Enamorado de mi ex esposa
Capítulo 1382

Capítulo 1382:

“Ya veo”. Asintió sin decir más nada.

Al ver eso, la asistente dejó de hablar porque no quería emocionarse demasiado y decir que su cliente era en realidad el Presidente Farrell.

Cuando llegaron a la sala, el séquito de maquilladores empezó a trabajar. Su equipo estaba formado por maquilladores y estilistas profesionales, que eran muy conocidos en la industria de la moda.

Muchas muchachas adineradas y artistas del espectáculo soñaban con que las maquillaran, pero rechazaban a casi todas. Debido a su estatus, la gente común y corriente no podía contratarlas aunque tuvieran dinero.

Pero para Jared, invitarles no era un problema y su prometida Amber tenía el honor de que la produjeran con sus delicadas manos. Con el estatus de Amber, ella ni siquiera podría relacionarse con ellos y mucho menos invitarlos.

Como era de esperar de los más importantes de la industria, sus técnicas de maquillaje eran perfectas. Amber se miró en el espejo después de que la maquillaran.

“¿Qué le parece, Señorita Reed?”, preguntó la asistente. Mientras tanto, los otros maquilladores la miraban nerviosos.

Si fuera otra clienta, no se habrían puesto así por lo que ella pensara. Al fin y al cabo, confiaban mucho en sus habilidades y nunca habían tenido ningún problema técnico que las dejara insatisfechas.

Para presumir un poco, los clientes solían ser quienes temían expresar su descontento y siempre tenían cuidado de no ofenderlos, ya que no querían que los rechazaran cuando volvieran a contratarlos. Sin embargo, eso solo se aplicaba a sus otros clientes. No se atrevían a actuar con orgullo delante de Amber, ya que contaba con el apoyo de una persona importante.

Por eso, no podían permitirse ofenderla, así que claramente estarían atentos a sus preferencias. Si no quedaba satisfecha con el resultado, lo arreglarían sin quejarse.

En definitiva, era un cambio de imagen en el que habían puesto mucho empeño, así que temían que no le gustara. Además, no se atrevían a llevarle la contra, aunque estuviera insatisfecha, y estaba claro que estuvieran nerviosos.

Aunque Amber no se dio vuelta, se dio cuenta de las expresiones tensas de todos a través del espejo y comprendió lo que les preocupaba.

“Por supuesto, estoy satisfecha. Su trabajo es estupendo. Es imposible que no esté contenta“, dijo sonriendo.

Al sentirla sinceridad de las palabras de Amber, respiraron aliviados y por fin pudieron tranquilizarse. Mientras tanto, la asistente también suspiró aliviada y soltó una risita.

“Estoy encantada de que esté contenta con los resultados. ¿Ya quiere ponerse el vestido?”

“De acuerdo”. Amber asintió y señaló la caja de regalo que había llevado”, Está dentro.

La maquilladora más cercana se acercó a la caja en la dirección que ella había señalado.

Entonces, procedió a abrir la caja de regalo de color rojo brillante mientras todos miraban.

“¡Es tan bonito!” exclamaron cuando todos, a excepción de la asistente, vieron el vestido por primera vez.

“¡Los diseños de la Señora Sofía nunca decepcionan!

Ya me imagino lo lindo que le quedará a la Señorita Reed”.

Dicho eso, todos miraron a Amber, esperando que se lo pusiera. De repente, se convirtió en el centro de atención. Entonces se rio entre dientes, tomó el vestido y entró al baño de la sala para cambiarse. Ya que todos querían verlo, ella lo haría; al fin y al cabo, estaba destinada a usarlo.

Pronto salió y en cuanto lo hizo, todos se quedaron boquiabiertos. Incluso la asistente no podía apartar la vista porque estaba deslumbrante.

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