Enamorado de mi ex esposa
Capítulo 1293

Capítulo 1293:

“De acuerdo, los entregaré ya misma”.

Después de confirmarlo con un asentimiento, Remi tomó los documentos y dijo: “Presidenta Reed, me retiro”.

Amber agitó la mano.

“Ve. Gracias por tu ardua labor”.

“Presidenta Reed, es usted demasiado amable”, Dicho eso, Remi sonrió y se volteó para irse. No obstante, de pronto recordó algo y se detuvo. “Por cierto, hay algo de lo que no estoy muy segura si debiese decir”.

“Dime”. Amber elevó levemente el mentón para que continuara.

Cuando Remi obtuvo su permiso, no vaciló en pararse de manera adecuada y explicó: “Presidenta Reed, fui al Departamento de Recursos Humanos esta tarde. Nosotros, en el Departamento de Secretaría, pensábamos en contratar a un nuevo asistente, así que fui a Recursos Humanos para preguntarles si había algún candidato adecuado.

“Ajá. Escuché algo al respecto”. Amber asintió con la cabeza. “¿Qué sucedió a continuación?”

Sabía que ese no era el asunto que su secretaria quería comentarle.

Como era de esperar, Remi respiró profundo y continuó: “Luego, escuché a alguien del Departamento de Recursos Humanos que mencionó a Sheyla y dijo que los llamó esta mañana para pedirles que prepararan una carta de renuncia y se la enviaran por correo”.

“¿Cómo?” La expresión de la otra mujer cambió un poco. “Si no escuché mal, mencionaste una carta de renuncia, ¿Verdad?”

¿Sheyla pidió una al Departamento de Recursos Humanos?

“Sí”. Remi asintió para confirmar.

La expresión de Amber se tornó sombría y frunció el ceño.

“¿Sheyla quiere renunciar?”

“Por la situación actual, parece que sí”.

Después de que escuché eso, fui a preguntarle a uno de los empleados de Recursos Humanos para confirmar y para asegurarme de que no estuvieran difundiendo noticas falsas. Luego, el empleado me dijo que era cierto y que recibieron una llamada de ella.

Según el director del Departamento, se quedó impactado cuando escuchó la noticia y quería notificarle a usted, pero Sheyla lo detuvo. Especificó que no Le dijeran por el momento, así que dudaba en si debía decirle o no.

Si se Lo decía, iría en contra de la voluntad de Sheyla, pero, si no, me sentiría mal por ella porque es una época extraña para renunciar. Además, ha estado con usted desde hace mucho tiempo y ambas tienen una buena relación; así que, después de pensarlo, creí que debería informarle porque también espero que pueda preguntarle por qué quiere renunciar. Todos tenemos una buena relación con ella y no queremos que lo haga.

Además…

“Además, ¿Qué?” Amber la miró.

Remi se mordió el labio y se veía insegura sobre algo. Unos segundos después, se armó de valor y apretó los puños antes de mirar a su jefa.

“Presidenta Reed, sucede lo siguiente, tengo una sospecha. Creo que la repentina renuncia de Sheyla significa que le sucedió algo. Según lo que entiendo de ella, le encanta este trabajo, así que no renunciaría sin ningún motivo.

No intentó renunciar cuando estuvo embarazada e incluso después de que quiso ab%rtar no tuvo la intención de irse. Fue hasta su cirugía que de pronto mencionó la renuncia. Creo que algo debió sucederle con la operación, lo que provocó que su salud se deteriorara y no pudiera continuar con este trabajo.

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