Enamorado de mi ex esposa
Capítulo 1267

Capítulo 1267:

La Anciana Señora Farrell quería que Jared entrara en razón, así él podía lanzarse y animar a Amber. Cuando él recobró la compostura después de que la Anciana Señora Farrell se lo recordara, ella asumió que halagaría a su pareja, pero para su grata sorpresa, enseguida la abrazó, lo que excedió sus expectativas; un abrazo era más efectivo que los halagos.

En efecto, ella era anciana, así que sus ideas eran un poco conservadoras, pero no importaba, siempre y cuando Jared fuera audaz y directo.

La Anciana Señora Farrell esbozó una gran sonrisa cuando vio que la pareja se abrazaba. la Señora Murphy notó la sonrisa de alegría.

Si bien no sabía por qué estaba tan feliz, se sintió aliviada y tranquila.

Por otro lado, Amber al final recobró los sentidos en brazos de Jared. Levantó los brazos para empujarlo, tratando de apartarlo, pero a diferencia del empujón cuando la había besado más temprano, en esa oportunidad ejerció menos fuerza.

Después de todo, la Anciana Señora Farrell y la Señora Murphy los miraban, pero ella no pudo apartarlo, aun empujándolo con toda su fuerza. Por lo tanto, le acarició la espalda levemente, ruborizada, indicándole que la soltara.

Si era honesta, le había dado mucha vergüenza cuando él decidió demostrarle afecto frente a otros. Sin embargo, aunque Jared comprendía o que ella le insinuaba, no tenía intención de soltarla y, en cambio, la abrazó con más fuerza y la acercó, lo que provocó que Amber se pusiera tensa.

“Jared, ¿Qué haces? Suéltame, la abuela y la Señora Murphy están viendo” susurró, acercándose, tras suspirar con resignación.

“No, no quiero hacerlo”. Con una mana, la abrazó por la cintura y, con la otra, le acarició el cabello de forma gentil.

“No me tienes que envidiar, ya que tú también tienes una familia; como somos pareja, mi familia también es tuya. Le dijiste a la abuela que deseabas que te tratara como a una nieta, ¿Te has olvidado? Así que somos tu familia y tú también puedes tratarla como si fuera tu abuela”.

Amber enseguida quedó paralizada cuando escuchó el comentario y la mano quedó inmóvil en el aire.

“¿P-puedes leer la mente?” Abrió grande los ojos por la sorpresa.

“Sabía lo que pensabas con mirar tus ojos” dijo entre risas. “Además, la forma en la que me mirabas evidenciaba un claro deseo, así que es natural que adivinara lo que pensabas”.

Amber se apoyó en su hombro y se rio.

“Me conoces tan bien; siento que no puedo ocultarte nada”.

“Así es. Demuestra que podemos ser honestos entre nosotros, ¿No?” Le acarició el cabello suave y sedoso de forma cariñosa.

“Tienes razón”. Sonrió de forma alegre.

En ese momento, se había olvidado por completo de la Anciana Señora Farrell y la Señora Murphy. Cuando Jared la abrazó, se había puesto nerviosa porque no se imaginó que sería tan cariñoso frente a las mujeres. No obstante, se conmovió cuando escuchó su cálido consuelo e ignoró lo que sucedía a su alrededor por completo.

Todo lo que podía percibir era al hombre que la abrazaba y la ternura que sentía por él. Mientras tanto, a la Anciana Señora Farrell y a la Señora Murphy les causaba gracia ver a la pareja acurrucarse.

“Señora Murphy, ¿Ves lo conmovida que está Amber? Me pregunto qué le dijo Jared para hacerla sentir así” le preguntó levantando la mirada hacia ella, quien estaba a su lado.

“¿Cómo saberlo, anciana señora?” la Señora Murphy sacudió la cabeza. “Pero supongo que fue un comentario romántico que pudo animar a la Señorita Reed de forma instantánea”.

“Tal vez”. la Señora Murphy asintió.

“Anciana Señora Farrell”.

En ese momento, una criada entró desde el pasillo de la sala de estar. Amber reconoció a la persona de inmediato; no era otra más que Olivia, a quien Jared había asignado personalmente para que la cuidara cuando perdió la vista. Olivia entró y saludó a la Anciana Señora Farrell antes de darse vuelta hacia Jared y Amber y sonreírles.

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