Enamorado de mi ex esposa
Capítulo 520 - No es Makenna

Capítulo 520: No es Makenna

Elías se puso en cuclillas junto al cadáver y contestó sin levantar la cabeza: «Saltó del edificio. Su cabeza llegó primero al suelo. Su muerte se debe a una fractura de cráneo. Además…»

Levantó el brazo de Makenna y le pellizcó desde los dedos hasta el hombro.

De repente, parecía confundido.

Los huesos…

Elias sacudió el brazo y agarró el otro. También pellizcó repetidamente desde los dedos hasta el hombro. Luego entrecerró los ojos. Una luz oscura brilló en sus ojos.

«¿Qué pasa?» preguntó Jared confundido por las acciones de Elias.

Elías se levantó y no le contestó. Miró al Oficial Everett. «Envía el cuerpo a la morgue. Haré una autopsia».

«Primero tengo que pedir permiso a mi supervisor», dijo el Oficial Everett con el ceño fruncido.

Elias se quitó los guantes y dijo: «Hazlo cuanto antes. Es esencial para su caso».

El Oficial Everett lo miró y luego al cadáver en el suelo. Tuvo que alejarse para hacer una llamada telefónica.

Jared entornó los ojos hacia Elías. «¿Qué demonios has encontrado? Puedo decir que hay algo malo en el cadáver por su expresión de hace un momento».

Elías se subió las gafas. «Sí, al cadáver le pasa algo. Sospecho que no es Makenna».

«¿Qué has dicho?» Las pupilas de los ojos de Jared se encogieron. Su expresión cambió. «¿No es Makenna?»

Elías tarareó. «Estoy un setenta por ciento seguro ahora mismo. Como sabes, solía ser examinador forense a tiempo parcial en el extranjero, así que conozco los huesos humanos. Cuando toqué los brazos, los huesos de los brazos no coincidían con los de Makenna. Aunque la altura de este cuerpo era similar a la de ella, los huesos eran más grandes que los de ella. Por lo tanto…»

Antes de que terminara sus palabras, el Oficial Everett regresó. «Doctor Lansdale, mi supervisor ha aceptado la autopsia. Gracias por su arduo trabajo».

Elías asintió ligeramente. «De nada. Siempre y cuando me envíe los honorarios de la autopsia a tiempo».

Los labios del Oficial Everett se movieron. «No se preocupe. Lo haremos».

Luego pidió al policía que se quedara con la escena y llevara el cadáver a la morgue.

Elias miró a Jared y continuó: «Tengo el ADN de Makenna en mi hospital. Por lo tanto, voy a extraer el ADN de este cuerpo y compararlo con el de ella. Si el informe muestra que el ADN no coincide, demostrará que no es Makenna. Se ha escapado».

Jared apretó los puños, emanando un aura asesina. Su rostro estaba helado.

«Lo sé. Por favor, sigue adelante. Déjame el resto a mí».

Elias metió las manos en los bolsillos del vestido verde de operaciones y se dio la vuelta.

Jared permaneció inmóvil, observando cómo los policías levantaban el cadáver. Sus finos labios se apretaron con fuerza. Una tempestad de calor surgió en sus ojos,

Creyó a Elias. Este cadáver no era posiblemente el de Makenna.

Antes, en el camino hacia aquí, pensó en muchas preguntas sobre el s%icidio de Makenna, como el momento y la razón.

Por lo tanto, estaba preocupado por si algo inesperado había sucedido.

El hecho demostró que no pensó demasiado.

El incidente inesperado ocurrió: Makenna no se s%icido. Fue su sustituta.

Elias dijo que los huesos no coincidían con los de ella. Además, no se podía evaluar el rostro del cadáver.

Jared miró el edificio.

Recordó que la sala de Makenna estaba en el décimo piso. Ella moriría en el lugar después de saltar, pero su cara no podría estar más allá del reconocimiento en absoluto.

El rostro del cadáver estaba completamente arruinado. Nadie podía saber qué aspecto tenía inicialmente.

Al ver por primera vez este cadáver, Jared se sintió raro y percibió que algo iba mal, pero no pudo saber qué era lo que pasaba.

Hasta que Elias le dijo que no se trataba de Makenna, Jared se dio cuenta de que el rostro no parecía correcto.

