Enamorado de mi ex esposa -
Capítulo 180 - Tratando de entender
Capítulo 180: Tratando de entender
Pero pronto, la alegre burbuja de su corazón estalló por las palabras de Hayden.
Hayden levantó los brazos: «Así que planeo hacer un movimiento y salir con ella. Jared, ¿Qué piensas?» La cara de Jared era sombría.
¿Cómo se sentía al respecto?
No se sentía nada bien.
Pero Jared no quiso decir eso. Bajó la mirada y dijo fríamente: «Haz lo que quieras. ¿Qué tiene que ver eso conmigo?».
Hayden sabía que quería detenerlo, pero se abstuvo de hacerlo, y una luz brillante brilló en sus ojos: «Por supuesto que quería avisarte».
«¿Avisarme?» Los finos labios de Jared se fruncieron en una línea recta.
Hayden asintió: «Sí, después de todo, Amber es tu ex mujer, así que debo decírtelo antes de hacer un movimiento. Para que no te sorprendas cuando Amber y yo estemos juntos en el futuro».
Jared resopló fríamente: «¿Estás tan seguro de que podrán estar juntos?».
«El trabajo duro tiene su recompensa. Mientras me esfuerce, siempre podré impresionarla. En ese momento, Jared, me desearás suerte, ¿verdad?». Hayden le miró.
Los finos labios de Jared se movieron, intentando decir que por supuesto.
Pero cuando las palabras llegaron a su boca, no pudo decir nada.
Hayden no se sorprendió.
Sabía que Jared aún amaba a Amber en el fondo de su corazón, y sería extraño que pudiera darle su bendición.
Hayden se metió la mano en el bolsillo: «Muy bien Jared, ya he dicho lo que tenía que decir. No me detienes ahora, así que espero que no me detengas en el futuro también».
«De acuerdo, no lo haré. Eso es entre tú y ella, no tiene nada que ver conmigo». Dijo Jared ligeramente con una expresión fría.
Hayden sonrió: «¿De verdad? Será mejor que recuerdes lo que has dicho hoy. Si vienes a detenerme en el futuro, no me culpes por no tratarte como un amigo. Bueno, ve a ver a tu prometida. Es hora de que consulte a algunos expertos sobre cómo conquistarla, adiós».
Hizo un gesto con la mano, abrió la puerta y subió al coche.
La razón por la que le dijo esto a Jared fue para eliminar la posibilidad de que volvieran antes de que Jared se diera cuenta de que aún sentía algo por Amber.
De este modo, aunque descubriera que era a Amber a quien amaba, sería demasiado tarde. Jared no podría hacer otra cosa que verlos juntos.
Pensando en ello, Hayden le mostro una sonrisa significativa a Jared y se alejó.
Jared se quedó allí, mirando fríamente la dirección por la que se marchaba Hayden, sus manos a ambos lados estaban fuertemente apretadas, y el ambiente a su alrededor era aterradoramente tenso.
Hayden se enamoró de Amber, e incluso planeó conquistarla. Hace dos meses, Hayden no sentía nada por ella, y ni siquiera tenía contacto con ella.
¡Fue él!
Fue él quien tomó la iniciativa de presentar a Hayden a Amber, hizo que se hicieran amigos y creó esta situación.
En este momento, Jared no podía decir cómo se sentía. En resumen, se sentía muy incómodo.
Makenna se acercó a él y le preguntó suavemente: «Jared, ¿Qué estás mirando?».
Jared bajó la mirada y dijo en voz baja: «Nada».
«¿El Señor Cohen se fue?» volvió a preguntar Makenna.
Jared asintió con la cabeza.
Makenna le cogió del brazo y le dijo: «Jared, ¿Qué te ha dicho? Parece que estás de mal humor».
«¿Estoy de mal humor?» Jared la miró con ojos parpadeantes.
Makenna asintió: «Sí, como si alguien te hubiera robado algo que te pertenece».
Jared pareció ligeramente sorprendido.
¿Le habían robado algo?
Estaban hablando de Amber. Hayden se enamoró de ella. ¿Podría ser la razón por la que estaba de mal humor?
