Enamorado de mi ex esposa
Capítulo 1269

Capítulo 1269:

Antes de que Jared pudiera hablar, Amber ya le había tendido la mano a Ben.

“¡Muéstrame! Quiero ver las fotos”.

Ella quería saber cómo Cole y sus hombres golpearon a Connor; tenía mucha curiosidad por saber el desenlace. Jared volvió a mirar a Amber que estaba ansiosa y al final asintió: “Muéstranos.

“De acuerdo” contestó su asistente.

Metió la mano en el bolsillo y sacó su teléfono; luego pulsó dos veces sobre la pantalla, lo giró y se los mostró. La pareja se inclinó un poco hacia adelante para poder ver mejor las fotos; en efecto, Amber vio una imagen. No era muy nítida porque la habían ampliado; de hecho, se veía un poca borrosa, pero pudieron vería bastante bien.

En una de las imágenes, Connor estaba apoyado en el muro derruido y tenía el rostro gravemente herido; se veía tan desagradable que solo a una madre podría gustarle su semblante.

Presentaba sangre en la nariz y también en la comisura de los labios; además, tenía un ojo hinchado, ya que lo tenía cortado. No solo eso, sino que parecía muy desaliñado.

Sin duda, su rostro se veía desfigurado, e incluso su cabello, que siempre lucia prolijo, estaba desarreglado; ya no parecía digno y sabio como ella solía verlo en el pasado. En la foto, el hombre parecía tan patético y miserable como un mendigo.

El costal marrón que le cubría la mitad inferior del cuerpo llamaba la atención. Era evidente que lo acababan de liberar y solo le dejaron al descubierto la cabeza y la parte superior del cuerpo; la inferior seguía cubierta con el costal.

“Vaya, se ve espantoso”. Amber se recostó en el asiento y chasqueó la lengua con ligereza.

Jared elevó las cejas y se reclinó sin hacer comentarios; Ben, por su parte, guardó el teléfono y bromeó: “Sí. Por las heridas que tiene, puedo darme cuenta de que la gente que lo golpeó apuntó a su rostro mientras le daban una buena paliza.

Estimé que también tiene heridas en su cuerpo, pero nuestros hombres solo pudieron tomar las fotos desde una distancia por temor a que los descubrieran. Por este motivo estas imágenes no tienen buena definición; de lo contrario, podríamos ver su estado con claridad”.

Luego, Jared curvó un tanto los labios y sugirió: “Eso no es un gran problema, solo averigua a qué hospital fue Connor y consigue el informe.

Es así de simple, ¿No?”

Ben volvió a darse una palmada en la pierna y dijo: “¡Tiene razón! ¿Cómo pude olvidarme? De acuerdo, le pediré a nuestros hombres que investiguen este asunto”.

Tras eso, bajó la cabeza y comenzó a redactar el mensaje que decía: Me pregunto a quién habrá ofendido Connor esta vez para que le dieran una golpiza. Quizás podemos tomar la iniciativa de aliarnos; después de todo, el enemigo de mi enemigo es mi amigo. Tal vez ellos saben algo acerca de ese hombre que nosotros desconocemos. Entonces, podemos intercambiar información y así será fácil si queremos accionar en contra de él en el futuro.

Amber agitó la cabeza, indicando que no sabía mucho acerca del Señor Stockert; de hecho, no sabía tanto de Connor como ellos. Jared se dio cuenta de la reacción de la mujer de nuevo y se rio por lo bajo porque eso confirmaba su especulación.

“Te vas a decepcionar. La gente que le dio una paliza a Connor no sabe mucho sobre él, así que no obtendrás lo que quieres”.

Apenas dijo eso, Ben y Amber se dieron vuelta y lo miraron al mismo tiempo.

“¿Cómo puede estar tan seguro, Señor Farrell?” le preguntó el asistente mientras que la joven también tenía curiosidad por saber la respuesta.

Jared lo ignoró y se rio con suficiencia ante Amber.

“Mandaste a alguien a que golpeara a Connor, ¿No?”

Sorprendida, ella abrió los ojos de par en par, luego se quedó pasmada. Ben estaba aún más perplejo, tanto que la miró incrédulo y gritó de manera estridente: “¡¿Qué?! Señorita Reed, ¿Ordenó a alguien a que lo golpeara?”

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