Podía estar seguro de que la cara de este cuerpo se había estropeado antes de que la persona saltara. Por lo tanto, cuando aterrizara en el suelo, nadie podría saber de quién era el bocly.

De lo contrario, Makenna quedaría expuesta con una cara diferente.

Pensando en eso, Jared frunció los labios en una línea rígida.

Makenna podría arreglárselas para escapar bajo la vigilancia de la policía y buscarse una sustituta.

Jared se dio cuenta de que la habían subestimado.

Pronto se llevaron el cadáver. Sólo quedaba la sangre sin secar en el césped.

Jared miró la sangre y se dirigió a Amber.

Amber estaba bebiendo el agua comprada por Ben. Al verlo regresar, se apresuró a cerrar su botella y abrir la otra para él. «Bebe un poco de agua, Jared. Te aliviará el malestar».

Aunque sabía que Jared no temía esa horrible escena, creía que se sentiría un poco incómodo después de mirarla durante un largo rato.

Por lo tanto, sería mejor para él beber un poco de agua.

Jared miró la botella de agua y aflojó el ceño. La cogió y dijo: «Gracias».

«De nada». Amber sacudió la cabeza y miró la escena.

«¿Se ha hecho la autopsia? Vi cómo se llevaban el cadáver».

«Todavía no. Lo llevarán a la morgue. Elías ha encontrado algunas pistas». Jared se sentó junto a ella.

Amber se hizo a un lado para dejarle un amplio espacio. «¿Qué pistas?»

«La persona que saltó podría no ser Makenna», respondió Jared sin dejar de mirarla.

Las pupilas de los ojos de Amber se encogieron.

Ben también se quedó boquiabierto. «¿No… no es ella?»

Jared asintió. Les contó las palabras de Elías y sus pensamientos y sospechas.

Amber no pudo encontrar su lengua por un momento al escuchar sus palabras. Dijo agitada: «¿Cómo es posible? Si Makenna no saltó, ¿Quién iba a ser? Está en su tiempo fuera de la prisión, vigilada por la policía las veinticuatro horas del día. Nunca pudo sali. ¿Cómo pudo encontrar una sustituta para saltar? ¿Cómo se escapó? Esto no tiene ningún sentido».

Ben asintió y dijo: «Estoy de acuerdo, Señor Farrel. Es imposible».

Jared bajó la mirada. «Nada es imposible. Makenna no puede salir, pero otros pueden entrar. Siempre que la persona entrara e intercambiara su atuendo con Makenna, ésta podría arreglárselas para esconderse de la policía y salir del lugar.»

«Eh…» Amber y Ben se quedaron boquiabiertos.

Las palabras de Jared tenían sentido. Makenna no podía salir de su pabellón, pero otros podían entrar en él.

Si se confirmaba que el cadáver no pertenecía a Makenna, se demostraría que la sospecha de Jared era correcta.

Alguien entró en el pabellón de Makenna, intercambió su identidad con ella y saltó desde la ventana para montar el espectáculo de que

Makenna se s%icido por escapar de ir a la cárcel.

«Tengo que investigar cómo se las arregló Makenna para encontrar a alguien que fuera su sustituto», dijo Jared con un sorbo de agua y en un tono profundo.

Amber se quedó en silencio y se le puso la piel de gallina.

Justo en ese momento, sonó el teléfono de Jared.

Dejó la botella de agua y sacó su teléfono. Al ver el identificador de llamadas, frunció el ceño. Luego se levantó. «Por favor, disculpen. Tengo que responder a una llamada». «Sí». Amber asintió.

Jared se adelantó, seguido por Ben.

Miró el identificador de llamadas en el teléfono de Jared. Era de la empresa. Sabía que Jared le daría pronto algunas instrucciones.

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Nota de Tac-K: Listos lo capítulos por hoy, pasen una buena tarde, Dios les ama y Tac-K les quiere mucho (=◡=) /

Nota 2 de Tac-K: Como siempre muchas gracias por el apoyo, esta vez resaltando a Xiomara Vivas, Medaly Mendoza, Roxana Mercado, Patricia Gonzáles, Luz del Carmen, Nancy y a Marjorie Murrieta, por suscribirse, ya que es gracias al apoyo que la página puede seguir estando activa y yo pueda seguir traduciendo, thanks.

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