¿Porque pensaba que Hayden se la había robado?
«Jared, ¿Qué te pasa?» Al ver la imprevisible expresión de su rostro, Makenna hizo un gesto frente a él.
Jared recuperó el sentido común, bajó la mirada y cubrió las dudas de sus ojos: «Está bien, Makenna, tienes que volver por tu cuenta».
«¿No vas a llevarme a casa?» dijo Makenna con asombro en sus ojos.
Los ojos de Jared parpadearon: «Tengo algo que hacer, lo siento».
Luego entró directamente en el coche y se marchó, dejando a una Makenna molesta en el lugar.
Jared condujo hasta la Bahía de Kelsington.
Iba a buscar a Amber, intentando averiguar por qué cada vez que la veía, sus emociones se veían afectadas por ella, y quería saber por qué se enfadaba tanto cuando Hayden y Cole entraban en contacto con ella.
Aunque la voz de su corazón le dijera que no fuera, no se molestó en seguir escuchando.
Tenía que averiguarlo, de lo contrario, ella siempre le afectaría.
Media hora después, llegó.
Jared se quedó un rato en el estacionamiento y entró.
Pronto llegó el ascensor.
Jared salió del ascensor y vio la puerta de su apartamento. Estaba abierta, y una voz se escucho desde dentro: «Cariño, ¿vamos?».
¡Era Cole!
¡Cole en casa de Amber!
Su rostro se torno furioso, y luego se detuvo inconscientemente. La idea de tratar de averiguar todo se desvaneció.
«Vale, vamos». En este momento, la voz de Amber también se escucho.
Entonces, salió del apartamento.
Amber levantó la cabeza como si tuviera un presentimiento, miró hacia adelante, vio a Jared y frunció el ceño.
«Cariño, ¿Por qué te has detenido?» Cole salió después de cerrar la puerta, y se quedó perplejo al verla de pie frente a él.
Amber respondió: «Jared está aquí».
«¿Dónde?» Cuando Cole escuchó el nombre, se le cayó la cara de golpe.
Dio un paso adelante como era de esperar para ver a la persona que tenía delante, y preguntó en tono agresivo: «¿Qué haces aquí?».
Jared lo ignoró y se quedó mirando a Amber con ojos profundos, como si quisiera ver lo más profundo de su ser.
Amber se sintió un poco incómoda al verle y frunció los labios rojos: «Señor Farrell, ¿Qué ocurre?».
Sus ojos brillaron.
Vino a averiguar por qué le afectaba todo el tiempo, y por qué cada vez que la veía acercarse a otros hombres, se sentía incómodo.
Pero ahora que Cole estaba a su lado, no podía preguntar.
Jared dijo con sus ojos claros: «Estoy aquí para disculparme con usted».
«¿Eh?» Amber frunció el ceño.
«¿Disculparse por qué? ¿Le has vuelto a hacer algo?» Cole regañó a Jared con enfado.
Jared siguió ignorándolo y miró a Amber: «Makenna los malinterpretó a ti y a Hayden en la cafetería antes, me disculpo por ello».
«No es necesario. Sus disculpas son demasiado frecuentes como para tener álgún valor. Sé que no será la última vez. Estoy cansada de oírlas, así que deberías dejar de hacerlo». Amber abrazó el brazo de Cole y dijo: «Cole, vamos».
«De acuerdo». Cole sonrió contento y se dirigió hacia el ascensor con ella.
Al pasar junto a Jared, Amber lo miró de reojo: «Además, por favor, no venga aquí en el futuro. Me meterá en problemas, ¿Entiende?». Cuando terminó de hablar, se adelantó.
Jared aún podía escuchar a Cole preguntándole: «Cariño, ¿Qué quiso decir con eso de que los malinterpretó a ti y a Hayden en la cafetería? ¿Por qué no me llamaste cuando fueron a tomar un café?»
«No fui a tomar café con él, tenía algo de que hablar con él», respondió Amber.
Pero pronto, las voces desaparecieron junto con la puerta cerrada del ascensor, y se volvió a asentuar el silencio.
Jared miraba fijamente la dirección por la que se marcharon, y su corazón se sentía vacío.
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