo al ver a Ben».

Al saber que su abuela estaba bien, Jared dejó escapar un suspiro de alivio. Si a su abuela le pasaba algo, no estaba seguro de lo que le haría a Ben.

Jared alcanzó el pomo de la puerta y la abrió con expresión de asco.

Ben se enderezó y se quedó quieto en cuanto se abrió la puerta. «Señor Farrell», dijo tímidamente.

Jared se limitó a mirarlo fríamente sin decir una palabra.

Ben se daba cuenta de que el Señor Farrell había sabido lo que había pasado ayer y no podía culpar al Señor Farrell por estar enfadado con él. Además, no le sorprendía que la Señorita Reed informara al Señor Farrell sobre esto. Aunque la Señorita Reed no lo mencionara, él mismo se disculparía con el Señor Farrell y por eso estaba aquí.

Por lo tanto, Ben respiró profundamente, se inclinó noventa grados y dijo: «Señor Farrell, siento mucho lo que pasó ayer y todo fue culpa mía. Asumiré todos los castigos».

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Nota de Tac-K: Pasen una linda mañana, muchos muchos ánimos en sus actividades, Dios les ama y Tac-K les quiere mucho. (>‿◠)✌

Nota 2 de Tac-K: Agradecimientos totales por todo el apoyo, gracias Veronica por sumarte al suscribirte n.n

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